Capítulo 06; Pistas.

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—¡Boo Seungkwan! 

—¡Yah! ¡Yo no hice nada! ¡Por favor! 

Seungkwan había terminado castigado de nuevo, por haber echo una broma al profesor de la clase, aunque bien, el quería que le creyeran, terminó a última hora castigado. Se sentó en su pupitre, mientras el profesor dejó algunos problemas en el pizarra. El castaño apuntaba todo lo que había en la pizarra, pero odiaba los problemas matematicos, lo detestaba, lo mejor era que el profesor se iría dejándolo solo, pero para salir de ahí, tendría que ir a la sala de profesores a que los revisara.  

—¿Dónde está Choi? –el profesor suspiró rendido, y la puerta del salón fue abierta. Hansol estaba ahí, él no cometía bromas, ni hacía nada en contra para ganarse el castigo, al contrario, debido a que se negaba contestarle a algunos profesores, lo tomaron como una iniciativa a que debería estar ahí después de clases.– ¡Señor Choi! ¡Recuerde que debe quedarse en clases hasta el final del castigo! Bien, los dejo solos, sus trabajos a mi oficina, o no se iran hasta que el guardia de noche venga a trabajar, ¿Entendido?

—¡Sí profesor! –contestó Seungkwan un poco alegre, puesto que siempre había querido hablar con el chico a su lado, pero era imposible hablar con el. El profesor se marchó dejando a ambos en el silencio del salón.

Un incomodo aire comenzó a hacer acto de presencia. A Seungkwan le desconcertaba eso, pero no le importaba. Comenzó con sus problemas matemáticos, mientras observaba a Hansol de vez en cuando, esos ojos color miel que miraban atentamente la libreta que estaba en frente suyo. Hacia dibujos, restándole importancia que tenía que resolver unas cuantas cosas.

—Ah... –suspiró Seungkwan tratando de llamar su atención– Es tan aburrido aquí. –Hansol ignoraba sus palabras mientras seguía dibujando– No sé como empezar, o terminar estas ecuaciones. –No lo miraba– ¿Sabes como hacerlas? –Seungkwan lo miro suplicante, pero Hansol seguía  ignorándolo. Echó un vistazo a lo que Hansol dibujaba, y parecía ser el rostro de alguien conocido, pero no descifraban quien era...– ¿Te gusta dibujar? ¡A mi me fascina...! Aunque dibujo muy mal. Soy Boo Seungkwan –extendió su mano, pero Hansol seguía sin hacer caso.– ...¿por qué no dices nada?

—¿Cuál es el motivo de que quieras que hable contigo? Nunca nadie me ha dirigido la palabra desde hace tiempo, ¿por qué quieres hablar conmigo? –por una vez en su vida, pudo escuchar la voz de Hansol, y no solo murmullos como los que da en clase, era su voz.– Seungkwan... ignorame y busca otra afición, iré a entregar los problemas, él me espera para la cena.

Hansol se levantó guardando sus cosas, puso la hoja donde se encontraban los problemas, y Seungkwan se sorprendió que los había contestado bien en tan poco tiempo. Era realmente alguien que sabía tanto, entonces, ¿por qué estaba el aquí? Cada segundo que se preguntaba por Hansol, más tenía ganas de saber de él. Hansol... le gustaba.


—Jihoon... ¿Hyung...?

—Seokmin, no es necesario que me llames así, solo dime Jihoon. –el pelirrojo suspiró, había pasado una semana entera desde que llego a la casa de Seokmin, y después de que este le haya rogado para que se quedara, han tratado de llevar una amistad mejor.– ¿Qué quieres?

—Jeonghan y Joshua quieren que vayamos al cine los cuatro, ¿qué te parece? Podría pagarte la entrada si gustas. –Seokmin dijo emocionado.

—¿Cuándo es la función?

—Esta noche, ¿te parece?

Jihoon aceptó.

