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Después de una agradable cena en la casa de sus mayores, TaeHyung y JungKook se fueron a su hogar, con la ezperanza de poder hablar tranquilamente, decir sus puntos de vista, y tal vez, sólo tal vez, TaeHyung llegue a confesar lo que tanto le atormenta.

Bajaron sus maletas y abrieron su casa. Estaba todo tal y como lo habían dejado. Terminaron de entrar y cerraron, subiendo a su cuarto sin decir ni una sola palabra. Sacaron todo de sus maletas, acomodando la topa que no utilizaron y mandando al canasto la ropa sucia, que era la mayoría.

Ambos tomaron un baño por separarado, necesitaban relajarse después del viaje tan largo que habían hecho. Después de que nos estuvieran vestidos con las pijamas puestas, se acomodaron en la cómoda cama, recargando se en la cabezera, mirando hacia enfrente, aun sin hablar.

TaeHyung jugaba con sus manos nerviosamente, mordiendo y lamiendl sus labios de forma ansiosa, dando a entender que estaba igual o más nervioso que JungKook, quien sentía su corazón palpitar tan rápido que estaba seguro que en cualquier momento se saldría.

-Yo...

-Tae...

Rieron bajo al hablar al mismo tiempo tratando de comenzar la conversación.

-Está bien, habla primero.-JungKook cedió la palabra.

-Uh... Pues... Para empezar, a pesar de haber hablado de camino a aquí, siento que quedaron cosas por aclarar y al parecer tu también lo sentiste.-TaeHyung todavía no miraba a JungKook, pero logró ver un movimiento de cabeza por parte de éste.-Ya te dije lo que me atormentaba, pero falta algo más que no te dije...

-Tienes toda mi total atención.-JungKook lo tomó de las manos, tratando de transferirlo confianza.-Sabes que puedes confiar en mí Tae, así que adelante.

-Yo...-El nudo en su garganta no le permitió seguir hablando. Sintió sus ojos comenzar a picar por el sentimiento de que se estaba ahogando, su garganta se cerraba y abría con cada respiración, pero seguía sintiéndose asfixiado.

-¿Tae?-JungKook lo miró preocupado.

Necesitaba una mentira.

No están reparado todavía para decirle a JungKook, y era tan jodidamente difícil. No se atrevía a ver a JungKook, lo que lo hacía más complicado aún. Ya habían tenido tres platicas antes de ésta, y aún así no podía hablar abiertamente.

Sabía que JungKook estaba esperando una respuesta, pero no la tenía, no estaba listo todavía. Respirando profundamente miró a JungKook a los ojos.

-Me sigue doliendo lo que me dijo tu madre.-Por fin soltó.-Sigue haciendome dudar si es correcto estar contigo o debería simplemente alejarme para siempre... -Y aunque no era la verdad completa, se permitió abrirse más al castaño.

-No.

Respondió de inmediato el más chico de los dos, lágrimas de impotencia bailando en la comisura de sus ojos al notar que TaeHyung continuaba afectado por aquella visita, culpandose por eso. Lo atrajo en un abrazo necesitado, pegándole muy fuerte a su pecho sin necesidad de ser asfixiante al escucharlo sollozar con fuerza, siéndole imposible aguantar por más tiempo sus propias lágrimas.

-No te iras de mi lado jamás, así termine destruido.-Cerró los ojos al notar su camiseta comenzando a empaparse por las lágrimas de su novio.-No me importaría quedar totalmente roto si eres tú quien me rompe.

TaeHyung sollozó aún más fuerte al escuchar las palabras de JungKook, sintiendo la culpa, ya tan familiar, nublar cada uno de sus pensamientos.

Sé que a ti no te importa bebé, pero a mí sí.

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Come Back To Me [KookV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora