Capitulo 8

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Todos los personajes pertenecen a la obra de Sailor Moon e Naoko Takeuchi.

Esta historia la escribí hace años, todo lo escrito es producto de mi imaginación.

Contiene lemon fuerte.

Ring, ring,ring.
Miro mi teléfono celular, era Mina por WhatsApp. Que mando una fotografía de ella con babydoll color hueso transparente y una microcolaless a juego.

Mina: Y que opinas. No me veo sexy. 😜

Serena: Por supuesto. 👍

Le conteste sonriendo.

Serena: Estas preciosa. Hoy seguro que te se da con Yaten. Esta noche lo vas a disfrutar.

Mina: Gracias Serena. 😘

Serena: Bueno me seguiré preparando para rendir el mes que viene.

Prendo la notebook en la biblioteca. Comenzando a estudiar para el examen. Intento concentrarse, pero mi mente viajaba a otro planeta. En un mundo en donde Darien y yo, estamos casados.

Cerró los ojos cuando un intenso dolor le taladro la cabeza. Luego de trabajar todo el día. Decidió tomarse un descanso con optimismo de cerrar ya el trato de la compra de cadenas de hoteles Sakura.
Al sonar su IPone. Mira para ver quien era, su prometida Beryl por WhatsApp.

Beryl: Hola amor. Me estás extrañando.

Darien: Si.

Beryl: Mira las fotos que te mando.

Al observar las fotos que mando desnuda de ella con diferentes poses. Extrañado de ese gesto de ella le contesto.

Darien: ¿Qué esto, Beryl?.

Beryl: Fotos mías para ti. Y que opinas. No estoy sexy.

Darien: Beryl, acaso mentís te. No eres virgen.

Beryl: Pues claro que lo soy. Pero me pareció buena idea mandarte esto como lo hacen todas las demás. Vas a ser mi primer hombre.

Darien: Eso espero.

Beryl: Te Amo. ♥.♥

Mi mente me trae todo lo que me dijo Reí, Setsuna y otras personas. El bichito de la duda comenzó a funcionar en mi, "¿sera cierto lo que me dijeron, o es por que están celosas?. Ahora que recuerdo la otra vez, la vi muy acaramelada con el intendente Brown".
Sigo mirando las fotos, pero en vez de ver la cara de Beryl, veo la de Serena. Siento como una corriente de lava recorre todo mi cuerpo, que pide ser saciada. Con mi mano acaricio mi duro miembro por encima de mis pantalones. Voy caminando hacia mi habitación, cuando veo a Serena durmiendo tranquilamente sobre su notebook. Me acerco a ella sigilosamente para susurrar en su oído.
- Traren.
Serena se pone derecha en la silla. Con mi dedo índice le levanto el mento. Para besarla.
-Serena…- le susurro mientras la lleno de besos en su cara.
-Si, amor.
Me llega mi nariz, su aroma a vainilla. Su perfume favorito. Provocando una sensación de mariposas en el estómago.
Me siento en el sillón de cuero, abro mis piernas.
-Serena. Dame  placer con tu boca. Y recuerda deja bien limpio.
Se arrodilla frente a mi. Me baja el cierre de la bragueta para darme placer como me gusta. Su lengua juega de una manera que podía ver las estrellas. Tiro mi cabeza hacia atrás jadeando, le agarro con mis manos su cabeza despeinado su blonda cabellera. Luego observo a Serena arrodillada frente de mí, con su hermoso vestido de flores rosa.
- Serena… como estas así, saca te tu vestido, tu sostén y tangaless.
Su silueta de porcelana, me encandiló. Sus rígidas aureolas rosadas pedían a gritos ser mamadas.
-Serena…
Toda mi sangre se direccionó a un lado.
- Serena, arrodillada como estas ven hacia a mi.
Se colocó frente mio entre mis piernas. Vuelvo a acariciar  con mis manos su pelo y la cara para enseguida bajar a tocar sus pechos lentamente tratando de no perder ningún detalle de lo que veía. Le beso y mordi primero uno luego otro pezón. Mientras que con una mano me entretuve primero  acariciando para seguir bajando  a las costillas y estómago. Cuando me acercó a su interior me detengo.
-Serena. Parate y gira.
De frente hacia él, entonces agarró mi miembro que inclinó hacia adelante.
- Serena, camina hacia atrás un poco y agachate.
Con mis manos alrededor de sus caderas la empuje hacia abajo,
Haciendo que la cabeza de mi miembro chocara contra la pared de su entrada sin estar ella apenas lubricada, saltando lágrimas de sus ojos. Comencé a penetrar rapidamente, cuando menos lo esperaba le clavo hasta lo más profundo de su útero. Teniendo un espamo. Mis gemidos resonaba en el estudio sentía que mi orgasmo estaba muy próximo. La bombeo sin parar.
- Si… toma esto es para vos.
Con una fuerte estocada exploté en ese instante,  llenando a Serena hasta que vacio por entero mi semilla dentro del vientre de ella.
Cuando se la sacó ya flácida de la vagina de ella salia unos líquidos que llega a gotear directo al suelo. Le beso el cuello. Tiro la cabeza para atrás. Sonrio de oreja a oreja. Cierro mi bragueta.
- Serena pon tu ropa y bañate.
Empieza a vestir, cuando ya estaba colocándose el vestido, le agarro de la muñeca y tiro de ella hacia a mi. Golpeándo mi pecho
- Serena parate de puntillas. Pasa tus brazos alrededor de mi cuello y besame.
Ella lo hizo su dulce sabor enloqueció. Mis manos que estaban alrededor de su cintura que baje hasta sus nalgas.
- Serena... Te amo.
Sorprendido por lo que dije me detengo. " No yo amo a Beryl, ella es la mujer de mi vida". Pero el gusanito de la duda irrumpió en su mente.
- Vete, Serena - le grito.
Trato de calmarme. Una ira sale de mi interior. Como si yo odiara a Serena. Respiro hondo.
- Vete Serena. Termina de vestirte y toma un baño. Lirsa.
Sale Serena apurada como si el diablo la persiguiera.

Muchísimas gracias por leer esta historia.

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