Secretos - KookMin

10

Cuando Jimin despertó la mañana siguiente encontró una taza de café caliente y humeando en la mesa al lado de la cama. El delicioso olor le hizo rugir el estómago de hambre. No había cenado anoche y se moría por un desayuno en ese instante. A unos metros de la cama, Taehyung estaba sentado en su escritorio, estudiando aparentemente.

- ¿Qué hora es? - fue lo primero que preguntó y luego tomó la taza para darle un sorbo.

- Como las nueve casi.  - dijo Taehyung.

- Mierda...las clases. ¿No fuiste?

- ¿Y dejarte solo en mi casa? Nop.

- Uh, bueno...deberíamos ir a las que quedan. No puedo faltar o mamá me matará. - rió como si nada. Se levantó de la cama y empezó a ponerse sus zapatillas.

- Espera…¿de verdad vamos a pretender que lo de anoche no pasó?

Anoche. Esa sola palabra le hizo a Jimin pensar en su hermano. Esperaba que estuviese bien.

- Ugh, peleé con Hoseok, como siempre. Nada nuevo.

- Ya sé lo que pasó. Le envié un mensaje anoche para avisarle que te quedaste a dormir y no preocuparlo. ¿Y cómo puedes decir que no pasó nada nuevo cuando llegaste llorando a mi casa?

- Y…¿cómo está? - preguntó Jimin. Necesitaba saber.

- Está bien. Pero casi le rompiste la nariz.

Aquella información le alivió un poco. Pero Jimin por dentro seguía sintiéndose una bestia.

- Bueno...siempre fue un cabeza dura. - bromeó riendo pero Taehyung le miraba con seriedad.

- ¿Quieres contarme qué pasó?

- Nada, lo de siempre. Él quiere hablar de cosas que yo no, forcejeamos y lo golpeé.

- Sí, y esta vez te fuiste al carajo. Por eso lloraste anoche. Al menos admítelo, Jimin.

Su amigo le hablaba con un tono tranquilo y no como si estuviese regañándolo por lo que Jimin no tuvo motivo para enojarse con él y discutirle también.

- No quise lastimarlo de esa manera. - confesó.

- Por supuesto que no, sé que jamás querrías que algo malo le pase a tu hermano.

- Me hizo enojar. - se excusó - No me respeta cuando quiero estar solo.

- Solo le preocupas y quiere ayudarte. ¿Puedes al menos entender eso?

Jimin no respondió. Sabía que eso era cierto pero él no podía hacer nada de lo que Hoseok quería.

- Quizás sí sea mejor que me vaya de casa. Es mejor estar separados después de todo.  Él siempre quiso que me fuera de su casa.

- Hoseok no quiere eso. Créeme. - le dijo Taehyung. - Además ¿a dónde vas a ir? ¿Con qué dinero vas a pagar un lugar?

El pelinegro puso una sonrisa enorme y se volvió a tirar en la cama plácidamente.

- Olvídalo. Mi casa no.

- Ay, vamos, si adoras mi presencia. - rió Jimin - Tienes todo este lugar para ti solo.

- Es la casa de mis padres, solo porque ellos estén de viaje y me hayan dejado la casa no quiere decir que deje que vagos como tú se queden.

- Que mala onda eres. Soy tu puto mejor amigo.

- Bueno ¿vas a buscar un empleo para colaborar con los gastos?

- Ehh nop. - respondió con seguridad Jimin.