Con un semblante malhumorado, típico de cada día de su existencia, Park Jimin caminó por los pasillos de la universidad con pisadas fuertes y resonantes. Los estudiantes se apartaban y lo dejaban pasar. Nadie quería entrometerse en su camino, no cuando conocían a la perfección la reputación de aquel chico. A pesar de su baja estatura y de su carita angelical, Jimin podía ser una completa pesadilla para cualquiera que se animara a enfrentarle, por lo que todos preferían mantenerse alejados de él.
El único que lo seguía, con pasos apresurados y cargando un montón de libros en sus manos, era Taehyung. Su amigo desde la infancia, y la única persona con la que Jimin se relacionaba ‘amablemente’.
- ¿Puedes apresurarte, Taehyung? Estamos llegando tarde.- Jimin volteó y le echó un vistazo a su amigo quien al parecer tenía dificultad para llevar ambas mochilas y los libros. Luego le dio un sorbo a su malteada, lo único que él cargaba, y siguió caminando.
- Llevar tus cosas a clases más las mías es complicado, pedazo de idiota. No soy tu esclavo. - respondió el otro.
- ¿Y quién te pidió que las trajeras, pedazo de estúpido? Como si fuese a prestar atención a clases de todos modos.
Jimin no tenía prisa por llegar a su salón por las clases, claro que no. Solo estaba apurado para poder encontrarse con cierta persona.
- Si no las traigo yo, serías un completo desastre. Agradéceme que me preocupo por tu futuro. - continuó el chico detrás de él.
- Duh, ¿Te preocupa mi futuro? Solo asegúrate de estudiar bien para el próximo examen, así me pasas las respuestas y listo.
Taehyung bufó, cansado. No tenía caso discutir. A Jimin no le interesaban para nada los estudios. Solo seguía en esa universidad por orden de su hermano y de su madre nada más.
- Bingo! - exclamó Jimin cuando visualizó a su objetivo en la puerta del salón.
- Jimin, espera, no lo hagas! - Taehyung intentó detenerlo pero su amigo ya se había adelantado.
Jeon Jungkook estaba apoyado en el marco de la puerta del salón, esperando al profesor para que iniciara la clase de ese martes, y charlando con su amigo Yoongi sobre el juego de la semana pasada. Aún seguía recibiendo felicitaciones por parte de todos por haber metido ese gol que los llevó a la victoria.
Tenía que sonreír y pretender estar feliz pero Jungkook ya quería que todos se olvidaran del tema de una buena vez. Quería entrar a clases y que lo dejaran en paz aunque sea por dos horas.
Le gustaba estudiar y siempre era de los primeros en el salón, no le gustaba llegar tarde. Y tendría un record de puntualidad intacto de no ser por Park Jimin.
Esa mañana, sin embargo, parecía estar tranquila y no había rastro del chico que le complicaba la vida. Pero fue muy pronto para relajarse…
Antes de que pudiera reaccionar, su camisa ya estaba empapada cuando el chico de cabellos negros se le acercó y lo embistió ‘accidentalmente’, derramando toda su malteada sobre él.
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Secretos - KookMin
Fiksi PenggemarPark Jimin vive enojado. Tiene un carácter duro, frío, rebelde y no hay mucho que le importe realmente en la vida o lo motive. Actúa como un idiota la mayor parte del tiempo y odia a todo el mundo pero en especial odia con todo su ser a Jeon Jungkoo...