Quiero Ser su Mujer

Regreso

kagome está buscando todo lo necesario para regresar ala época antigua, estaba un poco nervioso y no Sabía que iba a pasar cuando viera a Inuyasha él no había regresado desde aquel día.

-¿Mamá está lista la comida? Ya casi me marcho- gritó kagome

-Ya casi hija espera un poco más- respondió Naomi.

kagome se tiró en la cama mientras su mamá termina de cocinar y empezó a imaginar tantas cosas que sus mejillas se sonrojaron.

- kagome gritó- Naomi

-todo está listo hija- dijo

kagome tomó la mochila y la comida, se despidió de su familia y se dirigió derecho al pozo y saltó.

Inuyasha estaba por saltar al pozo cuando miro a Aome a abajo y la tomó de la mano para ayudarle a subir. Cuando estuvieron frente a frente Inuyasha abrazó a kagome y le dijo - te extrañe- y la apretó más a él, ella correspondió el abrazo, y en un susurro le dijo al oído -¿porque no fuiste por mí?- te espere Inuyasha.

Sin mirarla respondió -no te quería molestar me imaginé que estarías molesta conmigo por lo de la otra noche-

kagome se separa unos centímetros de Inuyasha, lo miro a los ojos para finalmente besarlo muy tiernamente como si lo hubiera está necesitando todo este tiempo.

Inuyasha cerro sus ojos para sentir los dulces labios de kagome, esas sensaciones que provocaba la chica en él lo volvían loco, a falta de aire kagome se separó y el la miro fijamente para después tomarla de la cintura y alejarse del pozo en dirección contraria a la aldea.

- ¿a donde vamos Inuyasha?- pregunto kagome

-quiero estar solo contigo, no quiero que nadie nos interrumpa kagome- respondió el peli plata

Lo que provocó un sonrojo en la chica. Se detuvieran de bajo de un gran árbol, se sentaron en las raíces de este y admiraban el paisaje.

Finalmente kagome rompió el silencio, y le dijo a Inuyasha -¿qué piensas? y se recostó en él.

Inuyasha no le respondió nada a kagome simplemente, la sentó sobre sus piernas y la apretó contra su pecho sintiendo el roce de los senos de Aome, le acaricio el rostro y la beso pasionalmente de una forma como si nunca más la fuera a tener entre sus brazos. kagome de manera muy natural comenzó un vaivén con su cadera haciendo rosar los sexos de ambos, provocando una excitación entre ambos, ese aroma llego a las fosas nasales del medio demonio, se separó de kagome no quería cometer una locura.

kagome al sentir a Inuyasha alejarse, hundió su cara en el cabello del chico y le dijo -hazme tuya Inuyasha quiero estar contigo-, y lo volvió a besar, introduciendo la lengua en la boca de este, esto desato aún más calor entre ambos, Inuyasha mordió el labio de Aome y esta gimió, y se restregó fuerte sobre él, comenzó a hacer un pequeño baila sobre la notable erección del hibrido mientras este, se entretenía masajeando los suaves senos de kagome sobre su blusa, finalmente separaron sus bocas por falta de aire y por la creciente necesitad de Inuyasha de tener en su boca los senos de Aome, la tomo del cabello para jalarla un poco hacia atrás y levanto su blusa, con sus garras rompió el sostén de Aome y puede al fin mirar los erectos pezones de kagome llevo sus labios a uno de ellos y empezó a succionar como un cachorro hambriento jalaba y mordisqueaba aquella delicia rosa , mientras kagome mantenía su vaivén sobre la erección de Inuyasha y se masajeaba el seno libre, -hazme tuya por favor te lo suplico Inuyasha- dijo kagome y un gemido salió de su boca.

-diablos estaba tan excitada que le rogué a Inuyasha que me hiciera suya no sentí ni vergüenza- pensó Kagome

Inuyasha se separó de kagome y la miraba podía, kagome podía sentir la erección de Inuyasha entonces, se preguntaba para si - ¿porque no la tomaba? - que pasa- pregunta la chica y quiso levantarse, Inuyasha la sostuvo por la cintura y solo dijo- te deseo mujer como a nadie pero no puede hoy no- y la tumbo en el suelo mientras aprisionaba sus muñecas con sus manos- ¿Qué haces Inuyasha?- pregunto kagome, él no le respondió pero le toco el rostro y le dijo - hoy no te voy a hacer mi mujer, pero vas a tocar el cielo-con una sonrisa picarona.

-esta vez Aome no desearas que te suelte ya verás- dijo Inuyasha y le amarro las muñecas con un cordel que encontró en la mochila de la chica

Inuyasha sentía nerviosa a kagome, su respiración estaba muy agitada, de repente cerro fuerte sus piernas,- hasta creo que siente miedo- pensó Inuyasha, pero igual el joven se tire encima de ella y levanto su blusa y ahí está el mangar más grande, saboreo cada centímetro de piel de aquellos senos y succiono sus rosados pezones poniéndolos duros y muy erectos, sintió crecer su humedad y finalmente, mientras masajeaba su seno metió la mano debajo de su falda y empezó a acariciar su humedad entre pierna.

Cuando sentí la mano de Inuyasha en mi intimidad, gemí fuerte muy fuerte y me removí para que dejara de tocarme, pero este me apretó más y sus movimientos circulares sobre mi húmeda ropa interior me estaban volviendo loca. Inuyasha se separó de mí, dejo besos por todo mi abdomen hasta llegar a mi falta ahí se detuvo y se levantó, tomo mis piernas y las abrió dejando a lo más privado de mi al descubierto y sin preocuparse rompió mi ropa interior y delicadamente introdujo sus garras en mi vagina,

-Ahhh Dios Inuyasha detente que haces no puedo resistir- le dijo Kagome al peli plata, este dejaba entrar y salir sus garras una y otra vez dentro de la húmeda cavidad de kagome -basta por favor- dijo Kagome

- ¿quieres que me detenga? - pregunto Inuyasha

Pero en cambio a una respuesta vio la mirada suplicante de kagome diciendo que la tomara ya o la dejara, pero sin sentir culpa metió su bello rostro en entre las piernas de kagome y empezó a succionar su clítoris, la escucho gemir y su respiración se escuchaba entrecortada esto me excitaba más y más, -Dios- dijo kagome cuando sintió la lengua de Inuyasha en su vagina y se movió un poco y Inuyasha finalmente pudo degustar los jugos que salían de la vagina de la chica, lamio sus labios y se concentro en el clítoris de la joven succiono, jalo, mordisqueo y se deleitó, hasta que empezó a sentir el orgasmos de kagome venir, lamio y lamio hasta que escucho los gemidos de kagome y sentio los fluidos calientes de kagome en su boca por fin le había dado su primer orgasmo, salió de entre sus piernas y la miro, sudorosa, roja y con los ojos cerrados, se colocó encima de ella y la beso.

-Inuyasha tenía razón- pensó kagome me llevo al cielo con esos toques por Dios, tengo pena de ver lo a los ojos- hablo para si misma, luego de ese pensamiento solo sintió los labios de Inuyasha en los míos y le dije te quiero, el solo soltó mis manos y me sentó en sus piernas para abrazarme. Sin decir nada, me dormí en sus brazos mientras el me acaricia el cabello.