Hasta que la herencia nos separe

Epílogo

Llego a casa de mi madre y subo hasta su habitación ya que no la encuentro abajo. Cada vez que vengo sonrío y dejo todos mis problemas afuera, ya al salir en la mañana los recojo porque son parte de mi. Pero a ella no me traigo mi estrés y mis frustraciones amorosas y laborales. A ella le traigo amor.

La veo en la cama y me asusto por completo cuando veo un doctor a su lado y a mi padre, este se ve preocupado y la cara del doctor es lo peor que tengo que ver. Pero a ella, ese rostro pálido, sus labios temblorosos y esa fragilidad que se refleja, no me hace pensar que ocurre nada bueno. En cambio ella sonríe.

Me extiende su mano para que yo me acerque y mi corazón empieza a latir rápido, más rápido, mucho más rápido de la cuenta y temo saber lo que ocurre.

—Mamá..., ¿qué ocurre? —pregunto y miro a los demás —. Papá, ¿qué pasa? —vuelvo a pregúntar pero ella sigue extiendo la mano y se la tomó sentándome en la cama.

—Déjenme con mi hijo —dice y veo como salen de la habitación.

—Ven amor, no pasa nada..., todo está bien mi niño, sólo fue una recaída, normal —dice sin dejar de sonreír. Me hace acostar en su pecho y antes de saberlo una lágrima recorre por mi rostro y quizás haya caído en su pecho.

—Mamá, no quiero... no quiero verte así. Si se pudiera cumplir mi deseo, te pediría a ti eternamente madre mía, pediría que no te me vayas nunca y...

Ella no me deja hablar porque me silencia.

—Ya me tienes eternamente. Porque siempre te cuidaré. Ahora... ahora te cantaré aquella canción de cuna que te cantaba cuando eras un niño, aunque para mi siempre lo serás —susurró sin dejar de acariciar mi cabello.

Un Ángel desde cielo
Siempre te cuidará
Un Ángel desde cielo
Siempre te observará
Sé un niño bueno
Que mami te va a cuidar
Y nadie en este mundo
Te va a lastimar
Na na na na na na
Nadie en este mundo
Te lastimará

—Te amo mamá —susurré.

—Cántame tú, mi niño —susurró con sus ojos a medio cerrar. Se ve agotada.

—¿Qué podría cantar?

—Cántame la que me dedicaste en mi cumpleaños número 38.

Recordé cual era y sonreí. Me levanté sentándome en la cama y sostuve su mano.

"Close your eyes,
Let me tell you all the reasons why
I think you're one of a kind.

Here' s to you,
The one that always pulls us through,
You always do what you gotta do,
You're one of a kind,
Thank God you're mine.

You're an angel dressed in armor,
You're the fear in every fight,
You're my life and my safe harbor
Where the sun sets every night.
And if my love is blind, I don't wanna see the light. "

(Cierra tus ojos
Déjame decirte todas las razones por las cuales
Creo que eres mi tipo de chica.

Esto es para ti
Eres la que siempre nos conlleva a lo mejor
Siempre haces lo que debes hacer
Eres mi tipo de chica
Gracias a Dios eres mía.

Eres un ángel vestido con armadura
Eres ese miedo que hay en cada pelea
Eres mi vida y mi refugio secreto
Donde el sol se pone de noche
Y si mi amor es ciego, no quiero ver la luz.)

Mi madre sonríe y recupera un sonrojo en su mejilla. Aprieta mis manos y sus ojos se abren mirándome con orgullo mientras los míos se inundan de lágrimas. Aún así sido cantando.