-Cada día se parece más a él.
Archer se sienta a mi lado y se queda mirando cómo doy el biberón a Roger. Sé que no ha venido para decirme eso, así que permanezco en silencio hasta que se decida a seguir. El resto están en la arena, jugando a fútbol o simplemente disfrutando de un buen baño de sol. Y no me gusta que Archer no se mezcle con los chicos porque son compañeros ahora, pero supongo que antes debe hacerse a la idea de que ya no es un bombero solitario que solo se llevaba bien con Roger.
-Me lo merecía -dice al fin-. Te prometí que estaría bien con las decisiones que tomases y soy un asco haciéndolo. Créeme que lo intento, pero en ocasiones todavía fracaso.
-Sé que me aseguraste que te parecía bien que le pidiese a Harvey que fuese el padrino de Roger, pero...
-Te lo dije en su momento y te lo repito ahora, por si tienes dudas al respecto, Zandra -me interrumpe-. Roger era mi hermano, no de sangre, pero sí por elección, así que su hijo es mi sobrino. Con eso me basta para que forme parte de mi vida y lo quiera, pase lo que pase. No necesito el título de padrino para saber que siempre cuidaré de él y lo protegeré con mi vida si es necesario.
-Tampoco hay que ponerse tan dramáticos -rio. Aunque solo pensar en ello, me produce escalofríos. No quiero perder a nadie más en mi vida, si no es porque ya sean viejos y les haya llegado su hora de descansar para siempre.
-Ya me entiendes -se queja.
-Y por qué esos morros, entonces -si él no lo dice, se lo sacaré yo.
-Porque para mí, ningún hombre será nunca suficiente para ti -me confiesa finalmente, a regañadientes-. Te mereces algo mejor que alguien ausente la mayor parte del año y que se juega la vida en el extranjero cada...
-Bien -ahora me ha enfadado-. Una, estás presuponiendo que le intereso a Harvey y eso aún está por demostrarse. Y dos, deberías aplicarte el cuento y romper el compromiso con Chris, porque ella también se merece a alguien que no se vaya durante meses ni se juegue la vida en el extranjero. No me vengas con lecciones morales cuando tú pecas de lo mismo, Archer.
-¿No has sufrido ya suficiente con Roger siendo bombero?
-¿No ha sufrido Chris suficiente con su hermano mellizo siendo militar? ¿O debo recordarte que estuvo a punto de perder la vida hace ocho meses? La hipocresía no te sienta nada bien, Archer. Te hace parecer estúpido.
-Vale, está bien. Ya me callo. Intentaré no entrometerme más -suspira antes de seguir-. Y no poner mala cara.
-Eso está mejor -le sonrío-. Y ahora sácale el aire a tu sobrino, quiero reunirme con las chicas.
-Zandra -me llama, casi diría que asustado. Se siente torpe cuando tiene que tratar con Roger y jamás quiere que lo dejemos solo con él, pero si está dispuesto a dar su vida por mi hijo, tendrá que aprender a sujetarlo primero.
-Qué gusto -me siento junto a las chicas-. El sol es vida.
-¿Y te atreves a dejarlos solos? -Chris sonríe, al ver que Archer trata de golpear delicadamente la espalda de mi hijo, tal y como le enseñamos.
-Algún día tiene que ser -le devuelvo la sonrisa- ¿Quién cuidará de él cuando nos vayamos de fiesta y Kyle tenga la noche libre?
-Si me lo planteas de ese modo -se rasca la barbilla y luego ríe-. Creo que voy a sacarle una foto. Tiene tal cara de espanto, que puedo usarla como chantaje cuando se ponga tonto.
-Buena idea -rio.
-¿Habéis visto eso? -Neve señala hacia Joy, que está paseando por la orilla, con Kyle a su lado-. No han dejado de hablar desde que se terminó la ceremonia. ¿Debo preocuparme?
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Zandra (Saga SEAL 4)
ActionZandra acaba de perder a su marido y dar a luz al hijo que ambos esperaban con tanta ilusión. Pero ha aparecido alguien inesperado en su vida, que amenaza todavía más su ya inestable corazón. Segura de que lo que siente es una traición a su difunto...