La nueva generación

Capitulo V

A los 12 años, Bianca tuvo una cosa clara: ella nunca sería como las otras chicas y jamás pensaría de otra manera,lo juró por el ángel. Así que, decidió mostrar su independencia, después de todo era una artista y los artistas se expresan sin importar la opinión de los demás.
Caminaba por el pasillo,hacia su habitación, mientras consideraba todas las posibles consecuencias de lo que estaba a punto de hacer: en el peor de sus casos sus padres se decepcionarían y ,en el mejor de los casos, sólo la castigarían por 2 meses. Pero no le importaba,a diferencia de sus hermanos, nunca le molestó que la castigaran,ya que ella admitía lo que había hecho mal. Pero,en este caso, no le importaba,ya que se estaba expresando.
Al llegar a su habitación, Sam estaba sentada en su cama. Hacía dos años que eran parabatai y se habían acostumbrado a estar siempre juntas,es más de sentían raras si no estaban juntas.
- Bien, de qué querías hablar?- interrumpió en sus pensamientos.
- Quiero que me ayudes a hacerme un cambio de look- le exigió.
- Esperé este momento desde que naciste!- exclamó-. Podríamos empezar por tu ropa: algo menos suelto y más pegado al cuerpo!
- No! Con la ropa no! Me refería al cabello!-la corrigió.
Comenzó a explicarle lo que quería hacer, después de todo sólo sería un pequeño cambio.... No(?
Sam la miró extrañada: había heredado el hermoso cabello de su padre y con hermosísimos rizos. No era como el de sus hermanos: pelirrojos y difíciles de peinar o rubio platino y completamente rebelde. No, el suyo era de un hermoso dorado delgado e imposible de despeinar. Es más,cuando estaban aburridas se hacían trenzas la una a la otra y se veía tan hermoso en aquel dorado que Samantha sentía envidia.
Estuvieron discutiendo , literalmente,por más de dos horas. Lo que extrañó a los demás,ya que rara vez se quedaban discutiendo tanto tiempo (especialmente discutiendo), a menos que se trate de alguna travesura y tampoco tardaban tanto,ya que eran muy ingeniosas.
De pronto, Sam salió del cuarto, cerró cuidadosamente la puerta de la habitación de Bianca y llamó a los adultos presente ( los cuales se encontraban todos: Clary, Jace, Magnus, Alec,Simon e Izzy).
- Escuchen- comenzó Sam-. Bianca decidió hacerse un cambio de look,el cual creo le queda bastante bien y espero que tengan la misma opinión.
Abrió la puerta y de ella salió Bianca: nada en ella parecía diferente; las mimas botas invernales,los mismos jeans azules con aberturas en la rodilla ,y pantorrillas,la misma camiseta de muerte a la Barbie con una cabeza de la muñeca al lado y el hermoso cabello dorado.....
- Te rapaste media cabeza?!- exclamó su padre.
- JACE! Déjala hablar!- lo retó su parabatai.
- Sólo es del lado derecho- explicó Bianca-. Además amplía mi visión, considerando que necesito anteojos....
- No me importa! Estás..!
- Tú no decides!- lo interrumpió su esposasñ-. Por qué lo hiciste corazón?
Clary siempre había sido mucho más comprensiva y paciente con sus hijos, mientras que Jace era bastante atento,pero su paciencia se agotaba rápido.
- Es una forma de expresión- volvió a explicar-. Muchas chicas mundanas lo usan y me pareció que representaba exactamente como yo soy.
- Y cómo eres princesa?- le preguntó impaciente Magnus. Amaba a Bianca,pero también le encantaba su cabello y no podía esperar por recuperarlo.
- Soy... Diferente- dijo.
- Sé que no soy su madre- se entrometió Isabelle-. Pero, para mí eso basta para no hacer que recupere su cabello, además tiene doce años ya no es una niña; ella sabe lo que hace.
Jace se quedó pensando un momento y luego miró al resto de los adultos,para saber su opinión sobre el tema.
- Yo creo que le queda bien y,si a ella le gusta, perfecto- interrumpió Simon
