6. La piedra filosofal

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Ya habían acabado las vacaciones de Navidad y los niños volvían al castillo para al siguiente día impartir sus clases correspondientes. Todavía no había rastro de Amelia, la cual bajaba de peso considerablemente a causa de no comer nada en muchos días, y cada vez se sentía más débil, se enteró de que la estaban buscando por el profesor Quirrell, quien hablaba con la cosa detrás de su cabeza y se desquitaba con ella, solo no entendía el porqué la tienen ahí sufriendo si no les servía de nada, podrían haberla matado.

Mientras buscábamos a Lia, vi un espejo, en el reflejo podía ver a mis padres junto a mí.

—¡Y yo me veía a mí mismo siendo delegado, capitán del equipo de Gryffindor de quidditch y ganabamos la copa de la casa!

—¿Os paráis a jugar con un espejo cuando alguien está secuestrada? Quién sabe si todavía no está muerta. - hablaba Hermione, quien se enteró de lo de Amelia una vez se reencontró con sus amigos.

Aún así, creo que lo han trasladado a otro lugar. —Harry hizo una mueca.— también la Lia falsa habló de una piedra filosofal, ¿creéis que deberíamos buscarla para encontrarla a ella? Y no creo que esté muerta. —lo último intentó decirlo con seguridad, pero ni si quiera él sabía en qué estado estaría su amiga.

Primero debemos buscar información sobre ella, de eso me encargo yo. Nos vemos luego. —Hermione salió corriendo hacia la biblioteca para buscar toda la información que pueda.

Una persona empujó a Harry con fuerza. Este se giró y se encontró de frente a Draco, Goyle y Crabbe. El primero lo miraba con furia.

—¿De verdad no sabes cuidar a una maldita persona? Sabia que no se podía confiar en ti, ¡vives ignorando a Amelia y ahora por tu culpa está desaparecida! Ojalá la culpa te pese si no aparece. Y si no, yo me encargaré de eso. —los tres pasaron empujando a los dos amigos para desaparecer por el pasillo.

Draco se molestó con Amelia antes de volver al castillo por no contestar sus cartas, pero cuando se enteró de lo sucedido, su furia y odio hacia Harry aumentó considerablemente. Aún así nunca paró de enviarle cartas aún estando en el colegio aquel día, las cuales recibía Hermione y las dejaba sobre la cama de Lia. Realmente la extrañaba.

Más tarde, llamaron a Hermione para poder ir donde "Fluffy" como lo había llamado Hagrid, para tratar de ver lo que escondía, era seguro que era la piedra, y las esperanzas de encontrar a Lia estaban ahí. ¿Para qué la información? Tan sólo servía para perder más tiempo, muy valioso sobre la vida de Amelia.

°

Amelia soplaba una pequeña pelusa que había ahí y que luego volvía hacia ella, era su única compañía y su única diversión en esa habitación, ya que la criatura ya no estaba ahí. Ni siquiera sabía en qué día vivía, o qué hora era, si era de noche o de día, o si seguía viva o era un fantasma. Lo último lo descartó ya que seguía sintiendo dolor, aunque fuera casi imposible ya que casi se acostumbraba a ese hechizo que se sabía de memoria.

Se incorporó quedándose sentada en el suelo y miró sus pies. No podía hacer nada ya que sus manos las tenía atadas a la espalda, y su varita había desaparecido cuando se la llevó la criatura. Estaba sucia, y su ropa estaba rasgada, tenía sangre seca por diferentes partes de su cuerpo que le salía de la nariz y orejas cuando le lanzaban el hechizo y pequeños rasguños por todo el cuerpo.
Trató de levantarse manteniendo el equilibrio y sin manos, ayudándose con la pared, no podía caminar pero podía saltar, con todas sus fuerzas se acercó a un pequeño escritorio que estaba casi frente a ella y pudo ver un frasco con tinta y con una pluma, también había una libreta negra con su nombre y supo que era su libreta, se la habían robado también, pero a su lado había una libreta más grande y gruesa. Estaba abierto por la mitad, donde habían comenzado a escribir.

𝐄𝐥 𝐦𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐀𝐦𝐞𝐥𝐢𝐚 𝕎𝕙𝕚𝕥𝕖|¦ MALFOY'sʰⁱˢᵗᵒʳʸDonde viven las historias. Descúbrelo ahora