El timbre en la puerta no paraba de sonar. Hoseok colocó la taza de café en la mesada de la cocina y se levantó a abrir.
- ¿Jungkook? ¿No deberías estar jugando? El partido empezó hace qué…¿diez minutos? - miró sorprendido al chico frente a él. Jungkook se veía agitado.
- Me importa un carajo eso ahora. Me enteré que golpearon a JImin. ¿Está aquí? No contesta su celular.
- Oh, sí...está descansando en su habitación. Estaba bastante herido. Jungkook ¿tú sabes quién fue?
- Sí...fueron mis amigos. Bueno, ex amigos obviamente. - respondió con bronca.
- No lo puedo creer. ¿Por qué?
- Por mí. ¿Por qué va a hacer? Ya saben de nosotros y que dejaré el equipo, no se lo tomaron nada bien. Son unos imbéciles. ¿Cómo está Jimin? ¿puedo subir a verlo?
- Por supuesto….pero debe estar dormido. Estaba muy cansado, se veía terrible. Además...uh, se supone que no debía hablar contigo pero es que se enteró de algo feo en la universidad…
- Uh, ¿de qué?
Hoseok le contó la historia de Beom-gyu y entonces Jungkook subió con rapidez los escalones hacia la habitación del pelinegro. Golpeó levemente la puerta pero nadie contestó. La abrió entonces despacio pensando que Jimin debía estar dormido. Pero no le importó, quería verlo, y si notaba una puta marca en el rostro del mayor, estaba seguro que mataría a Yoongi, lo mataría.
No obstante al abrir la puerta una corriente de aire frío chocó en su rostro. La ventana estaba abierta. Y en la cama...no había nadie. Encendió la luz desesperado y en definitiva Jimin no estaba por ningún lado.
- Hoseok! - gritó y en seguida el nombrado estuvo en el cuarto.
- ¿Qué pasó? ¿Dónde…?- quiso preguntar cuando vio la habitación vacía.
Jungkook notó unos sobres de papel blanco sobre la almohada de la cama. Los tomó y notó que eran tres, con destinatarios distintos. Uno decía Para mamá y Hobi, otro Para Tae, y finalmente el tercero, decía Para Kookie. El corazón se le detuvo. No podía respirar. Le entregó los otros a Hoseok y abrió el que tenía su nombre. Sus ojos ya estaban llenos de lágrimas incluso antes de empezar a leer. La letra era de Jimin claramente.
Mi querido bebé.
Sé que te dije que siempre estaría a tu lado, pero no voy a poder mantener mi palabra. Espero que algún día me perdones, y si no lo haces está bien. No te culpo.
Pero siendo sincero….de todas modos no me necesitás. Nunca lo hiciste, bebé. Eres el chico más fuerte y valiente que alguna vez conocí. Sé que todo estará bien en tu vida, que cumplirás tus sueños y saldrás adelante. Ya puedo imaginarte...un famoso y reconocido biólogo, trabajando para salvar al mundo como un verdadero héroe. No tengo dudas de eso, mi amor. Sé que lograrás todo lo que te propongas.
De nuevo, te pido perdón por no poder acompañarte en el proceso. Pero es que...no me siento bien, me duele mucho el alma. Hay muchas cosas del pasado que no puedo dejar ir y de esta forma no puedo estar contigo, con nadie. Estoy cansado, bebé, muy cansado. No espero que lo entiendas y tampoco quiero llenarte esta nota con todos los horribles sentimientos que me carcomen el corazón una y otra vez hasta asfixiarme.
Solo quiero aprovechar para decirte que te amo. No te lo pude decir en persona pero te lo digo ahora. Te amo y siempre te amaré. Las semanas que pasé contigo desde que nos conocimos, cada beso, cada vez que hicimos el amor, cada palabra dulce que me dijiste, hasta nuestros cortos días como novios, todo eso fue el mejor tiempo vivido en toda mi vida. Te lo juro. Fuiste un pequeño regalito del cielo para mí. Uno que no me merezco y estoy listo para dejarte ir, Kookie.

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Secretos - KookMin
FanfictionPark Jimin vive enojado. Tiene un carácter duro, frío, rebelde y no hay mucho que le importe realmente en la vida o lo motive. Actúa como un idiota la mayor parte del tiempo y odia a todo el mundo pero en especial odia con todo su ser a Jeon Jungkoo...