30. Adiós.

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Era impensable.


Ahora una de sus sombras se encontraba frente a mi, una de las de MI Zed.


-Perdón por hacerte esperar, era necesario que se encontrara de alguna manera vulnerable, total, sin practica, las sombras le consumirían.-

Escuché sonar su voz proviniendo de todas sus sombras, no sonaba tal como una voz, sino como un pensamiento proveniente de la voluntad de las sombras.


-¿Estas vivo?-

Pregunté como tonta, pues estaba tan impresionada con su presencia que no alcancé a decir mas.


-No Syndra, no estoy vivo. Estas sombras están hechas por mi marca de la muerte y mi voluntad, con toda la energía que me quedaba al momento de morir.-

No sentía su respiración ni podía ver su rostro, pero por su voz, sabía que estaba sonriendo, mirándome como a una niña que no sabía nada.


-¿Cuanto estarán tus sombras?-


-Almenos media hora mas, o cinco minutos, depende de cuanta energía usaran.


-Entiendo... Eres un idiota, ¿lo sabías?-


-¿Por que?-


-¡Planeabas asesinarlo después de muerto! ¿Te parece poco? ¿Donde se supone que quedan las promesas? ¿Donde se supone que queda NUESTRA vida juntos? ¿Donde se supone que queda la orden y Jonia? ¿Donde queda Kayn? ¿Donde quedo... yo?-

Con cada palabra, con cada respiración, con cada segundo frente a su vaga presencia y su efímero deje de energía, sentía que me dolía mas el corazón que el cuerpo en toda mi vida acumulado.


Casi todas las sombras desaparecieron hasta quedar una, que se arrodilló frente a mi, acariciándome el rostro, no pude evitar soltar una lagrima, su tacto era frío, duro y etéreo al mismo tiempo, pero al mismo tiempo era tan suyo, que no podía soportar el que posiblemente no lo vuelva a sentir.


-Mi deseo siempre fue estar con ustedes, fuese donde fuese, en los glaciares del Freljord, en los desiertos Shurimanos, en las pesadas y violentas aguas de Aguasturbias, en las paredes de los blancos edificios de petricita Demaciana o sentados inclusive en la carnaza Noxiana, viendo las estrellas en Targon... O admirándote aquí en Jonia, si estaba contigo pensé en que estaba bien, y hasta el ultimo momento de mi vida, pensé en ti, y si yo iba a morir, por lo menos vivirás, vivirán.


¿Donde queda,  me preguntas? Pues quedan en mi, en los mas profundo de mi alma, como lo mas bonito que tuve en mi vida, que, a pesar de la guerra y nuestros distintos puntos de vista, cada momento junto a ti fui feliz.-

La fortaleza oscura. [Zed x Syndra]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora