Las dos cartas

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-Te dije o no te dije que me dejaras hablar antes a mí!

Genma Saotome permaneció inamovible con las piernas cruzadas de espalda a su hijo. Le había dicho algo? Tal fue mientras comía aquel tazón de fideos o cuando devoró el pescado en el apartamento de Ranma. Ese lugar no se asemejaba en lo más mínimo a la comodidad del hogar Tendo Aclaro su garganta y empezó a decir:

-Soy tu padre y fui quien arregló que te casaras con una Tendo, incluso antes de tu nacimiento. No estás en posición de opinar.

-Eres de no creer. No tienes idea de cuantas veces me encontré con ella en la vida. No tiene nada que ver tu estúpido compromiso. Estamos destinados. Pero lo arruinaste, como siempre.

-Bien, lo arruiné, lo siento. Fue muy apresurado de mi parte. Arreglaré todo de nuevo, hijo. El señor Tendo convencerá a Nabiki y estarán casados a la brevedad.

-No escuchas, cierto!? No hagas ni digas nada! Deja que sea yo quien hable con el señor Tendo.
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Ranma siguió escuchando sin estar convencido de la idea de su cuñada. Al final salió dando un portazo y negándose rotundamente.

-Akane tu novio es muy... inocente, no? Digo si cree que puede convencer a papá-Nabiki cerró la última de sus cajas llenas de libros

-Basta, Nabiki-respondió recostándose en la cama Akane

-Por qué? Después de todo no sería más fácil hacer lo que les digo. Estaría en Australia por dos años haciendo mi maestría en negocios Internacionales en la Universidad La Trobe. Durante ese tiempo seré la prometida y tú su novia. Podrán conocerse y disfrutar más. Podrás hacer lo que quieras. Y cuando regrese ya habrás tomado tu decisión.

- Lo sé, es realmente una buena idea, Nabiki.

- Por su puesto

-Pero Ranma no quiere

-No quiere por qué es un tonto. Crees que papá permita que él elija. El siempre dice:hija saltada, hija quedada.

-Sip, es tan molesto-suspiró Akane

- Y...sabías que sospecha que salgo con alguien?- Nabiki cubrió con cinta adhesiva la tapa de una de las cajas más grandes y la empujo a un rincón.

-No, no sabía que tenías un novio...

-Uno... yo diría más bien dos, aunque no somos novios, es más algo como-intentó explicar- un escape. Es por eso que me eligió como prometida de Ranma.

-Nabiki...

-Qué?! No todas encontramos el amor, pero todas tenemos deseos.-Nabiki se recostó junto a su hermana en la cama y cerró los ojos.-Tengo que desestresarme, Akane. Ellos... son opuestos en todo y si pudiera mezclarlos serían perfectos

Nabiki se sentó y miro a su hermana.

-Espero que tu novio tomé la desición correcta, Akane. Son al menos dos años los que les doy. Si aceptan iré ahora con papá y diré que acepto el compromiso con la condición de antes ir a Australia a estudiar y volver. Y cuando vuelva, si es que vuelvo, diré que no puedo casarme con él por cualquier razón.

-Hablaré con Ranma esta noche.

-Qué bueno que están juntas-Kazumi entró a la habitación llevando ambas cartas-Nabiki, Akane llegó correo para ustedes

Nabiki arrancó los sobres de las manos de su hermana mayor. Leyó rápidamente a quien correspondían, separó el suyo y extendió el otro a su hermana menor sin siquiera mirarla. Abrió el sobre y leyó para sí el contenido.

-No puedo creerlo! sí, lo logré!! Gritó y se lanzó a abrazar a Kazumi- Tengo mi beca, la conseguí!!-siguió gritando mientras hacía girar en su abrazo a su hermana

-Felicidades, Nabiki!- Akane se unió al festejo de inmediato sin prestar atención a su propia carta, guardándola en su bolsillo.

-Tengo que prepararlo todo! Aún no puedo creerlo.

