Un Amor Prohibidó

La apuesta.

El sonido de la campana anunciando el inicio de las clases se hizo presento. Algunos de los alumnos que se habían quedado dormidos corrían a toda prisa para no llegar tarde a su aula, mientras que otros ya se encontraban en ellas.

Tal era el caso nuestro querido azabache que desde hace más de 15 minutos esperaba pacientemente la llegada del profesor de cálculo.

El dia de hoy Levi se encontraba de buen humor y se debía a que su querido hermano lo había acompañado y despedido en la entrada de su escuela con un beso en su frente.

Asiendolo sonrojar a el y chillar de alegria a su Omega interior.

- ¡Buenos dias enano!.

Claro que nunca faltaba que Hange llegará y todo su buen humor se fuera al carajo.

- Tks, maldita cuatro de mierda.

Poco a poco los alumnos que faltaban ingresaban al aula junto con el profesor que sin esperar mas cerro la puerta detrás suyo.

- Bien alumnos empecemos.

- Pss, enano - Hange que estaba detrás del oji-azul tocaba con su dedo su hombro y este al sentirla la apartó y miro con el ceño fruncido.

- ¿Que mierda quieres?

- ¿Donde esta el Cejon?.

Ahora que la castaña lo mencionaba Erwin aun no había llegado algo muy raro en el ya que nunca había faltado a clases.

- Tks, y yo que voy a-

Un golpe en la puerta llamo la atención, el profesor de calculo atendió sorprendiendo a todo los presentes al ver que se trataba del destacó y puntual alumno Erwin Smith.

- ¿Joven Smith se puede saber que son estas horas de llegar?.

- L-lo lamento mucho es que me quedé dormido, ¿puedo pasar? - el hombre lo miro con desaprobación pero aun asi se hizo aun lado para que pasara - Gracias.
A paso rápido el rubio tomo su lugar al lado de Levi.

- Tks, Cejon te ves como la mierda - el azabache aprovechó que el profesor estaba de espaldas para mirar al rubio.

- Me siento de la mierda - el Alfa paso sus manos por su cara - No pude dormir bien a noche.

- ¡Eso explica el por que pareces un mapache! - grito derrepente la castaña asiendo saltar a todos de su lugar.

- ¡Señorita Zoé le pediré que guarde silencio en mi clase! - el profesor la miro serio.

- Lo siento.

- Pff, ja.

Hange intento guardo silencio, pero al ver que Levi intentaba suprimir una risa llamo poderosamente su atención al igual que la de Erwin.

- ¿De que te ries Lev?.

- L-le dijo "señorita" a la cuatro ojos, ¡ja!.

- ¡¿Oye enano que te pasa?!. ¡yo soy una señorita!.

- ¡Zoé!, ¡una mas y la saco del aula!.

- ¡P-perdón! - el hombre dio vuelta para seguir escribiendo y Hange llamo al rubio - Oye Cejon.

- ¿Que? - el azabache tambien la miro.

- ¿Me puedes decir por que hueles a vainilla? - Erwin sintió como su presión bajaba en ese momento.

- N-no se de que hablas H-hange.

- No te hagas tienes un olor diferente en tu cuerpo - Hange lo miro seria.