El Daprie

Capitulo 25

- No tienes miedo de que Darien te engañe hoy en su despedida de soltero - le pregunto Mina con voz agitada de tanto correr para escapar de mamá.
- No. Uno tengo que confiar en el, dos va Jedite y tercera, y más importante va Malachite - le dije medio susurrando.
- ¡¿ Qué?! - grito parándose de golpe con los ojos enfurecidos, apretó sus manos- si alguien lo toca la mato.
- Ves lo que digo, conociéndote, esta vez vos tienes los ojos de la providencia que todo lo ve. Por lo tanto no sé cómo, pero me juego lo que quieras que esta vez, si controlarás todo, mi boda y tu futuro marido, aunque el no lo sepa -  le dije tranquilamente confiada.
- Bueno vamos a buscar a Rei. Para ir...
- No, me dijo que viene ella y que llegará un poco más tarde tenia unos asuntos que atender antes de venir aquí- la interrumpe .
- Es raro- me paro frente a ella para mirarla a los ojos, por suerte somos casi de la misma altura. -, no te extraña que no esté llorando por los rincones.
- Tu no lo hiciste - le recriminó.
- Mentira- se defendió - recuerda que si llore, pero luego cupido volvió a flechar de nuevo, es otra cosa.
- Tenes razón - solte el aire pensando el viejo dicho a los locos hay que darle la razón.
- Siempre. Bueno vamos a tu despedida de soltera que las chicas deben ya estar allí.
- Pero tenia que ser en el club Eros.
- Hay porque no. Con mirar no pasa nada.
- Son...
- Sh... -  me silencio con su dedo índice en mi boca.

Estaba sonando Romance Bad de Lady Gaga en el reservado VIP del club nocturno Liberty, mientras esperamos que vengan los demás para la fiesta de despedida de soltero, observamos a unas bailarinas exóticas en topless y tanga de hilo dental a juego con su antifaz  que se movían al compás de la música sobre el caño.
- Tengo un mal presentimiento Darien, vamonos- le dice nervioso.
- Por favor mira esos cuerpos- le señaló un colorada de pelo largo de me resulta familiar.
- Mamá Mal, por favor. Déjanos disfrutar un poco. Sólo miramos, y a emborracharse un poco nada más, mami- le suplicó Jedite.
- Algo malo va a suceder. Lo presiente- lo solto con miedo.
- Lo que pasa es que le tienes miedo a tu novia- le digo con malicia.
- Si eres un cobarde - le dice Jedite con una sonrisa picaresca.
- Señores sus bebidas, nos sirve una moza rubia plástica, para mi demasiada teta y cola para mi gusto.
- Aquí tiene- pago las bebidas deposito los billetes en medio de sus pechos para molestar a Mal, que me mira con malos ojos.
- Gracias, bombón.
Sale del lugar. Me pareció ver que la bailarina colorada miro con furia a la camarera, no estoy muy seguro porque el antifaz no me lo permite ver bien.
- Bueno a mi salud- grite feliz levantado mi copa de champán.
- Por tú salud Darien.
Chocamos las copas y lo tomamos de un solo trago.