El Daprie

Capitulo 7

Todos los personajes pertenecen a la obra de Sailor Moon e Naoko Takeuchi.

Esta historia la escribí hace años, todo lo escrito es producto de mi imaginación.

Contiene lemon.

Al ordenar mi cuarto venía a mi mente lo que me estaba pasando en estos días. Mi falta de memoria de lo que hago o porque me duele mis partes intimas, siento que me sonrojo, " seguro que sos sonámbula y te violas lo primero que encuentras". Me lo repite cada vez que me ve Mina.
En eso suena mi celular que lo encuentra debajo del montón del montaña de ropa sucia. Vi en la pantalla que era Rei, lo mire extrañada ya que se caso con su marido jedite no nos vemos como antes.
- Hola Rei.
- Hola Serena te llame porque no me puedo comunicar con Darien. ¿ Esta en la casa?.
- No. Esta en una reunión de la empresa. Y creo que viene un poco más tarde. Pero, te parece seguir engañando a tu marido.
- Serena, no seas celosa, lo que pasa es que tienes envidia. Ya que Darien solo se fija en morochas, no en rubias como vos.
- Eso es mentira - un poco avergonzada de que sepa la verdad de que estoy enamorada de Darien.
-Mira Serena se nota a la legua que te gusta.
- No es verdad, ahora me gusta otro
- De enserio. Bueno no me importa. Entonces iré a la noche a verlo.
- Bueno nos vemos.
"No me extrañaría que sea para que tenga sexo con ella. Como si no me hubiera dado cuenta que ella esta caliente por él, pero me da lastima su marido que es un buen hombre". Encojo mis hombros siguiendo la limpieza de mi habitación.
Mas entrada a la noche cuando termine de bañarme, oigo unos pasos. Era él. Que venia de la oficina. Con la corbata desabrocha, camisa arrugada y arremangada hasta por encima del codo. En una mano traía su maletín en la otra su saco. Con una expresión al vacío, se notaba que estaba cansado.
Abre la puerta del estudio con la mano de la camisa. Me mira a los ojos fijos.

- Serena. Traren. Ven para acá.
Comienzo a besarla con un anhelo. Era lo que quería hacer hoy. En la junta lo única que deseaba era estar con ella, preguntando que estaría haciendo.
Con mis manos le saque la playera negra con la frase ESTA GATITA TIENE GARRAS, con letras doradas. Se la sacó por arriba, acelerando el latido de mi corazón.
Le sacó el corpiño negro, que fue a parar al piso con la remera, mi boca fue directo hacia un pezon, y con una mano le acariciaba el el otro.
Luego la vuelvo a besar la boca con mis manos en su cintura la bajo para acariciar sus nalgas por debajo de su falda negra.
- Serena… mi amor.
Le susurró a su oído que le pase la lengua por el lóbulo.
- Si, mi amor.
Arrodillado frente a ella le saco su pollera y tanga pasando mis manos por ambas piernas como una suave caricia. Ella levanta los pies que le sujete los tobillos. Su tanga y pollera quedaron junto al resto de la ropa.
Al parar, le ordeno que me de placer con su boca.
Arrodilla frente a mi. Ella con su suave mano agarra mi miembro lo palpa un poco para luego con su lengua jugar con mi glande y frenillo. Luego jugo un rato con mis huevos lamiendo y dandole suaves mordidas. Me pongo tenso. Con mis manos le sujeto su blonda cola de caballo impulso hacia mi cabeza noto como mi miembro toca campanilla, provocando un placer, entro y salgo de su garganta. Mis gemidos resonaban en el estudio.
- Ah... Si...
Una corriente eléctrica en mi cuerpo provoco una explosión provocando la salida descontrolada de su semilla que ella se apresuró a beber y dejarlo limpio. Al terminar me senti mejor al descargar sobre ella mi malestar por lo de la junta.
- Excelente cariño - le acarició la cara dulcemente - quiero que andes en cuatro patas por el estudio.
Observando como lo hacia, entre en un placer.
- Detente. Le agarro la pierna derecha acariciando se piel de porcelana hasta llegar a su estrecha entrada.
Con mi rodilla separo sus piernas para ponerse en el medio, pongo la punta en su estrecha entrada. Tomo su caderas entre mis manos, adentrándose de de ella de golpe. Su cabeza hacia atrás, sin gritar nada. La embistió salvajemente sin contemplar su dolor. Le manoseo sus pechos mientras la llenaba en su interior. Mis gemidos eran graves, como un rugido, cuando terminó de echar hasta la última gota de mi semen en su interior, le beso la espalda, con la ultima estocada en su interior donde pude sentir que le toque su matriz. Saco mi miembro flácido llena de nuestro jugos, respiro profundo. Feliz del descargó todo la acumulado del día.
- Serena ponte tu ropa y luego toma un baño. Lirsa. Nos vemos.

El golpe de la puerta resonó en el silencio del estudio, donde estudio los pros y las contra del contrato de la compra de la cadena de hoteles Chapman.
- ¿ Quién es?- grito.
- Hola Darien- lo saludo ronroneando Rei. Puedo hablar contigo a solas. Por favor- le puso la cara triste con una sonrisa mohim.
- Esta bien.
- vengo porque quiero ser tu amente.
Me sorprendió por lo dicho, pero en mi mente me viene la figura de Serena desnuda solo para mi. Intento imaginarla pero me repugna tanto, que descarto la idea.
- No, gracias.
- Es por lo que dije el otro dia, de Beryl. Es la verdad. Es una prostituta de alto vuelo…
Golpeo la mesa con el puño cerrado.
- Deja de mentir- con voz gélida.
-… que monta…- retrocede para atrás- … todo bulto.
- Quiero que ya mismo te vayas de acá. Te recomiendo que dejes de decir mentiras sobre ella, o verás como queda destrozada tu vida.
- Voy a traer pruebas de lo que dije. Verás como desenmascaro a esa mentirosa.
- Vete.
-Adios.
Saludando con su mano, para irse por la puerta golpea fuerte