Fighting Against Yourself | HYUNSUNG

XXIX

-Chan, ¿qué hacemos ahora? - Preguntó Seungmin. Al no tener que ir a buscar a Minho, lo primero que Chan dijo no se podía cumplir.

-Nos dividiremos. Unos sacarán de aquí a Woojin y se lo llevarán rápidamente para que no se den cuenta. Otros irán a sacar a Changbin. - Chan nos miró a todos y continuó. - Changbin va a ser el más difícil para sacarlo de aquí. Así que Felix irá a por Woojin.

-¿Por qué yo no puedo ir a por Changbin? - Preguntó Felix alzando la voz.

-Es peligroso, y tu podrías destrozar el plan debido a tus sentimientos. - Respondió Chan tranquilamente.

-¿Qué plan? - Preguntó Hyunjin.

-Entraremos Jisung y yo a por Changbin. - Chan empezó a explicar su plan. Me sorprendí cuando dijo mi nombre. Me esperaba que fuera con alguien que trabajara aquí. ¿En qué estaba pensando Chan?

Cuando terminó de explicar su plan. Nos dirigimos hacia una puerta bastante bien escondida que llevaba a una zona privada. Protegiéndola, para que nadie pasara, estaba ahí plantado un hombre con cara de pocos amigos que hacia el doble de Chan y yo sumados.

Bajé la cabeza y Chan me agarró del brazo haciendo ver que me llevaba allí como si me hubiera pillado para trabajar aquí.

-Es un independiente. Trató de llevarse clientes. - Le dijo Chan al segurata con una cara y voz muy sería. El hombre que protegía la puerta la abrió para dejarnos pasar y una vez que estuvimos dentro, volvió a cerrar la puerta.

-Qué fácil ha sido, ¿no? - Dije con voz baja para que nadie me escuchara.

-Sí, pero mejor que no hables y sigas actuando. - Nos detuvimos delante de una puerta y Chan se acercó a mí para susurrarme algo. - Detrás de está puerta está el jefe, así que, por favor, haga lo que haga, no dejes de actuar. - Noté un escalofrío por todo el cuerpo, Chan había hecho que verdaderamente tuviera miedo de haber entrado aquí y que empezara a ser consciente de la complicación que tendríamos para sacar a Changbin de aquí.

Chan llamó dos veces a la puerta y la abrió lentamente.

-Jefe, voy a pasar.

-Hombre, Chan, ¿Qué te trae por aquí? Y, ¿qué traes contigo? - Aquel hombre... mierda, el plan de Chan no iba a funcionar. Cerré los ojos y agaché la cabeza esperando que no me viera la cara.

Escuché como se acercaba a mí y me cogía del mentón para levantarme la cara y poder verla bien.

-¿Pero qué tenemos aquí? - Preguntó con una media sonrisa.

-Jefe, este chico es un independiente y vino a quitarnos clientes... - Chan estaba dispuesto a seguir hablando hasta que ese hombre decidió continuar.

-Bang, no hace falta que me expliques nada de este chico. Nos conocemos perfectamente. ¿Verdad, Jisung? - Chan y yo nos miramos de reojo. Él estaba muy sorprendido y yo solo podía rezar y rezar todo el tiempo para que el plan saliera bien. - Parece que sin mi no puedes vivir, ¿no? Entonces tienes que quitarme clientes. - Hizo un paro para coger aire y seguir hablándome. - ¿Cómo está tu madre, ha muerto ya? - "Jisung, Jisung, sabes que no debes pegarle, saldrías perdiendo, él es más fuerte que tú, y si lo haces no lograremos sacar a ninguno de los chicos de aquí." Debía convencerme a mi mismo. - No vas a hablar, ¿verdad? - Suspiró. - Bang, llévatelo a dentro, luego decidiré que hacer con él. - Chan asintió y entramos por otra puerta la cual solo se podía asistir desde el despacho del jefe.

-¿De que te conoce? - Preguntó Chan ya habiendo pasado y cerrado la puerta.

-Cuando mi madre entró en coma tuve que ganar dinero de algún modo. - No tuve que explicar nada más para que Chan entendiera mi situación.

Cuando el pasillo terminó, nos encontramos con varias puertas. Una para cada tipo de trabajadores en ese local. Chan seguía agarrándome el brazo sin darse cuenta y así me llevaba a donde quería. Nos detuvimos delante de la ultima puerta.

-Jisung. No solo sacaremos a Changbin de aquí. Así que debemos correr. - Entonces miré mi brazo de reojo y Chan se dio cuenta de que aún no me había soltado. - Lo siento... - Frunció el ceño en modo de disculpa y finalmente entramos a la habitación. Estaba llena de tatamis juntados entre ellos. Dormían todos en el suelo. Todos se quedaron mirándonos. Chan cerró la puerta detrás de él. Nos acercamos a ellos, que estaban sentados en el suelo como si estuvieran en una reunión.

-Chicos, venimos a sacaros de aquí. - Dijo Chan como un héroe de película. Dos de los chicos que estaban allí sentados se levantaron a abrazarlo y empezaron a suplicarle en forma de susurro. - Yugyeom, Kunpimook. No os preocupéis. - Chan miró por encima de ellos para ver a los demás que estaban allí sentados. - ¿Dónde está Changbin? - Los dos chicos que lo abrazaban se separaron de él y señalaron a uno de los tatamis.

Chan se acercó a donde le habían señalado y se arrodilló sobre aquel tatami.

-¿Changbin? - Una mano asomó de dentro de la sabana y la bajó para dejar ver su cara.

-¡Chan! ¿Qué haces aquí? - Una voz alegre sonó desde aquella parte de la habitación. Todos nos quedamos mirando.

-¿Qué te ha pasado en la cara? - Preguntó Chan asustado. Me acerqué a ellos lentamente. Changbin tenía la cara llena de marcas: heridas, sangre seca, morados... ¿qué le había pasado?

-Bueno, no me dejaron ir a la enfermería, así que, bueno, aquí estoy. - Chan cerró los ojos al escuchar aquella profunda voz que trataba de fingir alegría eso la hacía más dolorosa. - ¿Es cierto que nos vas a sacar de aquí? - Chan abrió los ojos y asintió con la cabeza.

-¿Ha venido Felix? - Preguntó Changbin preocupado. Chan volvió a asentir y le sonrió.

-Está esperando fuera. - Continuó Chan.

Changbin trató de levantarse, debía de tener heridas por todo el cuerpo, le costó bastante levantarse aun teniendo la ayuda de Chan. Quería ver a Felix, esa era la motivación de Changbin para moverse a pesar de el dolor que debía estar soportando. Esa escena era hipnotizante, como si de una película de drama romántico se tratara.