Llegué tan temprano al club de radio que Riku y Roxas aún no hacían acto de presencia. En el ajustado salón abarrotado de discos de acetato solo se hallaba Ventus, que a propósito estaba dentro de la cabina dando sus últimas recomendaciones de estudio en su programa Paper with ink. Le dediqué una sonrisa gentil y me senté frente al vidrio que lo aislaba.—Si utilizan resaltadores de colores para estudiar será más fácil memorizar ciertos conceptos y palabras —decía Ven con una voz sumamente dulce—. Y esto ligado al buen habito de reservar un par de horas al día para adelantar todos los deberes puede ser muy útil. La clave es concentración y método. —explicó, se coloró un poco—. Por ejemplo, yo tiendo a ser muy distraído, mi mamá dice que tengo déficit de atención, entonces para estudiar todos los días me compro un chocolate y cuando llega la hora de hacer la tarea lo divido en cuatro partes y no las como hasta no terminar los obligaciones de cada asignatura correspondiente. Un premio es una buena forma de luchar contra la distracción y la procrastinación.
»Bueno, creo que eso es todo por ahora amigos, ya saben que siempre pueden sintonizar la emisora nueve punto ocho a las 9:30a.m todos los días, para seguir escuchando consejos de buenos hábitos de estudio en Paper with ink. Que tengan una linda tarde.
Ventus se quitó los audífonos, se quitó del micrófono y dejó sonando la canción Titanium de Sia. Me gusta, quizás no es lo que escucho habitualmente, pero sin duda es buena.
—Hola Xion, hoy llegas temprano —me saludó pasando a mi lado para buscar algunos cd en una caja azul detrás de la puerta—. Acá tengo todas las bandas y cantantes que me pediste que buscara, en lo personal no me agrada mucho el rock pesado y todo eso, pero comparto el gusto por los Beatles.
—Gracias, Ven —dije cariñosamente—. ¿Te importa si paso aquí la tarde? Son cerca de las 12:00p.m y hoy mi turno era desde las 7:00a.m hasta las 11:30a.m, y como igual tengo que atender mi programa, yo...
—Claro, tranquila, no hay problema, así me haces compañía —respondió tomando asiento junto a mi y subiéndose la mochila a las piernas para registrarla. Noté que tenía algunos broches de pokemon, el símbolo de la trifuerza y un colgante de verde con forma de estrella, me pareció adorable, como el bolso de un niño—. ¡Aquí lo tengo! —exclamó sacando por fin un envase que contenía varios cupcake con glaseado de chocolate.
Me lo tendió con timidez.
—Son para ti, yo los hice —comenzó sonando culpable—. Sé que me dijiste que no te debía nada, pero es que verdad estoy muy muy agradecido contigo por participar en la radio y no tenía idea de cual tarea de matemática podía suerte útil y... y... uhm...
—Oh, Ven, es esto muy considerado de tu parte —le agradecí con un abrazo breve pero fuerte y me dispuse a probar uno de los pastelillos.
Mordí el primero. Oh por dios, saben igual que los que sirvieron en la cena con mi padre. Me sentí tremendamente novata en área, los mios jamás consiguen este acabado tan profesional ni esta textura. Tiene demasiado talento.
—Ventus, el día de mi muerte quiero que sirvas estas cosas en el funeral, son deliciosas.
Se puso en exceso rojo, creo que no está habituado a los halagos.
—Yo... yo... yo creía —tuve que forzar los oídos para entender sus murmullos—. Yo antes creía que eras cruel y me daba miedo hablarte, porque a veces, de lejos, cuando te sientas en una mesa apartada de la cafetería a comer y empiezas a escuchar musica te ves satánica, y te la pasas sola, como ese chico rudo de la sección C-3, y tienes perforaciones en las orejas, y siempre que te oía hablar estabas insultando a las fuerzas superiores que rigen a la sociedad —cogió más aire—. M-me daba la impresión de que odiabas a todo el mundo. Por eso envíe a Riku para que te pidiera este favor, creí que si lo hacía yo mismo me golpearías.
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• C r y L i g h t •
FanficXion odia muchas cosas, como cualquier persona, pero si hay algo que de verdad aborrece es a la sociedad femenina y ser parte de ella, porque existen un sinfín de estupideces de las que no puede evitar formar parte. Como si la historia se repitiera...