Té verde

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El peliverde deja el teléfono sobre la mesa, Ochako lo mira confundida.

Uraraka: ¿Que haces Deku? —intenta ponerse de pie— ¿no llamaras al maestro?

Midoriya: Lo mejor sera que no sepa nada. —Sostiene al bebé— Intentare tranquilizarlo por mi cuenta.

El joven se pasea por la sala mientras arrullaba al pequeño bebé en sus brazos. Al quedarse profundamente dormido, estos pasan a dejarlo en su habitación.

Uraraka: Vaya, si que es algo complicado cuidar de un bebé. —Se sienta a la orilla de la cama de Eri.

Midoriya: —Colocándole una manta encima, entonces se aleja cuidadoso de la cuna— Sera mejor que salgamos.

Al salir de la habitación, estos se alejaron muy silenciosos.

Uraraka: —Le gruñe el estomago— ¿Tienes hambre, Deku?

Midoriya: Ah, solo un poco. —rascando nervioso detrás de su cabeza— ¿Pedirás algo para... —Ve a Uraraka ponerse el delantal de Joke, este era color anaranjado con franjas verdes— ¿T-tu cocinaras?

Uraraka: Si, ¿Porque la pregunta, Deku?

Midoriya: Bueno... este... —Sonrojado— Por nada, por nada. —Expreso mientras sacudía sus manos—¿Una comida hecha por Uraraka? —Pensó.

Uraraka: —Comienza a cocinar un Katsudon— Esto es lo favorito de Deku. —Penso, entonces su rostro se puso sorpresivo. —¿Pero que? ¿Porque pienso esto? Es solo un platillo, solo estoy cocinando, no es por algo especial, no, nada de eso, es solo... es solo... —Musitando entre dientes en un volumen poco audible.

—Uraraka...

Uraraka: —Se gira sorprendida— ¿Si? —Ve al peluverde a su lado— ¿Q-que sucede?

Midoriya: ¿Estas susurrando?

Uraraka: Oh cielos. —Se lleva las manos al rostro— ¿En serio? —Expreso— Debi haberlo aprendido de el. —Pensó.

Midoriya: —Comienza a olfatear—Huele delicioso.

Uraraka: C-claro, en un momento mas esta listo, Deku.

***

Pasados algunos minutos, los jóvenes comenzaron a comer, estos se limitaban a observarse ya que estaban sentados en extremos opuestos.
El peliverde la observó y decidió romper ese silencio tan incomodo.

Midoriya: Esto esta delicioso, Uraraka, cocinas increíble.

Uraraka: Gracias, la verdad fue algo incomodo ya que al hacer estas tareas para alguien mas me hace sentir como una esposa.

Midoriya: —se atraganta y rápidamente bebe un poco de te— ¿Es...esposa? —Sonrojado.

Uraraka: ¿D-dije esposa? Quize decir... quize decir.. —Sonrojada— Ay. —Se lleva las manos a la cara para cubrir su rostro ruborizado.

Midoriya: Bueno... —Rascándose la mejilla—  ahora que lo dices, no serias mala esposa. —Se lleva un bocado a la boca.

Uraraka: G-gracias, Deku. —Intenta cambiar el tema— P-por cierto, no hacemos mal el trabajo de niñeros, ¿Eh?

Midoriya: ¿Huh? Ah. No, nada mal. —Sonríe. —Y el maestro pensaba que no haríamos un buen trabajo.

Uraraka: Creo que serias un buen padre, Deku.

Midoriya: —Con el rostro rojo— ¿P-padre?

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