-Felicidades hermanita-dijo sonriente Kazumi-sé bien cuánto te esforzaste, pero... que pasara con tu compromiso?

-Eso...-Nabiki dio una rápida mirada hacia Akane- Hablemos de eso luego, Kazumi. Ahora estoy tan feliz!!
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La noche cayó pronto en Nerima, la casa Tendo paso de un gran alboroto diurno a un silencio nocturno casi total. Tofu Ono, al conocer las noticias insistió en salir a festejar el logro de Nabiki junto a su aparente compromiso, y, aunque a regañadientes, el patriarca Tendo había aceptado el pedido de su yerno.
-Mi amigo prepara una de las mejores pizzas del Japón- Había dicho Tofu Ono-Vayamos todos y festejemos.

Ranma y Akane se saltaron la salida bajo pretexto de exposición en clases.

-Recuerden traernos algo delicioso!- los despidió Akane desde la entrada agitando en alto su mano. Volvió a entrar a la casa y se encontró con la mirada de Ranma. Sonrió para él sin obtener respuesta.

-Akane, tenemos que hablar muy seriamente- sostuvo Ranma de brazos cruzados

-Hablar, qué aburrido!-respondió la chica tomándolo de la mano y llevándolo dentro, rumbo a su habitación

-No vas a convencerme. No soy tan fácil, sabes?

-Eres más fácil que la tabla del uno, Ranma- sonrió Akane empujándolo a su cama.
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-Nabiki, hija, por favor entiende. No quiero seguir discutiendo, el señor Saotome esta muy incómodo con esta situación

-Y? Por qué te importa? Yo soy tu hija, yo! No te interesa lo que yo siento. Lo que quieran tus hijas te da igual, no?

-No digas eso, hija. Le prometí a su difunta madre que las cuidaría. Y es lo que estoy haciendo. Ranma será un gran esposo y cuidara de ti y...

-Cuidar de mí? No necesito que nadie cuide de mi. Gané esta beca en base a mi esfuerzo y capacidad. No necesito tu permiso para hacer lo que quiero. Si el tío Genma quiere que me casé con su hijo tendrá que esperar a que regresé. - Nabiki se levantó de la mesa con clara intención de marcharse.- O puede intentar convencer a Akane, con suerte saldrá vivo

Genma engulló otro trozo de pizza y ante la situación decidió interrumpir pensando en lo que Akane le había dicho el día anterior.

-Mi buen amigo Tendo. Mi futura nuera tiene razón.

Las miradas de todos se centraron en él.

-Doy mi consentimiento para que la boda se realice a su regreso.

-Pero...- intentó decir Tendo

-Dos años pasan volando, mi buen amigo. Tu prometido te estará esperando. Ve y estudia mucho. Y ahora, comamos!-Brindó Genma levantando un trozo de pizza. Los demás lo imitaron. Nabiki se sentó y miró su celular.
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La mano inquieta de Ranma viajaba desde el cuello hasta el final de la espalda de su novia. La suave y tibia piel que tanto había extrañado tocar. El calor y la humedad de los labios que no había sentido desde hacía tanto. Su mano se deslizó un poco más abajo. Ese odioso short le estaba estorbando. Tal vez debería quitárselo de una buena vez.

-Uhm qué es esto, Akane- Ranma sacó del bolsillo trasero el sobre que había recibido la menor de los Tendo

-Eso, no sé, me llegó esta mañana-respondió intentando tomarlo

Ranma se levantó y concentró su  mirada en el texto. Giró el sobre y volvió a leer. Se quedó mirándolo con detenimiento por un rato.

-No sé que dice-admitió

-Pues déjame ver, tonto

Akane tomó el sobre y leyó para sí finalmente su contenido.

-Y, qué dice-le apuró Ranma

-Es...una invitación...


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Nota de la autora: Hola, me estaba quedando muy largo, según yo, entonces lo dejé hasta aquí y les actualizo pronto, espero jejeje. Bye, nos leemos




Ranma y Akane: AntologíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora