2/3.
Laurence.
Sábado.
¿Qué demonios hacía un sábado en este horrible lugar?.
Dejar que mamá me convenciera no fue la mejor idea, desde mi punto de vista.
-Está bien, Laurence. Puedes hablar conmigo.
Es mi segunda consulta con el terapeuta, en la primera no hablé nada. Estuve dos horas.
Esto no es divertido, las personas con las que hablé acerca del terapeuta dijeron que era divertido. Pero es todo lo contrario.
No me agrada estar encerrada entre cuatro paredes con un hombre que me mira así.
Sus ojos me observaban fijamente, parecía estar de buen humor.
Sí, admiro su paciencia, perdió dos horas de su tiempo ayer por sentarse con una adolescente que no le habla más que para saludarlo y despedirse.
Sí, sólo en esas ocasiones le hablé. Los modales ante todo.
¿Qué tan mal podría resultar el hecho de hablar con él e intentar descargarme?.
-Está bien, hoy no haré que pierda dos horas-reí. -Hablaré con usted.
La seriedad en su rostro comenzaba a molestarme.
¿No podía sonreír al menos una vez?.
-¿Por qué estás aquí, Laurence?-preguntó.
-Para empezar, mi madre pidió turno porque necesito descargarme.
-Entonces hazlo.
-El problema es que no sé cómo. Soy una persona introvertida.
-¿Por qué?.
-Miedo al rechazo, a la burla. No me gustaría que me juzguen por estar mal, sé que es algo mínimo por lo que estoy así.
-Escucha, Laurence. Primero tienes que memorizar que si estás mal no es mínimo. Al menos para ti no lo es y por eso te afecta.
Asentí sin saber qué decir realmente.
-prosigue.
-Creo que es una acumulación de cosas. El hecho de no aceptarme es la causa principal, perder seres queridos es otra y el miedo a que mis padres no me acompañen en cada paso que doy también.
-¿Tus padres son comprensivos?-preguntó mientras escribía en una libreta.
-Sí. Mi madre más que mi padre. Pero ambos son comprensivos.
-¿Y qué puedes decirme de Tommy? Por lo que entendí es tu hermano.
Este hombre me daba la confianza que necesitaba, sabía que si hablaba con él nadie sabría lo que pasaba por mi cabeza.
-Tommy es genial, es más comprensivo que cualquier otra persona que conozco y está para acompañarme en cualquier momento. Sea malo o bueno.
Asintió con la cabeza varias veces y continué hablando con él, como si lo conociera de toda la vida.
Amelia.
Mientras esperábamos a Laurence con Owen no hablamos ni una sola palabra.
Sí, desde aquel día no hablamos.
Él está distante conmigo y aún no entiendo el por qué; sólo dije que Laurence debía ir a un terapeuta.
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Family And Problems||•Omelia•
FanfictionAmelia Shepherd y Owen Hunt. Un matrimonio feliz, con dos hijos adolescentes y su vida prácticamente formada. Sus hijos ya no son tan pequeños como antes, deben adaptarse y acompañarlos en cada paso que dan.