Punto de vista de Tiziano.
¡Es como una niña pequeña! Debo enseñarle las buena costumbres, como que al extender mi mano es una forma de cortesía. No tenía que enfuruñarse así. De haber sabido qué auto usaríamos, seguro no me hubiera permitido abrirle la puerta por ella.
-Vamos al sur, ¿verdad?
-Sí. Al sur, luego yo te indicaré.
-Bien. Ponte el cinturón de seguridad. -no que le fuera a suceder algo conmigo al volante, es que veremos cuanto resiste.
-Es... muy rápido... este vehículo...
-Tiene el motor modificado. Puede llegar a los doscientos cuarenta...
-Te creo.
¡Vaya! Está pálida, y sus nudillos están blancos de tanto apretar las manos. ¡Por favor! Solo voy a ciento noventa.
-¿Trabajas?
Intenta manejar el miedo.
-Poseo algunas empresas. De publicidad, páginas web, mercadeo telefónico, cosas así. Soy socio de otras. Constructoras, financieras, laboratorios...
-¡Vaya! Son muchas.
-Me mantienen activo. Hoy en dia la tecnología facilita mucho las cosas. Como también nos fastidia.
-Me imagino que sí. Tiziano... -aún pronuncia mi nombre con cierto respeto, carente de sentimiento. -¿hay... otros vampiros en... la ciudad?
Su pregunta no encierra temor, más bien duda. Y yo no puedo evitar sonreír.
-Ahora hay uno.
-¿Y en el mundo?
-Somos un número controlado.
-Déjame aquí.
-¿Aquí vives? -no.
-Si quieres puedes volver... o dar unas vueltas...
-Gema. -¿qué pretende?
-O esperar acá.
Algo la está mortificando. Este no es el barrio donde vive. ¿No recuerda que puedo encontrarla, aún sin la unión?
-Esperaré aquí.
Por supuesto, no esperó a que le abriera la puerta. Se la ve tensa. No mira atrás, pero me monitorea por el vínvulo. Como yo a ella. ¿A dónde va? No se dirige al centro de la ciudad, sino que se aleja. Estos no son lugares para que vague sola. Pero, vamos, ¿qué sé yo de mi compañera? Absolutamente nada, excepto su pasado, ahora. De eso me encargaré más tarde.
¿Aquí vive? ¿En este basural? ¿Por eso no quería que la acompañara? ¿Para que no lo supiera? Los compañeros no se ocultan nada. No pueden ocultarse nada. Claro que ella aún no tiene idea del alcance de esta unión. Y hay cosas que deberé mantener en secreto. Como lo que voy a hacer ahora mismo que ella está ocupada. No creo que me lleve mucho tiempo. La ciudad no es muy grande. Podré hallar mi objetivo.
La estrategia de su padre no fue la acertada. Pero que se esperaba de un humano que se vió inmerso en nuestro reducido (y retorcido) mundo...
Stefan la probó. ¡Grrr! ¿Él sabía lo que ella era? Tarde o temprano regresaría y la reclamaría como suya. Pero el Destino tenía otra cosa planeada para él. Yo. Se metió conmigo, con mis operaciones en Mónaco. Si no hubiera estado pendiente de su desaparición, y le hubiera sacado toda la información, sabría de Gema hace varios años atrás... y hubiera evitado su tragedia. Y esta.
