No sé qué pasó

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- Ya estuvo bueno de tanta conversación...que dicen si vamos a un karaoke, eh chicos?, y festejamos...el grupo 2 de periodismo?! - gritó lleno de entusiasmo un joven de pequeña estatura, cuerpo musculoso y rasgados ojos oscuros, de pie sobre una silla.

- joven, no se pare en la silla, por favor. - comentó la diminuta dependiente detrás de la caja registradora.

- lo siento - contestó el aludido bajándose de inmediato.

- claro, porque no?
- Yo voy!
- alguien sabe de un buen sitio?
- Yo conozco un bar karaoke buenisimo
- Yo no debería, pero tal vez solo un poco...
- buu que aburrida!! - se escucharon las voces de algunos de los compañeros y compañeras de clases.

- Ranma, tú que dices, irás? - se inclinó sobre la mesa Akane para preguntar.

La cercanía del rostro de la chica hizo sonrojar de inmediato a Ranma, que incluso sin lentes podía distinguir con claridad la inocente mirada de Akane y más que nada aquellos provocadores labios suyos. Por un segundo se imaginó besándolos, suaves, húmedos y tibios. Sacudió la cabeza intentando alejar esos pensamientos.

- Ranma, me escuchas?

El chico de la trenza tragó duro y se esforzó por contestar con coherencia.

- No lo sé... tal vez vaya... Será divertido, creo. - respondió el joven de ojos azules mirando fijamente su taza de café ya vacía.

- Sí?!, entonces también iré, no quería ir yo sola - soltó Akane acercándose aun más a Ranma - si vas tú me sentiré más cómoda, porque ya somos amigos. - puntualizó la joven de ojos color avellana mientras se acomodaba nuevamente en su lugar.

Ranma la miró por un segundo y no pudo evitar sonreír. Aquella chica era tan alegre y descuidada ¿apenas habían hablado como es que ya lo considera su amigo?

-Claro, somos amigos Akane, tú solo quédate cerca de mi y nada malo te pasará - dijo sonriente y en un tono bastante confiado el apuesto joven de cabellos negros.

Después de todo no había razón para estar nervioso, le gustaba eso era obvio, pero ella confiaba en él, dijo que iría solo si el también lo hacia, tal vez Akane había sentido lo mismo que él, tal vez ella, como él, sentía que tenían una conexión especial. Si, no había razón para mostrarse inseguro.

- Entonces esta decidido nos vamos, arriba, arriba!!- gritó emocionado el pequeño y musculoso chico.

Todos se levantaron y empezaron a salir, Ranma y Akane fueron los últimos.

- Primero las damas- señaló Ranma abriendo la puerta para Akane

La joven sonrió y puso su mano izquierda sobre el hombro de Ranma.

-Gracias, que amable

Por un momento lo dudó, que debía hacer? Preguntar o no? Tal vez ella lo mal entendería y crearía lo peor de él. Finalmente lo hizo.

- Akane...- dijo casi en un susurro haciendo detener a la chica de corto cabello azulado frente a él.

- Si, Ranma, dime- contestó mientras lo miraba a los ojos

-Akane...yo, es decir...ah... Tú tienes novio?...no me malentiendas lo preguntó por si él llega a vernos y cree que tu y yo...

Akane lo miró sonriendo con calidez y picardía

- Nop, no tengo...vamonos ya Ranma o nos dejarán atrás.

Mientras salían Akane tomó del brazo a Ranma, que dio un pequeño brinco por el inesperado contacto, pero se acopló a la agradable sensación de calor proveniente del cuerpo de Akane.

- No me gusta como me ve ese chico- señaló la joven Tendo a uno de sus compañeros, que aunque adelante no dejaba de mirar de reojo hacia ella

+Te refieres a Tatewaki?, es un idiota, íbamos juntos en secundaria- bufo Ranma

-De cualquier forma no me agrada. - contestó la chica con molestia- Por cierto, Ranma, sabes que me comentaron hoy?- comentó Akane como al descuido

-No tengo idea, que? - interrogó Ranma con genuina curiosidad

- Pues todos creyeron que somos novios porque entramos tomados de la mano... De hecho se me ocurre, si no tienes problema, qué tal si fingimos que somos una pareja? Solo para que no me moleste ese tal Tatewaki, eh que dices? -cuestiono Akane deteniéndose y mirando fijamente al ojiazul

- Si, claro...si eso quieres, yo... - respondió el aludido aún sin dar crédito a lo que escuchaba.

- Ey, ustedes dos, apurense! - grito casi una calle mas adelante alguien de su grupo de compañeros.

- Entonces es un sí? -continuó Akane como si aquello no le importara mucho.

- Sí, pero...yo no sé como debo o que puedo... -respondió con inseguridad el chico.

- Bueno eso...ya lo veremos luego, por ahora démonos prisa.







Ranma y Akane: AntologíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora