Familia Leblanc [COMPLETA]

Capitulo 36

Marie

Solo escuché unos gritos que notoriamente eran de Paris, solo sus gritos me hacían despertar alterada. Eran como una alarma. Su voz chillona y potente.

Escucho un quejido. Luego otro y así sucesivamente hasta que alguien entra por la puerta escondida detrás del escritorio de Paolo. Es Mark, inconscientemente sonrío al verlo.

—Hola. —me saluda al verme, tiene su mano junto un rollo de papel apegado en su nariz, lo golpearon.

—¿Qué te pasó? —lo miro preocupada levantándome sin despertar a Ashton, que ronca suavemente.

—Fue Paris, sabes que le molesta mi presencia y bueno, se desquitó. —se encoge de hombros, mientras me acerco su mirada no se quita de la mía, baja su mano y hay sangre por su camiseta, siento un poco de molestia al saber que Paris lo golpeó.

—Para que la provocas si sabes que es muy explosiva. —murmuro acercando mi mano a su mejilla acariciando la misma con delicadeza, suspira suavemente relajando sus hombros. Nunca creí que tan solo ver a Mark sentiría estas típicas "mariposas" en mi estómago, puede que sean nervios simplemente, pero verlo a él, no lo sé, de algún modo me alegra, me hace sentir... alegre y es extraño.

Sus manos se posan en mis mejillas, se acerca lentamente con intensiones de besarme, pero me alejo rápido al pensar en Polo.

Se que ha pasado ya meses de que Polo haya muerto, pero una muerte no se supera jamás, menos de alguien con la cual tenías proyectado una vida entera, con la que pensaba en casarme, tener familia y ser feliz, tan solo eso quería, ser feliz con mi chico el único que alegraba mis días grises en esta familia llena de problemas.

—Lo siento... no quería incomodarte.

Es lo único que dice para luego abrirse la puerta de la oficina, entrando Paolo acomodando las mangas de su camisa, le hace un gesto a Mark para que se vaya y cierre la puerta, va directo a su silla de cuero y se sienta poniendo los pies sobre el escritorio.

—¿Por que aún no despiertan las bellas damas? —su voz suena... ¿agradable?, eso es raro, porque suele hablar como con odio, decepción.

¡¿Donde esta Paris?!

Por mi mente pasan millones de probabilidades de que le hubiera pasado y ninguna me gusta mucho, siento la mirada de Paolo y lo miro. Capta rápido la preocupación en mi rostro y ríe.

—Quiere matarme, ella esta bien, no quiere negociar conmigo. —suspira pesado, tomando una libreta y se la avienta a Ashton, que rápidamente pega un pequeño salto asustado mirando a todos lados, probablemente desorientado.

—¿Y Paris? —es lo único que dice. Escucho como Paolo gruñe.

—¿Por qué les importa tanto? —nos mira a ambos, se levanta y comienza a enumerar—, primero que nada, ella es egoísta, es grosera, impulsiva, sufre crisis de no se que mierda, sufre bipolaridad, es orgullosa, cabe destacar lo agresiva que se pone cuando quieren acercarse a ella, reacciona mal a todo lo que le diga—

—Paolo, es de ti sobre quien hablas. —le recuerdo, aunque claramente no se por qué mi hermana lo odia tanto, aunque nunca me lo ha dicho claramente.

—¿Y eso que?, quiero ayudarla pero no me deja, es muy... —pasa sus grandes manos por su cabello completamente blanco, al igual que el resto de su cuerpo.

—Es un poco complicada.

—¿En serio?, creo que no lo note, iré a verla para que me golpee de nuevo por querer conversar las cosas.

Cruzo mis brazos cargando mi peso en una pierna.

—¿Que quieres que hagamos?

