Aquí Lía y Lou liberando al mundo historias cortas que escribimos del chico explosivo x lector femenino. Las publicaciones serán completamente aleatorias y se irán subiendo conforme las creemos y corrijamos.
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Ambientación: Academia U.A. - Heights Alliance; Centro comercial
Tiempo: En línea con el manga. Los alumnos ya conviven en el edificio de dormitorios
Contenido: Para todos los públicos. Noviazgo (con mucha paciencia) con Bakugō.
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- Oh, dios mío... ¿Qué ha ocurrido aquí?
Esas fueron las únicas palabras que Yaoyorozu pudo pronunciar antes de cubrir su boca con su mano, consternada por lo que sus ojos ónice estaban observando, pero era incapaz de procesar. El adulto frente a ella suspiró exasperado, peinado su desordenado cabello azabache mientras miraba a intervalos a RecoveryGirl y a otra alumna que se acercaba alegremente trotando hacia ellos.
- Al parecer... – comenzó a explicar la chica de recuperación tras aclarar su garganta – Midoriya y Todoroki han sufrido el efecto de algún tipo de quirk que los ha... encogido.
- ¿Pero ellos están bien? – inquirió Yaoyorozu bajando la vista al suelo – Quiero decir... Ellos son-
- ¡Deku-kun! ¿Qué te ocurrió? ¡Ah, Todoroki-kun también!
Uraraka finalmente había alcanzado al grupo e intervino apresuradamente. Sus pequeñas cejas se alzaron mientras su temblorosa mano señalaba a las dos pequeñas figuras que había a los pies de Aizawa. Un par de ojos verdes y otro heterocromático se fijaron en ella, balbuceando palabras incoherentes que solo dejaron más confusas a las chicas.
- Tienen que cuidar de ellos – sentenció Aizawa, apretando el puente de su nariz entre sus dedos índice y pulgar – RecoveryGirl intentará buscar una solución en la enfermería y yo, junto con el profesor Vlad, buscaremos al causante de este embrollo. Hasta entonces, cuento con vosotras y con el resto de la clase A para hacerse cargo y partícipe de estos mocosos.
- Bah, bah...
Una tierna llamada de atención ablandó un poco a su tutor, el cual flexionó sus rodillas y se agachó a la altura de Todoroki. Aizawa pasó sus manos por debajo de los brazos de su alumno y lo elevó en el aire, avanzando unos pocos pasos hasta que Yaoyorozu extendió sus propios brazos para tomar a Todoroki en su regazo, ambos con un leve rubor en sus mejillas.
- Aizawa-sensei...
- No tenemos tiempo que perder – interrumpió a Uraraka – Si hay alguna novedad con el cambio de sus cuerpos, llámenme.
El corazón de Uraraka dio un vuelco cuando sintió un tirón en su calcetín, bajando la vista para encontrarse con unos brillantes ojos verdes que la observaban con inocencia. Sus piernas se volvieron gelatina al arrodillarse lentamente y ver como Midoriya apoyaba las palmas en sus rodillas para ponerse en pie y estabilizarse, saludando con la mano a Aizawa que salía del edificio de dormitorios. La visión de Midoriya quedó obstruida por un bastón en forma de jeringuilla, sobresaltándole y haciéndole perder el equilibrio para caer sobre su trasero con un suave golpe.
