LA CHICA RICA

(XIII) "EL IDIOTA"

MACA POV.

Abro los ojos con pesadez, siento que un autobús paso encima de mí. Los ojos me arden, y siento el cuerpo pesado.
A un lado mío está Santi durmiendo, su mano está rodeando mi cintura.
Dios mio, pensé que todo lo que había pasado en la fiesta había sido un sueño.
Me levantó de la cama muy sigilosamente, sin mover a Santi, no quería interrumpir su sueño.
Fui al baño y regrese al cuarto, mi celular comenzó a vibrar.
Lo tomé y leí que en la pantalla aparecía el nombre de "Robert", no contesté, no quería hablar con él.
Un mensaje me llegó justo cuando él colgó.
"Robert: Tú mamá se puso mal, está en el hospital"
Rápidamente salí del cuarto y le marqué a Abril, ella al instante contesto.
—¿Abril? Y mamá ¿Cómo está?-Le pregunté.
—Mal, se cayó de las escaleras y la encontré inconsciente, la llevaron a terapia intensiva -Me respondió llorando.
—¿En que hospital está? Voy para allá -Le digo.
Le dejé una nota a Santi y salí rápidamente al hospital y llegue en diez minutos.
—¿Ya hay noticias? -Le pregunto a Abril.
—No -Me dice abrazándome mientras llorá.
—¿Que hacés tu aquí? -Escucho la fría voz de mi padre detrás de mi.
—Vine a ver a mi mamá -Digo girandome para verlo.
—No tienes nada que hacer aquí, tu ya no eres parte de esta familia.
—Me importa una mierda, yo vine a ver a mi mamá -Le respondo, levantando la voz.
No sé ni de dónde saque la valentía para hablarle así.
El levantó su mano para pegarme, pero Robert se la detuvo.
—Suegro, creó que no es él momento ni el lugar.
—Tienes razón -Le dice mi padre.
—Maca, ven conmigo -Me dice Robert, tomando mi mano, llevándome a la salida del hospital.
—Sueltame -le digo una vez fuera.
—¿Quieres explicarme que coño pasa contigo? -Me dice apretando los dientes -Te he llamado y no contestas mis llamadas, ni mensajes ¿No crees que ya llevaste esté capricho muy lejos?
—¿Cuál capricho? -Le pregunto enojada.
—El de irte de casa de tus padres. Nos vamos a casar y tú te desapareces de pronto.
—¿Perdón? Yo no quiero casarme contigo. Yo quiero estudiar, ser algo más que tú esposa.
El se ríe.
—Es que ese es tú destinó, ser mi esposa, complacerme en todo -Me dice acariciando mi cabello, yo me aparto.
—Vaya destinó de mierda... Casarme con un estúpido como tú...
Y de pronto siento cómo mi mejilla arde, pues el me ha abofeteado.
—Aquí la única estúpida eres tú ¿Sabés cuántas quisieran estar en tú lugar? Casada conmigo.
Me hierve la sangre, no sé de dónde saco la fuerza pero lo abofeteó también.
—No puedo creer que estuve tanto tiempo con alguien cómo tú, eres una mierda de persona -Le grito.
El tira de mi cabello.
—Pues te guste o no, vas a terminar casandote conmigo ¿Crees que vas a poderte ir? -Me dice riendo.
Siento como me suelta de golpe. Cuándo logró levantarme veo a Santiago encima de él golpeándolo...