Mi mala.

Capítulo 16: Escapar.

La situación con Martina luego de mi cumpleaños era muy tensa. No habíamos vuelto a hablar y eso me hacía recordar a la semana después de la fiesta de Celeste. ¿Por qué siempre tenía que escapar?

Pensé y tuve impulsos de hablarle más de una vez, pero no lo hice. No estoy seguro si fue por miedo de lo que pueda pasar o porque sentía que Martina lo iba evadir.

—No la hagas sentir incómoda —me aconsejó Cedric—, pero hablen las cosas. Ese beso no fue algo del momento y ambos lo saben.

A veces me pregunto si haberla frenado esa noche fue una buena idea. « ¿Estará enojada por eso?» me preguntaba cada vez que la miraba. Capaz se sentía ofendida, pero tuvo que haber entendido que no podíamos tener relaciones borrachos, en la terraza de mi casa y sin protección, ¿no?

—Mira, puedes hacer dos cosas —dijo mi amigo—, o puedes hablarle y fingir que no pasó nada para ver cómo reacciona y de ahí fijarte si sacas el tema o no, o puedes ir directo al grano. Elige.

Enserio esa chica no paraba de taladrarme la cabeza.

Martina's POV.

Tres días. Tres días pasaron desde que besé a Dylan, desde que él me besó, y todavía no habíamos cruzado palabra. Lo vi amagar entre acercarse a mí cuando charlaba con Sofía. La verdad era que también estaba buscando su atención, ver si se animaba a decirme algo, pero no pasó.

Tres noches en las que no pude dormir perfectamente bien, contando esa.

Necesitaba contárselo a alguien. Con Sofía no lo iba a hacer, era amiga de él. ¿Y si Dylan no se lo había contando? Sería raro que esté en el medio y que yo la haya metido ahí.

A Nicole no le contaría. Ella sabría que mis sentimientos me están afectando, alejándome del objetivo principal, olvidándome de todo el daño que me hicieron anteriormente, y me diría que me aleje de él, que tome distancia, que aún estoy a tiempo. Pero no quiero hacerlo.

Tampoco puedo ir con Dylan. Dejarme así fue un golpe bajo a mi ego y estabilidad emocional. Todo venía bien hasta que él se fue involucrando más y más en mi vida, pero ya era muy tarde para volver atrás. Ya era muy tarde para alejarme. Una parte de mí no quería.

La otra aún seguía a la defensiva, alertándome "no le gustas, el alcohol sólo fue una escusa para alejarse de ti". Pero, si fue así, ¿entonces por qué me siguió el beso? ¿Por qué me dijo lo que me dijo? ¿Por qué se quedó conmigo mientras se podía ir con sus amigos?

Eran demasiadas preguntas como para ignorarlas.

Suspiré cansada y volví a voltearme en la cama por optaba vez, pudiendo ver el oscuro techo.

¿Por qué no podía ser como mi hermano? Él al menos continuó luego de haber sido engañado por Ámber.

Volví a voltear en la cama, viendo en la mesa de luz el guión de la actuación que debía hacer mañana.

Sí, Dylan no era la única razón por la cual no podía dormir.

Gracias a ese señorito no me pude concentrar repasando el libreto. Tenía miedo de que todo salga mal por mi culpa.

Además, estaba con el período.

¡Maldita vida!

Tomé una hoja a mi lado y escribí un poema –o su intento-, descargándome. Cerré los ojos e intenté, de nuevo, dormir.

Dylan's POV.

Terminé de afinar la guitarra y miré a la chica delante de mí.

— ¿Una última? —le pregunté. Asintió y comencé a tocar.