23. Me Causa Espasmos

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- Nanna ya estoy en casa - grité y miré a Stella y ella me miró de reojo esbozando una pequeña sonrisa

- Vale - dijo mi abuela y comenzamos a subir las escaleras para dirigirnos a mi habitación

Stella se paró en la mitad de la escalera y miró fijamente una foto en la que salíamos Lux y yo junto con nuestras abuelas ya que nos conocíamos desde que teníamos memoria.

- Júrame que estas sois Lux y tú - sonreí y asentí con la cabeza - que gorda estabas - fruncí el ceño - mira tus cachetes, qué mona

- ¿Gracias? - cuestioné irónica y ella me enseñó su dedo corazón

Seguimos subiendo las escaleras y entramos en mi habitación.

Me tiré en la cama y conecté el móvil con el cable del cargador ya que me había quedado sin batería.

Stella se había ido al baño así que estaba sola en la habitación. Recordé la canción en el acto de bienvenida del director y sonreí inconscientemente al recordar la sonrisa de Calum.

Mi móvil vibró lo que significaba que ya se había encendido, puse la contraseña y el pin y miré mis mensajes. Abrí mi conversación con Calum que era la que había dejado a medias cuando se me apagó el móvil.

"Es que te quiero tanto" sonreí al leer ese mensaje.

"Me haces tan feliz al tenerte a mi lado" mordí mi labio inferior y tragué saliva.

"Tu también me haces estúpidamente feliz Calum" escribí.

Mis ojos se cristalizaron un poco y se hizo un pequeño nudo en mi garganta. Me había dicho exactamente lo que quería escuchar de él, que le hacía feliz.

Maldito Calum Thomas Hood y maldito el efecto que causaba en mi.

- ¿Me puedes explicar quien es ese pedazo de maromo que está en la habitación de enfrente? - dijo Stella y seguidamente cerro la puerta

- Beau

- ¿Beau?

- El nieto del novio de mi abuela

- ¿Tu abuela con novio? Que moderna - solté una pequeña carcajada - pues el Beau ese me causa espasmos - puse los ojos en blanco

- ¿Y Michael?

- Mike también me causa espasmos mujer - negó con la cabeza y se sentó en mi cama - ¿vamos a por la maría o qué? - cuestionó y yo asentí

- Me da miedo

- Tienes una receta, no seas imbécil - me dio un golpe en el trasero - llama a Brad

Miré la agenda de mi móvil y busqué el número de Brad, el chico que me dio su número en la pizzería.

- ¿Sí? - escuché una voz grave y ronca

- Ho...hola Brad, soy Trisha la chica de la fiesta

- Oh, ¿te has pensado lo de llamarme eh? Te di mi número hace casi un mes

- Lo siento

- No lo sientas, no pasa nada

- Me da vergüenza pedirte esto - pasé una mano por mi pelo desordenando mis rizos

- ¿El qué?

- Necesito marihuana

- ¿Tú? - preguntó en un tono sorprendido

- Sí, yo

- Bueno...claro, ¿por qué no? - tragué saliva - ¿Cuánto necesitas?

- Una hoja más o menos - soltó una carcajada

Easily Hide. (5SOS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora