Ranma y Akane: Antología

Ryoga!

-Callate y empuja!

-Si pero debiste detenerte en la gasolinera, te lo advertí. A este paso no llegaremos a Isshiki para disfrutar de la vista.

-Ryoga, deja de hablar y empuja.

-No sirve de nada empujarlo, Akane pesa demasiado jajajaj

-Eres un imbécil!-gritó la peliazul desde el volante del auto

-Es broma mi amor-respondió el ojiverde guiñando un ojo a la chica que lo miraba furiosa por el retrovisor. 

-Ey, ya basta, si la sigues molestando te dejaremos aquí tirado, entiendes?-resoplo Ranma dejando de empujar el auto

-Vamos solo es una broma, amigo, no es como si realmente puedo saber cuanto pesa. Ya en serio, hemos estado empujando el auto por más de 15 minutos y no avanzamos ni 20 metros.

-Es verdad, pero al menos ya lo quitamos de la vía. Lo malo es que estamos a mitad de camino.-analizó Ranma

-Lo bueno-le interrumpió el ojiverde-es que ahí viene nuestra salvación.

En la distancia un autobús se empezaba a ver doblando en la carretera. La intensidad del sol hacia parecer  como si el vehiculo estuviese bañado en aceite, distorsionando la imagen del mismo. 

-Crees que aún tengan asientos libres?

-No lo sé, pero no  creo que se detengan aquí.

-Bueno no lo sabremos a menos que lo intentemos. Solo mira y aprende, si hay una sola mujer en ese bus hará que el conductor se detenga-respondió Ryoga confiado y de inmediato empezó a agitar su camiseta blanca en el aire para llamar la atención, mostrando su trabajado abdomen. 

El autobús pasó de largo frente a ellos, meciéndoles el cabello con la brisa que provocó. Ranma soltó la risa y Akane giró los ojos fingiendo molestia aunque en realidad la escena le había causado gracia y si no se hubiera tratado de su ex, probablemente estaría riendo igual que Ranma. Ryoga agacho la cabeza por la vergüenza, pero en ese momento escucharon el sonido del autobús deteniéndose a unos pocos metros. 

-Eh, chicos, necesitan ayuda?- Un apuesto joven de cabello largo castaño abrió la puerta del autobús, llevaba el uniforme de la línea de transporte de Tokyo por lo que de seguro se trataba del conductor. En el autobús viajaba el equipo de fútbol masculino de la secundaria Furinkan, quienes disputarian un partido durante la tarde contra el equipo de la secundaria del lugar.

Ranma, Akane y Ryoga intercambiaron miradas, en definitiva ni una chica viajaba en ese autobús. Los tres sonrieron recordando lo que había dicho Ryoga antes de sacarse la camiseta.

-De hecho si, amigo-respondió Ranma-Podrías llevarnos hasta la playa? o acercarnos al menos.

-Um... no lo creo amigo. La secundaria reservo el autobús para sus estudiantes. No puedo llevarlos por seguridad. Pero si gustan puedo remolcarlos hasta la playa.

-Perfecto amigo, de verdad, no sabes como te lo agradecemos. Nos estábamos asando aquí.-añadió Ryoga mientras sacaba del maletero la cadena para ser arrastrados.

-No hay de que guapo-Sonrió el conductor al ojiverde- Avisenme cuando estén listos y nos iremos. Tengo que cerrar la puerta por los chicos, haganme una seña.-Terminó diciendo antes de volver a sentarse frente al volante el joven y apuesto chofer.

-Bueno Ryoga parece que hiciste un nuevo amigo- se burló Akane al verlo pasar junto al auto.

-Jja ja, que chistosa. Agradece que nos vamos de este lugar.-soltó el ojiverde volviendo a ponerse la camiseta mientras entraba en el auto.

-Oye no piensas ayudar a Ranma?! que descarado e inútil eres. No sé cómo pude salir contigo

-Ya callate Akane. No tienes idea de lo que se siente ser acosado.

-Ay, por favor Ryoga, él no te acoso. Quizás te coqueteo un poco, pero eso no es ni de lejos acoso.

-Bien, te quiero ver si una chica o un chico hace lo mismo con Ranma. 

-Ranma no es como tú. Me ocuparé de eso si pasa, tú no te metas, eres el menos indicado para opinar. 

Ambos guardaron silencio mientras Ranma terminaba la tarea de atarse al autobús y se acercaba a la ventanilla para hacer la seña pactada al chofer. Después de unos minutos regresó sonriendo mientras hacia un gesto a Akane que lo miraba confundida.

-Listo, nos  vamos- Ranma cerró la puerta del auto al entrar y miró con curiosidad a los otros dos ocupantes.-Qué? cómo es que no están peleando ustedes dos?

-No lo sé, supongo que Ryoga está todavía impactado por su nueva conquista- Rió Akane

-Santo cielo, vas a seguir fastidiando con eso. Que malagradecida eres-se defendió el ojiverde

-Por cierto Ryoga, ese chico me pidio que te diera esta nota-dijo Ranma extendiendo el brazo hacia el asiento de atrás.

-Ey Akane, dame eso!!

-Hola guapo. Mi nombre es Ukyo, lamento no poder presentarme correctamente, te dejo mi número si no tienes nada que hacer llamame . Estoy libre después de las 5. Besos- Leyó rápidamente en voz alta Akane.

-Dame eso, qué te pasa estas loca?!

-Puff eres un rompecorazones Ryoga-se burló Akane sacándole la lengua a través del espejo retrovisor

-Ya basta ustedes dos, parecen niños. Ryoga creo que deberías llamar a ese número-intervino con seriedad Ranma

-jaja, si muy gracioso idiota

-Creeme te llevarías una sorpresa-añadió 

El hermoso contraste azul dorado de la playa empezó a parecer en el paisaje. Ryoga fingió estar dormido en el asiento de atrás mientras Ranma y Akane se disculparon y agradecieron al amable chofer que los había ayudado.

-Eh tonto, sal que ya se han ido-pateó la puerta el chico de la trenza- baja ya, vamos a disfrutar de la playa-se oyó decir a Ranma ya a la distancia

-Ok!!-brincó el ojiverde saliendo de golpe del auto

.

.

.

.

.

Nota de la autora:

Hola, lo siento por no actualizar, espero la historia les siga gustando a quienes la leen. Ahora unos datos:

*Isshiki es una playa con forma de medialuna, separada en dos por un pequeño istmo cubierto de césped. Dada su cercanía con Tokio los japoneses la visitan para disfrutar del sol, la brisa marina, hacer kayak, windsurf o simplemente nadar. Es una playa muy visitada durante el verano y toma unos 20 minutos llegar desde Tokyo usando el tren y el autobús.