—Primero que nada, —me giro rápido al escuchar la voz de Zaid, doy unos cuantos pasos y lo abrazo apegando mi cabeza en su pecho—Paris debe descansar, en ese estado no funciona, sufre claustrofobia, de pequeños la encerré en un pequeño armario en el sótano, estaba todo oscuro, aunque fuera mi hermana mayor, me gustaba molestarla, y joderla todo el tiempo, y bueno. —se encoge de hombros.

—¿Descansar, para qué? Si es un robot. —dice Paolo con una pizca de gracia.

—No hables así de ella. —Ashton se le acerca notándose a la defensiva.

Ambos se quedan mirando fijamente hasta que Paolo asiente.

—Bien, pero tú —apunta a Zaid—, te quedas, debemos cosas que resolver. —rodea el escritorio acercándose a nosotros, me pongo frente a Zaid apegando mi espalda en su pecho alzando la mirada hacia Paolo, él me sujeta de un brazo y me hace a un lado con brusquedad. Zaid solo asiente, los brazos de Ashton me rodean en un abrazo algo incómodo para mi.

Paolo se dirige hacia la puerta y sale sin decir más. En cambio Ashton se le acerca rápido golpeando despacio su nuca.

—Ves lo que provocas por andar metiendo tu pene donde no corresponde, si tan solo no te vieras como literalmente la mierda, te golpearía, di algo incorrecto, da un mal paso o si llegas a esconder cosas, Paris sufrirá las consecuencias, los tres sabemos cómo funcionan las cosas aquí. —Zaid solo asiente, mi mente comienza a crear preguntas y la curiosidad aumente en mi cabeza, las ganas de preguntar me sobran, pero a qué me respondan son nulas, no lo entiendo, soy Leblanc también no entiendo por qué no me cuenta la mayor parte de las cosas, ellos me dijeron que a pesar de ser de padre diferente igual me incluirían en sus cosas, pero ahora capto que no todo es como dicen los Leblanc y en estos momentos realmente estoy comenzando a extrañar a mi padre, solemos hablar todos los días y ya estoy comenzando a imaginar lo preocupado que debe estar por no haberle respondido en varios días, la comida que Paolo nos dio no era la mejor, pero se agradecía, espero que Paris haya podido comer algo. Voy hacia la puerta que está detrás del escritorio y antes de abrirla comienzo a escuchar disparos, Ashton rápidamente me jala del brazo hacia él haciendo que nos agachemos y nos pongamos del otro lado del escritorio, Zaid uniéndose a nosotros.

Los disparos no acaban nunca, allá afuera debe de haber un mar de sangre que tan solo pensarlo cada vez más me arrepiento de no haberme ido con mi padre, solo espero que no nos vayan a matar a nosotros porque ya sería lo peor. Mi corazón late rápido y mis manos sudan, y los disparos acaban, miro a Zaid que esta con los ojos entrecerrados y Ashton atento intentando escuchar algo afuera, pero no oye más. Como si no hubiera pasado nada.

—Chicos... —Zaid llama nuestra atención, al verlo su rostro está pálido hay sudor en su cien y frente, no alcanza a decir más y cae al suelo desmayado, nos acercamos rápido sin saber que hacer, solo tomo su cabeza entre mis brazos.

—Ashton, busca algo de agua, Paolo dijo que iba a esperar a que despertara para darle algo de comer.

—Debo salir y tú misma acabas de escuchar lo qué pasó allá afuera.

—¡Pero es tu hermano! —le grito, los nervios vuelven a apoderarse de mi cuerpo, y mis manos tiemblan.

—Mira, hay que mantener la calma. —Ashton sonaba tan tranquilo, como si todo esto fuera normal para él, pero claro que lo era, si estaba involucrado con toda esta mierda al igual que Paris y Zaid. Él nota la preocupación en mi rostro y suspira levantándose. Acuno la cabeza de Zaid entre mis brazos.

Escucho como la puerta detrás del escritorio se abre y luego se cierra de golpe, espero que no le pase nada a Ashton, me sentiría muy culpable si llegara dañado.

***

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