Jace miró a Alec y Magnus.
- A mí me parece muy original, nunca hiciste algo como eso y.... Es cierto Bianca es muy diferente a las cazadoras de sombras de su edad- argumentó Alec.
- La vida es corta, déjala intentarlo y obtener experiencia, además no pienso hacerlo así que tendrás que buscar a otro brujo- Magnus se dijo,al final, que era decisión de Bianca, después de todo era su cabeza no la de Jace.
Con esperanza miró a su esposa y supo la respuesta con sólo mirarla a los ojos:'"NO". Clary había llegado a la edad en la que sabía exactamente cómo crear terror en Jace y él no lo discutió.
- Muy bien tesoro,no tendrás que volver a tener tu cabello- Bian le sonrió, ésa hermosa sonrisa que hizo que el corazón de Jace se ablandara,aunque no lo suficiente-. Pero, estás castigada por tres semanas- le hizo puchero-. Ni lo creas jovencita,es lo que pasa por no avisar a los adultos de un cambio tan radical. Entendido?
- Está bien- respondió su hija menor.
Ése peinado había cambiado de forma radical la manera en que la clave trataba a Bianca: antes de forma respetuosa, ahora era como si quisieran escupirle en la cara. Todos creían que era una forma de rebeldía y Bianca se dijo:< si ellos piensan eso, les voy a demostrar que tan rebelde soy>.
En los entrenamientos Bianca ya no seguía instrucciones,lo que alarmaba a los adultos. Comenzó a experimentar y notó que su combate se podía mejorar con un tipo de arte: la danza. Podía hacer saltos de ballet y pasos de hip hop. Se lo mencionó a su parabatai y comenzaron de inmediato, en un entrenamiento privado Bianca tomó mucha fuerza para saltar,ya que en su combate en parejas Sam pasaba por abajo y ella por arriba. Dobló las rodillas, tomó impulso con los brazos, saltó y.... Lo siguiente que supo es que no quería ( ni podía) soltarse de la viga del techo.
- Tío Jace! Bianca está colgando de las vigas!- Jace entró corriendo por la puerta y se quedó mirando a su hija.
- Cómo llegaste ahí arriba?!- le preguntó.
- Sólo salté...- respondió.
- Qué pasó?!- Clary intervino en ése momento y se quedó mirando a Bianca-. Sólo suéltate!
- Las probabilidades de sobrevivir son muy bajas- argumentó.
- Si puedes saltar como tu padre no te hará nada el que te sueltes- le explicó la pelirroja.
Lo hizo, pero no porque estuviese cumpliendo la orden sino que era porque quería intentarlo.
Cuando llegó al suelo no sintió ningún malestar,pero toda esa acción hizo que se le bajara la presión: se mareó y se desmayó.
Cuando despertó estaba en los brazos de su padre (ella medía 1,50m) y él estaba yendo hacia su habitación.
- Cuándo fue la última vez que comiste?- le preguntó al verla despierta.
- Habrá sido hace unas tres horas, tampoco soy de comer mucho y quiero que me bajes- le respondió.
Jace la miró y luego,con lentitud, la bajó. Seguía mareada,pero con un poco de ayuda llegó a su habitación y comió unas pocas aceitunas.
No era raro ver a Bianca desmayada porque se le baja la presión,es más ya se había hecho natural y todos sabían qué hacer si sucedía. Sumando a los problemas con la presión y el hecho de que ella no comiera mucho era normal que Bianca siempre estuviese acompañada.
- Ya te sientes mejor?- cuestionó su padrino.
- Sí, mucho mejor. Sólo algo aburrida- agregó.
- Bueno quiero que sepas que: si combinamos tus increíbles saltos y tú asombrosa velocidad, estoy seguro de que serás la mejor cazadora de sombras de tu generación- lo dijo tan rápido que Bianca se tomó un momento.
La idea de saltar a esa altura,de ser mejor que sus hermanos y ser la cazadora de sombras más hábil con tan solo un par de años menor para ser adulta, la emocionó.
- Está bien- respondió al final-. Pero,lo haré a mí modo,con mis reglas y mí forma de entrenar.

Continuará....