Todos los personajes pertenecen a la obra de Sailor Moon e Naoko Takeuchi.
Esta historia la escribí hace años, todo lo escrito es producto de mi imaginación.
Contiene lemon.
La fiesta de recaudación en el exclusivo hotel Moonlight para el hospital de niños Santa Maria, que organizo Ikuko Chiba. Fue un éxito total vino desde gente famosa hasta la más alta sociedad, nadie quería faltar a este acontecimiento tan importante. En el momento que estaba en su pleno apogeo, fue cuando veo a Setsuna con un vestido negro escote corazón que apenas le llegaba a medio muslo, hablando con un joven alto, pelo corto y ojos marrón oscuro, con un traje de dos piezas hecho a mano. Tarde en reconocerlo ya que no llevaba sus anteojos de pasta negro, era Joe Johnson, uno de los ejecutivos de la cadena de joyerías Cristal de Plata. Al acercarme a ellos detienen su conversión.
- Buenas Noches, señor Chiba- me saluda con media sonrisa Joe.
- Buenas noches Señor Johnson, Señorita Meiou- me inclino un poco, agarro la mano de Setsuna besando su muñeca.
- Buenas noches, señor Chiba-con voz suave y dulce.
- Si no le molesta señor Johnson, me la llevo un rato conmigo. Quiero hablar con ella de un tema.
- Muy bien. Nos vemos luego Setsuna.
Camina hasta desaparecer por una puerta que lleva al gran salón.
- Darien - ronronea mi nombre.
- Vamos - una sonrisa lobuna se dibuja en mi cara.
"La noche que voy a tener con ella". Le agarro la mano para ir al jardín de flores, llegan a mi nariz el olor a Jazmines y rosas que abundaban en el lugar. Entre risas y besos. Nos ocultamos detrás de un gran árbol, nos besamos apasionadamente nuestros lenguas bailaban. Sentí la urgencia de tenerla dentro mío. La empujo suavemente hasta la pared y nos besamanos con pasión. Mi mano roza un pezón haciendo que gima tan fuerte que parecía que tenía un orgasmo.
Le subo la falda del vestido hasta la cintura, la agarre a horcajadas por las nalgas para levantarla. Setsuna se agarró de mis hombros, me rodea con las piernas cruzándolas por mi espalda.
" No aguanto más". Con una mano le corro la tanga.
-No, Darien.
-¿Porque? - mordiendo le la oreja.
-No tengo ganas.-Alejándose, se arregla la ropa.
-Bueno te dejo ir, pero antes mira este brillante...
Resopla, gira para mi lado.
-... Mira lo. Relajate. Escuchar mi voz te relaja, tus párpados te son pesados. Te comienzas a relajar, te sientes segura. Comienzas a sentir paz. Sientes libertad. Y sientes como tu voluntad te abandona. Y te conviertes en una persona sumisa y obediente, caerás en estado de relajación extrema, donde el único pensamiento que tengas es de satisfacer me. Setsuna te complacerá obedecer me y hacer lo que te diga es maravilloso y me dirás todo lo que diga, ahora.
Queda su ojos rojos con una perdida y vidriosa.
-Muy bien di porque no quieres tener sexo conmigo, ahora.
-Porque, estoy harta de ser una de tu juguetes, presumiendo de que te casarás con Beryl Queen, una mujer intachable, digna y virgen. Cuando todos saben que ella es una mala persona, roba novios y maridos. Que se acostó con todos lo que están en esta fiesta, menos vos y tres más.
-Muy bien, antes de irme, te quedarás con las ganas de que te haga mía, Soñarás que te hago mía. Y dejarás de decir esa mentira de Beryl. Cuando chasqueo los dedos despiertas y no te acuerdas nada.
Chasqueo mis dedos. Inclino mi cabeza un poco hacia adelante.
-Hasta luego Setsuna.
Me mira sorprendida, me alejó de ella. "Mejor me voy a casa a darme una ducha bien fría, maldita sea. Esta también me dejo caliente como una pava".
Decepcionado volvía a casa en la limusina agarro un vaso de whisky con hielo al tragar un sorbo, lo escupo. Al ver que en la esquina estaba Serena. Ordenó por teléfono al chófer que pare. El chirrido del freno llamo la atención de los dos. Al acercarme, Serena que estaba en brazos de un pandillero pelinegro con una cola de caballo, con remera y pantalón de cuero negro. Se esconden detrás de él, pálida como la nieve en cuanto me reconoce.
-Serena sube al auto. ¡Ya!.
Con voz enajenado. Con mis guardaespaldas detrás mío.
Entonces el pandillero con sus ojos azules me mira con cara de pocos amigos.
-cualquiera es gallo con custodia,- escupe el piso.
-Suelta a mi hermana. Ya.Dentro de mi limusina Serena estaba llorando desconsoladamente.
-¿Por qué-hipo- Lo haces?, ¿porqué me has humillado de esta manera?, ¿No puedo tener novio?. Darien.
Con los ojos llenos de lágrimas.
-Traren.
Serena queda con la mirada vidriosa.
-¿Quién es él?.
-Seiya Kou.
-A partir de ahora, te escapas de él, te repugna sus caricias y sentirás miedo cuando este cerca tuyo. ¿Entendido?.
-Sí, mi amor.
Sonrió. Me bajo la bragueta sacando mi amiguito sale de su prisión.
-Jadeite, da vueltas, avisa a los otros que hasta que no termine de reprender a Serena no vamos a casa. - con tono seco, cuelgo el teléfono. - Ahora, Serena, sacate toda tu ropa incluso la ropa interior. Luego te sientas sobre mi en horcajadas.
A medida que sacaba su ropa sentí que mi corazón se aceleraba como si corriera una maratón, mis ojos se maravilla con tanta belleza "es mi venus de Milo. Solo para mí". Luego con una pierna a cada lado de mi, con una mano agarro mi miembro para colocar la cabeza en la entrada de su interior. Luego con mis manos alrededor su cadera la empujo hacia abajo de un golpe, penetrandola violentamente haciendo que tire para atrás su cabeza apretandose los labios para no gritar de dolor. Con mi mano le atraigo su nuca.
-Besame.
Serena pone detrás de mi sus brazos, mientras me cabalgaba, nos besamos con pasión, sentí que mi corazón se aceleraba hasta salir de mi pecho, cuando sentí que me quedaba sin aire, me separó un poco, para llenar la de besos en el cuello para luego ir a chupar un pecho, con una mano le acarició su espalda, provocando temblor en su cuerpo perlado de sexo. Siento como una corriente eléctrica sacude mi cuerpo para finalmente terminar dentro suyo llenando su cueva con mi semilla. Con la última estocada salgo dentro de ella chorreando nuestro jugos, lo limpio con un pañuelo descartable. Ya satisfecho. Sonrió.
-Bueno Serena- le doy pañuelos descartables - toma, limpia te nuestros jugos. Y luego vistete y toma asiento a mi lado.
Cuando hizo todo. Le ordene.
-Cuando lleguemos a casa saldrás furiosa de este auto por lo que te rete. ¿Entendiste?.
- Sí, mi amor.
-Jadeite. Lleva nos a casa,-acariciando su muslo -Recuerda lo que te dije. Lirsa.

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El Daprie
RandomSerena Tsukino una joven estudiante universitaria; enamorada de su controlador y malvado hermanastro, Darien Chiba. Este por más que esta comprometido en matrimonio con la virginal Beryl Queen, el siente un oscuro deseo sexual hacía su muñeca inflab...