AitanaNo se cuando tiempo llevamos abrazados y si soy sincera no hay ninguna razón para haber acabado en esa posición. Pero supongo que lo que acaba de pasar es un tanto incómodo y en parte agradezco que en esta posición no haya posibilidad de mirarle a la cara porque sigo sin ser capaz. Es él quien se separa poco a poco de mi y la expresión de su cara no es la que esperaba.
-Perdón -me termina de desorientar.
-¿Que? ¿Por que? -pregunto confusa.
-Estamos los dos un poco vulnerables y no está bien aprovecharse de la situación -sigo sin entender que es lo que le pasa.
-Lo siento, no te entiendo.
-Pues que acabo de dejar a mi novia, y tu ex ha aparecido y ha despertado sentimientos en ti, no sé Aitana, no es el momento.
Sus palabras me duelen, no voy a mentir, igual me he montado castillos en el aire pero me he ilusionado después de ese beso, y mira que ha pasado poco tiempo, aunque igual llevaba unos días ilusionada. Algo que no me cuadra es la insistencia de Miriam en que él sentía algo por mi porque viendo su reacción no debía ser del todo verdad. Respecto a lo que ha dicho de Vicente creo que está un poco confuso y necesito que entienda que mi ex no ha despertado sentimientos en mi como él dice, no al menos de la forma en que los despertó cuando lo conocí.
-Luis -le miro a los ojos para dar mayor credibilidad a mis palabras- con Vicente ya no hay absolutamente nada, si quise quedar con él es porque merezco explicaciones a ciertas actitudes, porque le quise mucho y necesito convencerme de que él también.
Él suspira y dirige su mirada hacia el suelo. Como no veo que vaya a decir nada continuo hablando, es posible que no me guste la respuesta a lo que voy a preguntarle pero me sale sin pensar.
-¿Te arrepientes? -le miro intentando que levante su vista hacia mi- Solo ha sido un beso, si lo prefieres podemos olvidarlo.
En realidad no entiendo por qué soy yo la que está diciéndole eso, al fin y al cabo ha sido él el que se ha lanzado, se supone que quería hacerlo.
-No es eso -levanta la mirada- No quiero olvidarlo.
-¿Entonces? -pregunto confundida.
-Despacio ¿vale? Vamos a conocernos como amigos y a dejar que pase el tiempo, luego ya se verá -no entiendo ese cambio tan repentino de actitud pero tiene razón en que no deberíamos precipitarnos- Hasta ahora hemos estado muy bien ¿no?
Asiento y sonrío levemente, mis ilusiones han ido creciendo sin poder evitarlo y no me gusta esta sensación. Me acerca hacia él y me da un tierno abrazo que me hace sentirme pequeña.
-No te enfades anda -deja un beso en mi cabeza.
-No me enfado -le sonrío.
Hemos dado un paso más aunque después lo hemos retrocedido pero parece que estamos en el mismo sitio que cuando entré hace una hora a esa casa así que nuestra relación vuelve a su lugar después de este desliz.
-Saca la guitarra porfi, quiero oírte cantar -le digo con voz de niña buena.
-¿Y no prefieres que te enseñe a tocar? -me pregunta evitando cantar él.
-Luego si eso, ahora quiero escucharte a ti -niega sonriendo- No te vas a escapar Luis.
Al final cede y va a por su guitarra. Toca unas cuantas canciones y al final se suelta y parece estar cómodo conmigo. La tarde pasa entre canciones y con más tonteo del habitual. Al final consigo tocar algunos acordes decentemente y me mira con cara de orgullo. Sin darme ni cuenta ya se ha hecho de noche y me levanto despidiéndome para irme. Ya en la puerta empiezo a ponerme nerviosas. ¿Como me despido de él? Se supone que hemos quedado en que seremos amigos de momento pero cada vez que veo sus labios solo quiero besarlos.
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NUNCA PUDE REEMPLAZARTE
RomanceAitana no está pasando por su mejor momento. Sus padres se han separado y ella está un poco dolida con su madre, así que decide que hará la carrera alejada de su familia. Su destino será Valencia. Allí vive desde hace 3 años Luis, un chico amante de...