𝟏𝟑𝟒𝟑𝟒𝟎 | Relatos ficticios, tomando a los siete chicos de bangtan seonyeondan como principales protagonistas.
Tu mirada sofocante, todavía giro a tu alrededor y nada ha cambiado. Pero si el amor no tiene nombre, todo ha cambiado ─ BTS, 134340...
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─Deberías tener cuidado.
─Si, gracias.─ respondí bruscamente, el silencio que causó me hizo sentir mal.─ Lo siento.
─Está bien─ su suave voz sonó a mi lado, una de sus manos pasó mi hombro y lo apretó.
─No, no lo está.─ respondí─ sé que no tenías malas intenciones.
─Jamás, eres mi hermana y quiero apoyarte.─ suspiré y asentí─ Vine desde Japón hace poco y lo siento, de verdad, debí venir hace cinco años.
─Relájate hermanito, tenías que terminar tus estudios.
─Pero en las vacaciones pude haber venido a visitarte.
─Oye...
─Lo lamento─ su voz se apagó─ de verdad lo hago─ su voz entrecortada me partía el alma, mis dedos buscaron entrelazarse con los míos sobre mi hombro, la brisa pasaba sobre mi rostro.
Escuché su sollozo y sabía que estaba llorando pude sentir la lágrima bajar por mi ojo.
─No quería enfrentar el hecho de que jamás me volverías a ver.
─Que ahora esté ciega no significa que no te recuerde. ─sonreí triste.
─Pero no me vez desde hace cinco años...
─Ya relájate, tu no fuiste el culpable.
─Pero tampoco estuve allí para evitarlo.
─Ya cállate─ me levanté del cómodo asiento que estaba en la terraza y rompo la conexión de nuestras manos, él inocentemente tomó mi mano tímido y me guió hacia dentro del departamento.
Mi hermano menor había logrado una beca en una universidad en Japón hace años, tenía que estar ahí meses antes para instalarse. Yo lo llevé al aeropuerto y después un mensaje me llegó, minutos después mis amigos y yo tuvimos una increíble noche, me sobrepasé y cuando ya era hora de irnos sucedió, accidente, dos muertos y una ciega, solo dos salieron intactos, bueno, mejor que nosotros, Min Yoongi y Jeon Jungkook fueron los únicos con solo raspones y heridas leves.
Los seguía viendo... chiste de ciegos.
Seguían siendo mis amigos, seguimos en contacto, habíamos superado todo, yo no demasiado, pero ya no me incómoda hablar del tema.
Minutos después de yo, escuchar películas y el verlas junto a mí, cuando íbamos a ver la tercera llegó mi novio. Saludó a mi hermano primero.
─Bien, ya has llegado, yo me iré.
─¿Por qué? No es necesario que alguien tenga que cuidarme.
─No me refería a eso.─ reí, realmente estaba bastante fuera de lugar a comparación de mis comentarios molestosos, estaba muy serio.
