Con mimo atrapa mi labio inferior para luego morderlo y llevárselo entre sus dientes. Algo está mal en mí, siempre disfruté su manera de besar, posesiva, demandante, pero ahora Caleb se cruza en mi mente y esto me sabe a traición, a que no debería estar besándola, a que necesito despegarla de mi piel, de mi boca por lo que eso hago.
-Malaika no- consigo decir casi como una súplica, ella me ve con la cabeza gacha a través de sus pestañas en la tenue luz del salón, entretanto muerde su labio inferior. Pongo una mano en su pecho notando sus pequeños senos sin intención-. Mai, me alegro de verte bien, pero si quieres sentar cabeza...
-Estás con alguien- afirma antes de que termine la oración, yo asiento- ¡Mierda! - pasa una mano nerviosa por su cabeza-. Aby yo nunca dejé de amarte- insiste.
-Lo siento Mai, yo te olvidé hace mucho- digo muy a mi pesar, no quiero romperle el corazón.
-Auch...- susurra- ¿No tengo ni una mínima posibilidad contigo? -suspiro mientras niego con mi cabeza.
-La persona con la que estoy es muy importante para mí, no es alguien más- confieso.
Sé que no está contenta, no esperaba que la rechazara así, pero me siento bien haciéndolo; si estuviera con cualquier otra persona, Mai y yo ya estaríamos follando en el baño. Pero Caleb no es cualquier persona para mí, él realmente me importa y, por primera vez en mi vida, quiero hacer las cosas bien, más aún si es con él. 'La Leona' asiente antes de darse media vuelta e irse por la misma puerta por la que entró, dejándome sola en el oscuro salón, preguntándome ¿Cómo es que puedo tener tanta mala suerte? Aunque al cabo de unos minutos, decido seguir con mi día.
-Qué preciosa eres- dicen a mis espaldas mientras me coloco el sweater por la cabeza. Al voltearme sonrío, Caleb está apoyado en uno de los probadores ubicados al costado de la entrada, observándome con una bonita sonrisa a boca cerrada.
-¿Hace cuánto estás ahí parado? -Curioseo quitándome el cabello del interior de la prenda, él se encoje de hombros.
-Perdí la cuenta cuando iba por los diez minutos- río.
-Exagerado- acuso haciéndolo reír.
Camina hasta mí a su paso lento, meticuloso, sortea la banqueta pasando las piernas por encima y me pega al casillero con esa sonrisa que derretiría todo el glaciar Perito Moreno en un segundo. Sus manos me toman por la cara para besarme de la manera más dulce, ni el chocolate me gusta tanto como sus besos. Separándose de mí, despeja mi rostro de cualquier cabello que pueda tener para volver a depositar un casto beso en la comisura de mis labios.
-¿Cómo estás? -Se preocupa acariciándome las mejillas con sus pulgares
-¿Ahora? -Pregunto haciéndolo sonreír, ya sabe la respuesta, siempre digo que estoy bien cuando estoy con él.
-Mejor así nena ¿Nos vamos? -Asiento, Rodo debe estar esperándonos para cerrar.
El rubio que me vuelve loca toma sus cosas del casillero que le corresponde, y se coloca la mochila negra sobre la espalda antes de tenderme la mano. Lo imito para luego aceptar su tierna oferta, y salimos del lugar apagando las luces detrás de nosotros. Cuando llegamos a la recepción me sorprendo de ver a Mai ¿Por qué está aquí aún? Caleb no suelta mi mano, y, de hecho, tampoco quiero que lo haga. 'La Leona' se sorprende de verme de la mano de quien conoció minutos atrás, incluso su cara no es muy feliz ahora.
-Aquí estás...- dice Rodo, yo lo interrumpo antes de que hable.
-Caleb dormirá en casa hoy-aseguro, Rodo se queda de cuadros, parece tener un cortocircuito en su cabeza antes de resolverlo y hablar.
ESTÁS LEYENDO
Eterno Retorno [+18]
RomanceCuando el regreso de un viejo amor desentierre todos tus miedos ¿Qué harás al respecto? A lo largo de su vida, la hermética, pero atrevida Ivelle ha soportado pérdidas y dolor, aun así, ha sabido sobrellevar sus miedos formando una coraza alrededor...