Capitulo 15

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— ¡¿Qué hacías ahí dentro?! —Zaid me grita, regañándome — ¿Cuántas veces te he dicho que tú no puedes entrar ahí, cuantas veces te lo dijo Paris también? ¡Por Dios! ¿Por qué nunca respetas nada? —pone ambas palmas en su frente en forma de agotado, aún tiene puesto sus guantes— Y tú. —mira a Ashton que está a mi lado. — ¿Por qué te dormiste en su cama? —Zaid se cruza de brazos.

Ashton solo lo mira indiferente, nada de que le dice Zaid le importa, nada le afecta.

¡Es que es un cubo de hielo este hombre!

Zaid respira exageradamente, de la misma forma que lo hacía de pequeño, lo volvió a hacer, eso me hace sonreír un poco.

— ¿Qué te causa gracia, eh? —se me acerca y lo miro un poco molesta y a la vez con diversión.

— No me hables así, Zaid, eres mi hermano no mi padre.

— ¿Tú lo crees? —suelta una risa— Pues soy tu hermano mayor, así que comienza a respetar lo que dices y lo que hago, igual que tú. —mira a Ashton pasando por su lado y chocando bruscamente su hombro, miro a Ashton y no dice nada, solo camina hacia la puerta principal y sale.

¿A dónde?, ni idea, pero espero que vuelva pronto.

Me siento en la escalera, mirando hacia el despacho de Leonard, más allá está la sala, a mi lado izquierdo el comedor, me quedo mirando fijamente el comedor, notando algo debajo de la mesa, me inclino para poder mirar con más claridad y veo a alguien vestido completamente de negro, me inclino aún más, esa persona rápidamente sale de debajo de la mesa del comedor, elevó la vista viendo a Adonis.

Mierda

Corro escaleras arriba, escuchando sus pasos atrás de mi, al llegar al segundo piso la primera puerta que veo la abro y entro dejando con seguro, respiro varias veces, mi pecho arde y se escucha raro, como un silbido en el mismo. Adonis está aquí, él me está atormentando. Miro bien mi entinto y estoy en la habitación de Paris, lo que me hace sentir triste de que ella no esté viva, veo un mueble a mi lado y con fuerza lo corro haciendo que quede apegado a la puerta, para que Adonis no pueda entrar.

Me acerco al tocador de Paris y todo está como la última vez, sus labiales a un lado de su pequeña caja musical, en su espejo una foto juntas, de pequeña, abro los cajones y ahí está, creí que se lo había devuelto, pero no, el anillo de compromiso con Peter aún lo tiene. Lo tomo y puedo leer lo escrito dentro del anillo.

Para ti, mi hermosa Ángel, te amo.

Lástima que todo fue falso, tiro el ánimo en el cajón y lo cierto, ambos se veían tan lindos, tan maravillosos juntos, eran como la pareja perfecta, pero lastima que todo acabó menos de lo esperado, sufrieron mucho en su ruptura.

Fuertes golpes en la puerta me hacen sobresaltar, y siguen, no se detiene.

— ¡Abre la puerta maldita perra! —grita Adonis y mi corazón acelera rápido.

— ¡Vete! —le grito, camino hacia el baño de que esta dentro de la habitación y cierro la puerta de golpe, fingiendo haberme escondido ahí, Adonis golpea aún más fuerte la puerta haciendo que se mueva un poco el mueble, camino rápido al armario de Paris y me escondo ahí, su armario es grande y tiene muchas repisas, por lo cual trepo subiéndome a la más alta, me escondiéndome ahí, escucho como el mueble cae al suelo provocando un fuerte sonido, mis ojos se vuelven cristalinos y mi respiración acelerada, Adonis abre lo que supongo es la puerta del baño, de pronto no lo escucho más, me apego más a la pared intentando calmar mi respiración, pero es que no puedo, es inevitable cuando un demente esta persiguiéndome con querer matarme, la puerta corrediza del armario se abre y tapo mi boca, cierro los ojos evitando que salga un lagrima.

Familia Leblanc [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora