-Will tiene en su poder un tipo de rastreador, como un JPS en autos, pero este es para helicópteros y este conecta al de Thomas. La conexión se perdió hace más de una hora y su celular no está disponible, sin línea. De seguro ha podido perder el control o algo parecido. El tiempo no estaba de su parte.
Hablo Charles y yo le escuchaba lento, como si hubiera sido su voz puesta lentamente. Él siguió hablando para nosotras pero no podía prestarle más atención.
Suzie había cogido de mi mano dirigiéndome al blanco sofá para que me sentara junto a ella y me había mantenido allí las últimas horas. Will había vuelto junto a un chico muy similar a él. Podía notar solo como algunas personas entraban y como Charles se movía de acá para allá junto a Will y aquella gente.
Mi pierna comenzó a moverse lenta, un pequeño nervioso movimiento.
Suzie no me había hablado nada, pero si notaba que de repente me observaba. Yo no era capaz en ese momento de dirigir palabra. No podía hacer nada.
Junte mis manos en medio de mis piernas, presionando una contra la otra con fuerza, manteniendo mi mirada sobre ellas también, viendo como se movían nerviosas por el movimiento de mi pierna.
Hace cinco horas que se había ido.
Mi sensación era que el tiempo avanzaba extrañamente. Generando algo totalmente irritable dentro de mí. ¿Por qué no insistí en que se quedara? ¿Por qué no? Él lo hubiera hecho si se lo hubiera pedido con urgencia.
Mire hacia un lado observando el aparato telefónico y tomándolo luego de unos segundos marcando tontamente su número nuevamente. Él debía contestar.
La llamada no entro. Le di al botón de apagado, mirando luego el aparato entre mis manos siendo mi vista cubierta por una espesa capa de lagrimas.
Comenzaba a sentir terror. Comenzaba a sentir ese tipo de miedo que atrapa tu corazón y cada espacio de tu mente por el hecho de que una de las posibilidades ahora mismo era que podía no volver a verle nunca más.
Levante la mirada de golpe, para luego también levantar mi cuerpo desde el sillón rápidamente. Tire el aparato telefónico lejos y solo me dedique a caminar hasta las dos grandes puertas blancas.
-¡Oye! ¡No iras a ningún lado!
Dijo Suzie con fuerza tomando de mi brazo.
-Suzie...
Susurré. Mi respiración levemente se acelero produciendo en medio de mi pecho un pequeño dolor intenso.
-Debo ir a buscarle...
Dije. Mi amiga me observo con leve tristeza.
-Allison, no servirá de nada. Nadie sabe donde se encuentra.
Eso golpeo aun mas contra mí. ¿Qué le había sucedido?
-Quédate, por favor...
Me pidió ella. Le mire unos segundos, bajando la mirada de a poco luego hasta poder mirar solo el suelo del lugar.
Mire a través del gran ventanal como la lluvia chocaba contra todo lo que había en la gran superficie que lucía como patio trasero del pent-house.
No quería permanecer aquí. No quería estar aquí escuchando todo lo que estaban planeando por hacer para buscarle. Solo quería encontrarme nuevamente en esa zona tan segura para mí que él totalmente generaba cuando estábamos juntos.
Suspire largamente con pesar. Que esto termine ya. Que esta desesperación, toda la angustia y miedo que sentía dentro se acaben de una vez por todas. Que por favor girara y me reencontrara con esos ojos verdes brillantes que sentía inundaban mi interior con toda esa maravillosamente forma de querer que él tenía.
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Mía & Para Siempre: Burning Up
Novela Juvenil¿Qué haces cuando te sientes perdida en el dolor? ¿Qué sucede? ¿Qué hay que esperar? ¿O simplemente dejarse caer ahí? Había todo dejado ya caerse dentro pero seguía en pie, porque eso era el propósito final del dolor. No interesa como estés destroz...