Era la función de cine, el estreno de una nueva película de ciencia ficción. A Jihoon le gustaban, pero no era su pasatiempo el de ver películas. Los cuatro se encontraban haciendo fila para comprar los boletos. Jeonghan Estaña abrazado de Joshua, mientras que él estaba a un lado de Seokmin.

—Jihoonie... –odiaba que le dijeran así– ¿de dónde eres? Llevas casi una semana viviendo con Seokmin, y esa duda inquieta.

—Soy de Busan, y preferiría que me llamaras Jihoon.

—¿De Busan? –esta vez preguntó Joshua, quien quedó algo desconcertado– ¿Qué haces aquí?

—Mm... Suena complicado, pero estoy buscando a un viejo amigo, tengo muchas cosas que decirle sobre un asunto. –contestó.

—¿Sabes su dirección? Podríamos acompañarte si gustas. –Jeonghan sonrió, pero Jihoon negó.

—No tengo su dirección, así que me toca buscarlo por la ciudad.

—Seúl es grande, tardaras mucho tiempo en buscarlo, y más si vienes de Busan.

—Ah, cierto, también soy foráneo y aunque llevo un par de meses aquí, sigo sin acostumbrarme.

Llegaron al lugar para pagar los boletos, Joshua se acercó y pago los cuatro, después fueron a la barra para comprar las palomitas. Los tres amigos reían mientras platicaban, y a Jihoon le costaba un montón incluirse en las conversaciones. Pero una llamado hizo que los cuatro miraran a la gente.

—¡Wonwoo! –un chico se acercaba a ellos, Seokmin volteo con desesperación buscando a su hermano– ¡Yah...! Me disculpo, creí que eras un amigo, hace mucho tiempo que no lo veo.

—¿Conoces a Jeon Wonwoo? –se apresuro a decir Seokmin– ¿dónde está?

—Ah... ¿Wonwoo? Deje de verlo después de que me contó que conoció a tres chicos que necesitaban su ayuda, además me comentó que el alquiler de su casa dejo de ser pagado, y se mudó. Nunca me mencionó a dónde... solo sé que, uno de ellos se llama Choi Mingyu. –Jihoon se sobresaltó con aquello, conocía ese nombre, pero aun estaba desconcertado, ¿de dónde lo había escuchado?– ¿Eres conocido de Wonwoo?

—Soy su hermano menor, y lo he estado buscando...

—Oh... no sabía que tenia un hermano menor, de hecho, jamás nos comento de su familia. Bueno, espero haberte ayudado, que disfruten la película. –se despidió de ellos, y Seokmin bajo la mirada.

Jeonghan tomó su hombro, y le brindó una sonrisa. A Seokmin le dolía no saber de su hermano. Le dolía que por más que quería hacer algo, quedaba en nada y no lograba buscar a su hermano. Jihoon se había sobresaltado con el nombre de Mingyu, pero sin duda alguna, ese nombre le recordaba el pasado, un borroso pasado.

—Tengo que hacer una llamada, después los alcanzo. –se alejó de ellos, tomando su celular y llamando a un número conocido para él.– ¡Soonyoung! –exclamó después de haber escuchado que atendieron su llamada.

—¿Jihoon? ¡Jihoon! ¡Estúpido enano! ¡¿Dónde has estado?! ¡Tus padres quieren saber de ti!

—¡Ni se te ocurra decirles que te he llamado!

—Yah... esta bien, ¿que ha pasado?, ¿te encuentras bien? ¿Sano? ¿Donde te estas alojando?

—Después te digo todo, pero, ¿puedes hacer un favor? ¿Recuerdas a alguien llamado Mingyu?

—¿Mingyu...? Mmm... Creó que sí, pero parece ser que Myeongho lo conoce... no lo sé, parece que sí, solo que Myeongho no está en casa, cuando venga le comentó.

—Sí... Gracias, tengo que irme, me están esperando.

Wow, Jihoon... yah, me hablas cuando puedas, te quiero y cuidate, ¿esta bien?

—Igual cuidate.

Pinwheel/Trauma - SEVENTEENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora