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Emma y yo fuimos a buscar un pequeño cachorro de pastor alemán para comprar en una granja a las afueras de la ciudad, en el camino escuchábamos canciones de Taylor Swift y de Maroon 5.
Ella se estaba comiendo un helado de chocolate con almendras mientras tarareaba las canciones.

-¿Ya sabes cómo le vas a poner? -preguntó intentando romper el chocolate sin que cayera sobre el asiento.
-Estaba pensando en Rhaegar como el de Games of Thrones -
-Ni siquiera te gusta Games of Thrones -dijo ella.
-No, pero me gusta ese personaje, leí su historia en internet no es necesario ver la serie -respondí sin quitar la vista de la carretera. -era el príncipe perfecto, el mejor guerrero, el más noble, valiente, inteligente...
-Y aún así, lo matan -rodó los ojos.
-Oh por favor, todos mueren ahí -
-Bueno, igual me gusta el nombre de Rhaegar -sonrió. -Rhaegar Scriver suena bien.
-Todo suena bien con Scriver -tomé su mano y la besé.
-Eres un bobo -miró por la ventana. -es aquí.

Entramos a la granja y estacionamos el coche frente a un granero; el lugar parecía sacado de la película de Hannah Montana, los graneros y establos, la casa tipo rústica, era muy bonito.

-Buenas tardes -nos saludo un hombre en una camisa de franela y sombrero.
-Buenas tardes, mi nombre de Jack y ella es Emma -nos presente al tiempo que estrechaba la mano del hombre.
-Soy Tim -sonrió. -¿le puedo ayudar en algo?
-Escuchamos que aquí vendían cachorros de pastor alemán y nos preguntábamos si tenía uno -me encogí de hombros.
-Llegas justo a tiempo, ayer la última camada de cachorros cumplieron dos meses y medio ya están listos para separarlos de su madre -nos indicó que lo siguiéramos. -tenemos cuatro porque los otros tres los tenemos apartados.
-Oh está bien, solo necesitamos uno -

Escuchamos ladridos de cachorros y pude ver como a Emma se le derritió el corazón, eran siete cachorros hermosos que jugaban a empujarse y morderse entre ellos.

-Jack, -Emma casi comenzó a saltar de la emoción. -son hermosos.
-Lo sé -sonreí.

Nos sentamos en el césped cuando los pequeños corrieron hacia nosotros, los acariciamos a todos y Tim nos dijo cuáles eran los que ya estaban apartados, al parecer ellos eran los que les vendían los perros al departamento de policía porque nos dijo que tres cachorros estaban apartados por ellos.

-¿Cuál nos llevamos? -pregunté.
-Este -ella tenía en sus brazos a un cachorro muy hermoso que tenía los ojos de un azul muy brillante. -él tiene la cara de Rhaegar.
-Tienes razón -me lo pasó y lo abracé. -Vamos pequeño Rhaegar, te llevaremos a casa.

Le pagué al Tim los dos mil dólares que costaba el enano, tenían el certificado de pedigrí y el chip de localización ya puesto al igual que las vacunas.
De ahí nos pasamos a Petco para comprar todo lo necesario y que lo revisara un médico veterinario.

-Todo está perfecto con el pequeño -lo acarició. -pero a los tres meses le toca otra vacuna.
-Yo me encargo de traerlo -volví a cargarlo. -¿Qué comida sería la más adecuada?
-Los pastores alemanes son perros que necesitan mucha proteína, pero tienen que mantener sus niveles de azúcar estables en niveles óptimos para su salud, a mi me gusta cuidar de ellos desde pequeños para que siempre estén sanos, en la cartilla dice que a este enano le daban Eukanuba pero aunque es muy buena es preferible darle algo sin granos la comida marca Blue sin granos para cachorros grandes es muy indicada o Orijen para cachorros también es adecuada -nos explicó. -las dos están hechas a base de pollo sin hueso, pero la Orijen tiene hígado de pollo y pavo sin hueso, entonces las proteínas y calorías son mayores, cualquiera de esas dos son las mejores.
-Muchas gracias, iré a comprarla de una vez -

Nos pasamos a la parte de la tienda y pusimos a Rhaegar en el suelo para que se enseñara a seguirnos.
Tomamos un carrito para ahí poner todo lo necesario.

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