MIOPÍA [YOONMIN]♡ COMPLETA

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3 de marzo de 2026

- Amor ya llegamos.- Escuchó Jimin desde la cocina y rápidamente fue hasta la entrada de la casa que hace unos meses habían comprado con sus ahorros. Ya que consideraban que un pequeño departamento no era suficiente para vivir junto a su hija.

- Hola gatito.- Jimin se acercó a su esposo y le dio un fugaz beso en los labios.- Hola solcito.- Está vez se agachó a la altura de la pequeña y beso su frente.- ¿Como te ha ido en la escuelita?- Preguntó cómo siempre lo hacía cada vez que Sol llegaba a casa.

- B-bien.- Respondió.

Jimin se pudo dar cuenta de que su hija mentía; ya que no le contestó con la alegría que la caracteriza y agachó su cabeza.

Jimin observó a su esposo y este alzó sus hombros en señal de que no sabía lo que pasaba.

- Ven aquí mi vida.- Dijo Yoongi llevando a la pequeña hasta el mueble y la sentó. Ambos padres también lo hicieron.- ¿Qué sucede?... Papá puede notar que estás triste.

- Es que- comenzó a hablar despacio-... Hay una niña nueva...

- ¿Y?

- Ella y sus amigas  dicen que soy un patito feo y también me... Me pegó u-un chicle en... en el cabello.- Sol les mostró el chicle que estaba pegado entre los mechones de su cabello recogido en colita.

Jimin primero jadeo sorprendido y luego sintió la sangre llegar a su rostro de puro coraje.

-  Mocosa hija de...

- Está bien cielo- interrumpió Yoongi y reprendió a Jimin con la mirada-, vamos a hablar con la maestra y con los padres de esa niña.

- Si bebé y si esa mocosa te vuelve a molestar, no te dejes. La agarras de las mechas.

-¡Jimin! - Exclamó Yoongi.- Nadie va a agarrar de las mechas a nadie.

- Pero...

- Pero nada Jimin. Esto lo solucionamos como personas adultas y educadas, no le enseñes a la niña a pelear.

Jimin rodó los ojos- Es defenderse no pelear.

Yoongi suspiro.- La maestra solucionará ese problema.- Yoongi se levantó del mueble.- Ve a cambiarte para que comas Sol.- Comenzó a caminar hasta la habitación.

Jimin espero hasta que esté lo suficientemente lejos y miro a su hija.

- Tiene razón papá, no le jales de las mechas, pero... Puedes pegarle un chicle en la cabeza.

- P-pero eso no está bien.

- Si, pero... Ash olvídalo, eres más madura que yo.- Se levantó y estiró sus brazos hacia Sol.- Ven aquí.- La pequeña sonrió y salto hacia sus brazos.- Puede que tú no lo hagas, pero si te sigue molestando iré yo a pegarle el chicle en su horrible cabeza.