23. Preparativos a la caza.

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Zed.
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-Estoy en contra de que vayas tu solo.-
Soltó Syndra tan molesta, que su magia se desprendía de ella como llamas negras que marchitaban toda vida a su alrededor.

-Es algo que tengo que hacer solo.-
Respondí firme, ni Kayn ni Ahri se habían ofrecido ya que sabían cuál sería mi respuesta.

-Vas a ir con una persona desconocida a matar a un asesino serial con delirios de artista, ¿tengo que estar tranquila ante eso?-
Sus respuestas eran feroces y sólidas, y no quería lastimarla diciendo algo que no debiera.

Me di vuelta tomándole del cuello siendo algo brusco, pero el apretón no le dejaría ni mi ADN, ya que era solo un apretón para sumisión.

-Voy a ir solo, es algo que tengo que hacer solo, yo debo de asesinarlo, y esta ocasión es más que conveniente, se cuidarme solo.-
Lo que en realidad quería decirle, era que no deseo que ese psicópata le ponga un dedo encima, pero antes de hacerlo, sus ojos se llenaron de lágrimas, su rostro se puso rojo y sus ojos me miraron con gran resentimiento y furia.

Me dio una cachetada, que vi venir desde antes de aceptar el trato.

-Me preocupo por ti, desgraciado ignorante, si vuelves a aquí faltándote así sea una uña yo misma te arrancaré la cabeza.-
Sus lágrimas se deslizaban por sus mejillas con prisa, su voz estaba completamente rota, y se negaba a romper en llanto solo porque no deseaba que yo la viese en tal estado.

Esta es una de las razones por las cuales creo que ella es fuerte.

-No te preocupes, el viaje será rápido, pronto estaré aquí contigo nuevamente.-
Mis palabras rompieron su barrera, y estalló en llanto, siendo abrazada y consolada por Ahri, que me hizo un gesto con la mano para que me retire.

De quedarme más, será inevitable que venga.

Kayn se quedaría en la orden, ya que Zoe le haría compañía, parece que ella no tiene nada que hacer, ya que anda con Kayn en todas partes, hace poco me trajeron una daga hecha de petricita Demaciana, ya que parece que alguien quizá quiere hacer dinero con ese recurso que tanto abunda en Demacia.

-¿Ya despediste a la Jhina?-
Soltó Camille montándose en un vehículo a mi parecer extraño, pero que en comparación era normal para los Piltovianos.

Este era ancho, y flotaba sobre el suelo, con partes cromadas y luz de neón color azul, reflejando la energía que recorría el auto.

-Sé que es dramática, pero estuvo muy buena tu referencia.-
Dije con una leve risilla, subiendo a su vehículo, fui víctima de la perdida de era, ya que por dentro todo era diferente, parecía salir de algún producto extraterrestre, gracias a quien sabe que no soy escéptico.

-Esto es tecnología Hextech, incluso mi corazón es de este tipo de tecnología, ya que por diversas razones, tuve que modificar mi cuerpo.-
Traté de no verme asombrado, cosa que logré gracias al yelmo.

-También cambiaremos tu traje por uno más actualizado, sé que con eso no podrás con Piltover o Zaun.-

-¿Que tiene mi traje de malo?-
Pregunté ofendido por mi traje, revisándolo.

Es cierto, lo único en perfecto estado eran las cuchillas, pero el yelmo está lleno de abolladuras y la armadura ni se diga.

-Esta desactualizado, ya tenemos el traje listo, esperando en Piltover, en menos de medio día llegaremos al puerto, y en dos estaremos en Piltover.-
Si es cierto que las embarcaciones Piltovianas son muy rápidas, pero no creí que tanto.

La fortaleza oscura. [Zed x Syndra]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora