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—Básicamente renuncié.
—respondí mirando el suelo.

—¡Estúpida debes volver!
—amenazó mi nueva amiga.

—Eso ya lo sé Silvana.
—respondí.

—¡¿y qué esperas para llamar a Carrie!?
—reprochó ella en medio del campus de la universidad.

Ganando algunas miradas ajenas a nuestra conversación.

—¿ahora?
—pregunté como estúpida.

—obvio que sí, han pasado tres días desde que no vas.
—cogió mi teléfono como si nada y marcó el número de Carrie.

Lo puse en alta voz y caminamos hasta llegar debajo de un árbol para crear algo más confidencial.

—¿Aló?

Oímos desde el otro lado, tragué saliva y aclaré mi garganta.

—Señora Carrie...lo lamento.
—murmuré con arrepentimiento.

Vaya que sí.

hubo un breve silencio desde la otra línea y es entonces cuando ya comenzaba a llegar el arrepentimiento.

Silvana me miró con un gesto de; "No cortes la llamada  por que te mato"

dame otra oportunidad por favor...
—logré emitir.

—Rose, te daré otra oportunidad solo porque no tengo otra opción.
—dijo Carrie para finalizar.

Me quedé con cara de; "Lo tomaré, pero me ofende muchísimo"

—¡Muchas gracias, estaré ahí mañana!
—agredecí contenta.

                            ***

Mi despertador sonó a las siete y media de la mañana y me preparé  un rico café, tomé una ducha y me hice un peinado.

Salí corriendo y tomé un bus.

Cuando llegue abrí la puerta con la llave y para mi fortuna no había nadie, porque no quería me vean con cara de desaprobación.

Preparé el desayuno para Jonah y saludé a Sawyer, quien me recibió como mucho amor.

Espero que Jonah también me reciba de esa forma...

Subí las escaleras con el desayuno y toqué la puerta suavemente.

No hubo respuesta.

O al menos eso creí, porque la puerta se abrió inmediatamente y Sawyer entró como loco. Dejé el desayuno encima de su mesita y ni siquiera quise buscarlo con la mirada.

Crucé el umbral de la puerta, estaba decidida a bajar, pero sin embargo me quedé frunciendo el ceño antes de bajar.

JONAH NO CERRÓ SU PUERTA.

—¿Eres tú verdad?
—escuché que preguntaba.

Tragué saliva y suspire acercándome a la puerta.

—Me llamo Laura.
—cambié la voz por una más chillona.

Una risa suave se escapó de él.

—El hecho de que esté ciego no significa que no pueda reconocerte Rose, reconozco perfectamente tu perfume.

Sus palabras me dejaron anonadada y volví a asomar mi cabeza por la puerta de su habitación.

—Además tu eres la única que deja entrar a Sawyer en mi habitación.
—admitió murmurando.

—¿Cómo?

—Las personas que me cuidaban anteriormente, temían que Sawyer haga algún tipo de desastre conmigo.
—comentó con una risa.

—¡Es un buen perro!
—Admití acariciando a Sawyer.

—Exacto.
—dijo él desde la oscuridad.

Mientras acariciaba a Sawyer, sentí como Jonah salía desde la oscuridad y se colocaba a mi lado.

Mi respiración comenzó a acelerarse al darme cuenta de que era más alto que yo, no quería mirarlo porque quería que él me lo dijera.

Su mano llegó hasta la pequeña cabeza de Sawyer y rozó algunos dedos conmigo.

Mi corazón palpitaba con fuerza y no voy a negar que disfruté de sus pequeños roces.

—¿Estás enojada conmigo?
—preguntó suavemente a mi lado.

Su voz tranquila y suave llegó hasta mis oídos y tragué saliva con dificultad.

¡no podía creer que se animó a salir de su aburrida oscuridad!

—Mmmm...no.
—respondí con dificultad.

Su mano se detuvo en la mía y comenzó a recorrer por todo mi brazo.

—¿Qué.. haces....?
—pregunté de nuevo con mucha dificultad.

—intento encontrar tu rostro.
—admitió subiendo su brazo.

Inmediatamente me alejé y comencé a sonreír con malicia.

Sabía con exactitud lo que Jonah quería hacer, pero no le dejaría.

—No te lo voy a permitir Marais.
—dije con Malicia.

El quería conocer mi rostro a través de sus tactos, pero como dije, no le voy a permitir porque él tampoco se deja ver...¡Bum te pago de la misma manera bitch!

—ya entendí por qué.
—dijo con él  con una risa.

reí con él y me dejé caer en el piso a su lado sin mirarlo, por supuesto.

—¿te propongo algo?
—pregunté como niña.

—puede...
—murmuró con intriga.

—Voy a dejar que me toques el rostro solo si te dejas ver ¿vale?
—propuse con una sonrisa a pesar de él no podía verme.

Una risa se escapó de nuevo por parte de él.

—primero tendrás que ganarte mi confianza Rose.
—advirtió como si eso fuera lo más difícil.

—Eso no será difícil..
—murmuré.

—¿Ah si? ¿Por qué?
—preguntó intrigado de nuevo.

—Porque decidiste salir de tu escondite y tuviste la confianza de querer tocar mi rostro.
—expliqué orgullosa.

—¡rayos Rose!—se quejó con una risa.
—Eso significa que te falta poco...

—¡si!
—farfulle emocionada.

Y vaya que estaba emocionada,  porque faltaba muy poco para eso y estaba dispuesta a todo.

Porque si pude lograr sacarlo de su escondite, eso significa que también puedo sacarlo de su casa y volver a reunir a sus amigos.












¡Rose volvió!
Logrará la Rosa su objetivo?)
¡no se pierdan el siguiente capítulo de rosa de Guadalupe con Rose xdxdxd.

Ah no?
No es la rosa de Guadalupe?
Sorry!
Espero que les haya gustado el cap chicas

In The Dark (Jonah Marais)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora