Capítulo XVI

250 19 4
                                    

Chris abrió los ojos encontrándose en una celda: las paredes eran de piedra masiza, iluminada por luces violetas provenientes de los barrotes de luz que separaba la habitación de un largo pasillo con celdas similares.

"Chicos listos" pensó el pelirrojo". Así se aseguran que no escapemos."

En ese momento se dió cuenta: no tenía stella,ni censor,ni ninguna de sus armas.

"Bianca estaba conmigo..." Ese pensamiento sirvió para que el joven se levantara alarmado, calmándose al notar que su hermana se encontraba a su lado.

La rubia no poseía su censor,pero sí tenía a pietate,que tenía la forma de un chocker.

- Despertaste,al fin- escuchó una voz y,por instinto, se puso a un lado de su hermanita, protegiéndola.

- Qué quieres?- exigió saber.

Pudo ver el rostro de la persona iluminado por las luces de los barrotes: era un hombre, con la cara demacrada y ojeras por la falta de sueño. Al ver detalladamente su rostro, notó que era un brujo, ya que sus ojos eran idénticos a los de una rana.

- Que tú y tu hermana me escuchen- Chris lo miró extrañado,pero no pudo hacer ningún comentario al respecto, ya que las luces de los barrotes se intensificó y perdió el conocimiento.
~~~~~

- Hace cuánto debieron haber vuelto?- escuchó al padre de Bianca preguntar.

- Christopher había dicho que estaban en Taki's, no entiendo por qué tardan tanto- le respondió su mujer.

Liam se mantuvo en silencio, ciertamente estaba preocupado por la rubia, le tomó cierto afecto y le gustaría llegar a ver lo que ese afecto podría causar.

Apenas Magnus notó el cáncer del no-vidente se puso a buscar todo tipo de curas, no es que le tuviese cariño, solo no podía dejarlo así y lo curó.

- Relájate- una voz trató de calmarlo-, Bianca va estar bien, ella es muy fuerte- continúo Sam.

- Es solo que... No sé cómo expresarlo, pero tengo un mal presentimiento- desde hace rato venía sintiendo que algo estaba mal.

- No te preocupes, mala hierba nunca muere- dijo Clara.

- No sólo estoy hablando de Bianca, si no también de Christopher: algo debió haberles pasado- dijo Liam más preocupado aún.

- Está bien, te diré un secreto- susurró Sam-: siento exactamente lo que Bian siente.

- Eso que tiene que ver?- preguntó confundida la sorda.

- Que puede sentir si Bianca se encuentra en peligro- interrumpió una voz masculina.

- Exacto, gracias Seb- dijo cariñosamente la cazadora de sombras.

- No hay ningún otro cazador de sombras, además de ustedes?- volvió a preguntar su amiga. A decir verdad, él también tenía la misma duda, eran pocos Nephilims para una ciudad tan grande.

- Pues... Sí- respondió Sebastian-. Mi padre es el director del instituto y mis tíos se quedan por él.

- Escuché la noticia! Supieron algo más?!- está voz era nueva: parecía un poco más mayor a la de los adultos con los que había estado tratando y se la escuchaba muy preocupada.

- No mamá, Chris no ha vuelto ha escribir- le respondió Clarissa, Liam hizo 2+2 y supo que se trataba de la abuela de Bianca.

- Necesitan refuerzos? La manada puede ayudar- otra nueva voz: masculina y, por cómo jadea el hombre, pudo notar que llegó corriendo.

- Crees poder hacerlo Luke? Sería de gran ayuda- respondió Jace, el nombre de la voz es Luke, anotó Liam.

- Por supuesto, lo que sea por mis nietos- <Nietos? Debe ser el abuelo de Bianca> pensó Liam.

- Los mundanos deberán quedarse, es muy peligroso- dijo Magnus.

- Yo me quedaré con ellos- se ofreció la mujer mayor-. Ya no soy una cazadora de sombras y solo estorbaré en el rescate.

El muchacho notó un toque de tristeza y luego sintió que le jalaban el brazo.

- Vamos adentro- le dijo su amiga.

- Creí que odiabas el instituto- dijo con confusión.

- Aún lo odio, pero si quiero tenerte seguro lo mejor será quedarnos aquí- la joven no continúo y pudo notar que entraban en el edificio.

Escuchó cómo alguien se les acercaba y entraba en el elevador con ellos.

- Es un placer, soy Jocelyn Fairchild, abuela de Bianca- no sé equivocó.

Estaba seguro que la mujer le extendió la mano para saludar y él hubiese devuelto encantado el saludo, el único problema es que no sabía dónde estaba su mano.

- Soy Clara y él es Liam, es ciego- habló Clara.

- Oh... Lo siento- el tono era de pena.

- No se disculpe, está bien- no era la primera vez que algo como esto le sucedía-. Aún así me gustaría estrecharle la mano- sonrió.

- Cómo sabías que extendí la mano?- preguntó confundida.

- Es un reflejo, todos lo hacen con personas que desconocen- respondió el joven.

- Te llevas bien con Bianca?- preguntó otra vez.

- Sí, por qué?- no le parecía tan extraño, la joven era muy agradable.

- Lo supuse- él no lo sabe, pero hizo una mueca confundida-. Déjalo, yo me entiendo.
~~~~~

- Qué estás haciendo?- le preguntó a su tío.

- Estoy rastreando a Lily, si la encuentro a ella los encontré a los chicos- respondió el brujo.

- Déjalo concentrarse, hijo- lo regañó Simon.

- Es que se está tardando mucho y si les pasó algo?- volvió a preguntar Ford.

- No digas esas cosas, hay que ser positivos- esta vez el regaño vino de su madre.

- Lo sé, pero... No les parece raro? Quiero decir, nos engañaron con glamour que técnicamente ya no existía y luego Bianca y Chris desaparecen y todo en el mismo día?! Sospechoso- expresó Ford, a muchos les sorprendió que el muchacho haya pensado en todo eso, pero, a decir verdad, un poco de razón tenía.

- Creo que Stanford tiene un punto- dijo Rafael-. A mí también me pareció raro, pero creí que era coincidencia.

- Qué?- preguntó ésta vez Jessica-. Que mi hermana haya salido luego de que aporrearan la puerta como si no hubiese mañana?

- Algo me dice que estábamos siendo observados- se sumó Sam.

- Y tú? Qué dice mi hermana?- preguntó Seb.

- No dijo nada, ni siquiera siento que esté pensando- le respondió la joven-. Una de dos: o bloqueó el lazo, lo cual sólo lo haría si es que el enemigo pudiese leer mentes, o está inconsciente.

- Espero que sea la segunda- habló esta vez Clary.

Nadie lo dijo, pero estuvieron de acuerdo.

Se formó un silencio, no uno incómodo si no uno pensativo.

- Creo que los encontré- dijo Magnus, rompiendo el silencio.

- Yo también, revisemos si tenemos lo mismo- le dijo su hijo azul.

Continuará...
Me disculpo por la tardanza, han de odiarme.
En fin, espero que estén llevando bien lo de la cuarentena.
Cuídense, por favor.
Hasta luego mis pequeños Nephilims.

La nueva generaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora