"Viniste a mí como un sueño
Eras como un aliento cálido para mí
No tenías una razón
Eras siempre así en aquel entonces"
—Taemin, Already—Era el último día de la semana en Japón, el congreso había ido de lo mejor, para sorpresa de Taemin Hwasa se mantuvo a raya, lo que el no sabia era que Minho la volvió a amenazar, por consiguiente lo mejor para ella fue guardar silencio.
El doncel hizo un puchero cuando se dio cuenta que la pequeña maleta que tenía no era suficiente para todo lo que había comprado, porque le llevaba un set de maquillaje a Hyuna, mascarillas para el rostro a Key, también le compró algo a Jonghyun y a Onew, ellos no se podían quedar.
Además de que también a su buena amiga, Niveth, la esposa de Onew, para ella compró algo especial, una bola de cristal, de tamaño mediano, en su interior contenía tres flores de cerezo, eran reales, lo que hacía el regalo más especial, su amiga lo amaría, ya que representaba su relación con su amado esposo, así que lo guardó con sumo cuidado y salió de su habitación decidido a comprar otra maleta.
En el ascensor alguien le saludó, un hombre de tez morena y hermosa piel, de rasgos finos y sonrisa impecable.
—Doctor Lee, al fin le veo de frente.
Taemin elevó sus cejas y sonrió tenso.
—Soy Miura Haruma, soy cirujano cardio vascular, me ha encantado el protocolo que usó en los congresos.—Haruma le tendió una tarjeta.—Me gustaría poder invitarte a cenar esta noche, sino es molestia.
El doncel tomó la tarjeta y salió del ascensor junto a Haruma, justo cuando Minho iba a entrar, el castaño se mordió las mejillas al ver a Taemin sonreírle al otro.
—¡Tae! Justo iba a pasar por ti.—comentó Minho con fingida alegría.
—Doctor Choi.—Haruma le tendió una mano y también se presentó, obviamente sin elogiar como lo hizo con Taemin.
Ambos médicos se miraron desafiandose, porque Haruma se había dado cuenta del trato que se daban Minho y Taemin, aunque según investigó los dos no eran más que rivales por el puesto de director del hospital en el que laboraban en Corea, así que quizás si le ofrecía trabajo a Taemin en su hospital y lo hacía director, quizás el rubio aceptaría, así que cruzó sus dedos para que el más joven aceptara.
—Mi invitacion sigue en pies Doctor Lee, llámame.
—Gracias Miura, y por favor llámame Taemin, más tarde te dejo saber si acepto o no.
Taemin le brindó una cálida sonrisa y lo vio alejarse, porque había sentido algo con Haruma, no sabía que era pero le interesó, además disfrutó ver a su ex sintiendo celos.
—Apenas lo conoces y saldrás con él así por así.—Minho se colocó dos dedos en la nariz.
—No tiene nada de malo que cene con él, ahora acompáñame a comprar una maleta más grande.
Antes de que Minho protestara Taemin lo tomó del brazo y lo hizo salir a la tienda más cercana, por cosas de la vida, quizá del destino se detuvieron en el pestonal a esperar los carros se detuvieran para poder cruzar, a su lado una señora llevaba a su bebé en brazos, el pequeño no dejaba de llorar y quejarse, el doncel se mordió los labios inquieto, porque sabía que el infante estaba llorando porque algo le molestaba, así que en vez de cruzar la calle cuando tuvo la señal se acercó a la señora.
—Hola.—la saludó en japonés tratando de ver el bebé.
—Disculpe si le molesta que mi bebé llora, pero no para, ya no se que hacer.
—¿Me deja verlo? Soy médico y mi compañero también.
La vista de la mujer se iluminó aunque luego perdió la emoción.
—Ya lo he llevado a varios centros y solo me dan calmantes, pero solo se duerme y al despertar está así.
—Vamos a sentarnos en aquellos bancos ¿Le parece?
La mujer asintió y caminó delante de los médicos.
—¿Que haces Taemin?.—le preguntó Minho en un susurro.
—Creo saber que le pasa.
Taemin se sentó al lado de la mujer y revisó al bebé, por último le quitó los zapatitos y luego una media y revisó sus pies, procedió con lo mismo el otro pies y al quitar la media se dio cuenta de la dolencia del bebé.
—Y aquí está el problema señora.—señaló Taemin.
Uno de los dedos del bebé estaba inflamado y rojo, tenía envuelto uno de los hilos de las medias en él, lo que le hizo un tipo de torniquete evitando el flujo sanguíneo y dándole dolor al bebé.
—Síndrome del torniquete.—dijo Minho con sorpresa.
—Efectivamente, eso era la razón por la que su hijo está llorando. ¿Tiene unas tijeras o corta uñas? Para poder cortar el hilo.
La mujer buscó en el bulto de su bebé y sacó una tijeras de allí, Taemin con cuidado cortó el hilo y a los pocos minutos el pequeño dejó de llorar, el doncel se enojó con los médicos que habían atendido al niño, ya que no se dieron cuenta del problema.
—¿Cómo no se dieron cuenta del problema en el centro médico que atendieron a su hijo?.—preguntó Taemin.
—Ellos no le quitaron las medias doctor, dijeron que hacía mucho frío para hacerlo, no le dieron importancia.—la mujer miró a su hijo y besó su frente.—Gracias a usted doctor por ayudarme, no se que hubiera hecho.
Su hijo hubiera perdido su dedo sino nos hubiéramos encontrado señora.
Pensó Taemin, en cambio apretó sus ojos y sonrió masajeando el dedo del bebé.
—Debe de tener cuidado con lo que usa para el bebé, revisar que sus medias no tengan hilos sueltos ni tampoco cabello, su hijo tenía lo que mi compañero dijo, el síndrome del torniquete, puede pasar en otras áreas del cuerpo, pero en niños es común que pase como con su bebé, así que revise siempre cada parte de su cuerpo, especialmente si llora sin ninguna razón, ya que sino se atiende a tiempo puede perder un dedo.
La señora asintió y abrazó a su hijo.
—¿Cómo le puedo pagar doctor? Tengo algo de dinero aquí pero le puedo depositar.
—No necesita hacer eso señora, vaya tranquila, ha sido un placer ayudarle, cuide a su bebé.
Taemin se despidió y se alejó junto a Minho, Choi estaba sorprendido de Taemin, el doncel desbordaba conocimientos por todos lados, porque a él no se le ocurrió aquello, sin embargo a Lee sí.
—Me sorprendes Tae.
El rubio se encogió de hombros y frunció sus labios cruzando la calle
—Si nuestros colegas hubieran revisado sus pies se hubieran dado cuenta, me asusta los tipos de médicos que hay en estos tiempos, según he visto antes se preocupaban más, se me ha roto el alma al esuchar ese bebé llorar.
La mención de eso hizo pensar a Minho en su hijo.
—Taemin ¿Cómo perdiste a nuestro bebé?
Por suerte habían cruzado la calle, porque Taemin se detuvo abruptamente en la acera.
—¿Porque preguntas eso ahora? Yo dejé eso en el pasado Minho, sólo pasó, estuve solo sin ningún apoyo, cuando comencé a sentirme mal llamé a emergencia, yo no podía ni moverme del dolor que tuve, pero los paramédicos llegaron casi una hora después de yo llamar, quizás sí tú hubieras estado allí no pasa, yo también casi pierdo la vida Minho, así que espero no me vuelvas a preguntar por eso de nuevo.—Taemin se dio la vuelta y se alejó de allí, dejando a Minho con un vació por sus palabras.
ESTÁS LEYENDO
Growing Passion
FanfictionLa vida para los donceles nunca fue fácil, porque eran hombres que podían concebir, y por lo tanto en Corea no eran bien vistos, y los de bajo recursos no podían hacerse profesional, sólo unos cuantos lograban pasar esta prueba, ya que sus padres p...