Miradas y Secretos. {Editando}

Capitulo 17

Después de dos días...

Los días habian pasado sin ninguna noticia importante. Yo, encerrada en mi habitación buscando respuestas en el ordenador sobre mi madre. Lo único que habia encontrado eran mas ejemplares sobre el asesinato de mi padre. Punto. Nada más. 

Mis tios no me hablaban y yo no tenía la intención de hablar con ellos, sinceramente. Cada vez que estabamos Daniel y yo en el sofá viendo la televisión, por ejemplo, y aparecía mi tia o mi tio, o ambos, todo se volvía muy incómodo; la tensión era innegable. La casa estaba mas dividida que nunca: Daniel y yo contra mis tíos.

Vuelvo a centrar mi vista y mis pensamientos en el libro que sostengo en mis manos hasta que oigo como alguien toca la puerta, seguramente sea Dani.

—¡Pasa!—grito.

Abren la puerta y me encuentro una gran sorpresa: mi tío.

Entreabro la boca ligeramente, perpleja ante su presencia aquí. Noto como me empiezo a poner nerviosa y alterada.

—¿Qué quieres?—le digo secamente.

Mi tio suspira, con un semblante serio. A continuación, cierra la puerta tras de él y se sienta en el pico de mi cama.

—No es necesario que me hables así, Sara.—responde firme, juntando las manos en sus puños. Esto no pinta nada bien.

Doblo al esquina de la hoja por al que me he quedado leyendo y cierro el libro, dejándolo en el suelo.

—¿Cómo quieres que me dirija hacia ti, sino?

Carlos se toca la nuca nervioso, y me mira. Sus ojos grises muestran...¿arrepentimiento? ¿culpa? No puedo sostenerle la mirada mucho tiempo; mi tío siempre ha tenido una posición intimidante.

—No he venido a discutir, Sara. Es hora de que esto acabe.