Capítulo 34.

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Desperté sintiendo la mirada de Mariana sobre mi, así que le hice creer que seguía dormida para que explorará a sus anchas, con su dedo delinio mi rostro, sobre todo mis labios, pensé que me daría un besito pero no, se alejo.
— Tanto para nada, por lo menos dame un besito
— Has estado despierta todo este tiempo?
— Si, esperaba que me besaras y luego...bueno y luego siguieras besandome, pero no lo hiciste
— Eres una consentida, estas haciendo pucheros - Mariana se esta riendo de mi - Contrario a lo que piensas, si quería besarte es más lo pienso hacer a penas termine de darte está explicación, pensé que estabas dormida y no quería interrumpir tu sueño, así que pensé en ducharme preparar el desayuno y luego despertarte.

Después de que mi muy justo berrinche quedará satisfecho, le pedí a Mariana el primer turno para la ducha, cuando estuve limpia y arreglada baje hasta la cocina para hacer el desayuno. Una vez que todo estuvo listo lo lleve a la parte trasera de la cabaña donde tenía una mini versión del jardín de la mansión, así que arregle la mesa, coloque el desayuno y algo más. Volví a entrar en busca de Mariana que en ese preciso momento bajaba las escaleras.

...

Mariana vio a Oriana y el corazón salto en su pecho, además una hermosa sonrisa tomó lugar en su rostro, le gustaba tener a esa rubia pícara y berrinchuda cerca de ella, anhelaba sus besos y sus bromas. ¿Estaría enamorandose? La historia amorosa de su vida sólo contaba con una novia, luego de que Martina la dejará en esa cama de hospital no había salido con nadie más, no es que no hubiera tenido oportunidades, más bien no había sentido conexión con nadie...bueno con nadie hasta que una chica de hermosos ojos verdes la había mirado, insultado y apoderado de su mente.

— Lista para desayunar? - al parecer Oriana esta muy emocionada
— Si - le respondí
— Entonces cierra los ojos, no hagas trampa
— Vas a matarte? - intente bromear un poco, pero no funcionó porque Oriana lo tomo muy en serio.
— Claro que no corazón, jamás te haría daño - esa chica tiene fuego en sus ojos, hay tantas promesas allí, que depronto me da miedo descubrirlas, pero basta de esconderse.
El Dios de la vida le había dado otra oportunidad y la iba aprovechar, iba arriesgarse, está vez se aseguraría de vivir de verdad.

Del Amor Al Odio Y Del Odio Al Amor (Completa - Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora