Capitulo 36

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Con un movimiento suave Sasuke aplasto mis labios con los suyos y comenzó a mover su boca de una manera suave y tierna. Sentí como si mi cuerpo flotase en el aire y nada más existiera, solo nosotros dos. Puse mis manos en sus hombros y lo acerque aún más a mí. Sasuke dejo caer su cuerpo sobre la cama y yo quede sobre él. Lanzo un quejido.

―Lo lamento cariño― Dije con ternura.

Él reía y apretaba sus ojos debido al dolor. Baje de él y me puse a un lado mientras acariciaba su mejilla y susurraba palabras de afecto

― A veces olvido que aun tienes un par de moretones que te duelen.

― No es nada― Acaricio mi mejilla.

― ¿Sabes algo Sakura? Te amo

Lo mire fijamente a ese par de ojos color onix. Amor puro era lo único que resplandecía en su mirada.

Lentamente me recosté en su pecho y el comenzó a acariciar mi espalda.
También te amo, solo lo pensé más no lo dije.

― Estoy ansioso porque el tiempo pase rápido y la casa se encuentre llena de risas y llantos de nuestro primer hijo― Ahora acariciaba mi cabello.

Cerré los ojos y me aferre a él. De nuevo lanzo un quejido acompañado de una carcajada Sonora.

― ¿Es muy intenso el dolor? ― Pregunte mientras con mi mano recorría su costado.

― Solo quiero abrazarte y que me abraces tan fuerte como puedas.

― Amor, por ti puedo aguantar muchas cosas... muchísimas, aun cuando impliquen dolor― Me abrazo.

Por un momento me costó trabajo respirar. Aun cuando mi interior se encontraba lleno de dolor y tristeza, las palabras de Sasuke lograban alivianar la carga y convertir esos sentimientos horribles, en hermosos.

― ¿Serías capaz de odiarme? ― Pregunte elevando la vista― ¿Algún día?

Jimin inclinó su cabeza y me miro confundido.

― ¿Qué pasa contigo, Sakura? ― Acarició mi frente.

― Quiero que me digas que pasa por esa cabecita tuya...últimamente has estado distante de mí y haces preguntas extrañas.

― No es nada, es solo que el embarazo me pone sentimental― Sonreí― Hay algo que debes saber Sasuke

― ¿Y qué es? ― Pregunto con una media sonrisa.

― Desde que me case contigo siempre he tenido un miedo― Suspire― Y es el que me olvides.

Sentí como mi cabeza se separaba del pecho de Sasuke y mi cuerpo se deslizaba hacia arriba. Sasuke me jalaba con cuidado y me ponía a la misma altura que su mirada.

― Es más probable que me olvide de mi mismo, a que me olvide de ti, amor mío.

Tome su cara entre mis manos y choque su frente con la mía.

― Gracias por todo, Sasuke ― Susurre contra sus labios.

El termino cerrando el espacio entre nosotros y me beso con ternura. Me tomaba por los hombros y sus labios se separaban de los míos una y otra vez para volver a unirse.

― Necesito salir corriendo de esta habitación. De otra manera... podría pasar algo más― Me sonroje.

― Te entiendo― Sonrió― Lastima que aún no me encuentro en condiciones.

Una sonrisa se dibujó en mis labios y tome su mano.

― Tengo sed. Iré a la cocina, ¿quieres algo?

― Estoy bien, gracias― Dio un ligero apretón a mi mano y después la libero―

Baje hasta la cocina y tome un vaso de agua. Me senté en una silla y recargue mi frente en el desayunador. Cerré mis ojos y respire hondo.

― No puedo divorciarme, no puedo― Comencé a hablar en voz alta.

― ¿Cómo separarte de la persona que amas?

― No hay manera, puesto que una persona nunca se separa de un ser amado― Dijo Chino

Alarmada me levante y abrí los ojos. Después de todo mamá tenía razón, hablar contigo misma en voz alta no trae consigo nada bueno.

― Chino ― No lo dije pero lo articule.

― Te has puesto tan pálida como un fantasma― Se sentó a un lado.

― ¿Por qué querrías divorciarte de Sasuke?

Yo la mire por un instante pero después desvíe la mirada.

― No intentes negarlo, sé muy bien lo que escuche― Tomo una manzana del frutero― Te escucho.

― Yo...me he enamorado de alguien más― Dije tratando de sonar convincente.

― Vaya tontería la que acabas de decir― Mordió la manzana ― Te contradices.

― Cuando mencione lo de separarme de la persona a la que amo, no me refería a Sasuke, sino a Sai, así se llama.

― Suponiendo que eso fuera cierto, ¿por qué no puedes divorciarte de Sasuke? ― Levanto una ceja.

― Porque como ya sabes, estoy esperando un hijo o hija suyo―Cada vez que lo decía una alegría inundaba mi ser.

― Además Sasuke tiene mucho dinero.

Sentí horrible decir aquella última frase, pero ¿de qué otra manera podría convencerla? Ella me miraba detenidamente, como si estuviese analizando mis ojos. Una vez más desvié la mirada y ella se levanto.

― Bueno, será mejor que se lo digas cuanto antes, me refiero al divorcio― Nuevamente mordió la manzana.

― Solo que si yo fuera tu se lo diría sin involucrar su dinero, con eso solo terminarías matándolo.

― Chino, necesitare tu ayuda― Dije con tristeza.

― Planeo decírselo a Sasuke mañana mismo, después me iré y bueno, quiero que lo cuides... que no permitas que alguien más lo lastime.

― ¿Y dices que no lo amas? ― Pregunto con una sonrisa incrédula.

― Me he encariñado con él, eso es todo― Mire al suelo.

― Estoy segura de que alguna mujer tomará mi lugar... pero no quiero que Sasuke resulte lastimado.

― Sasuke jamás se fijará en alguien que no seas tú, Sakura― Comenzó a caminar― Es una verdadera lástima que no te des cuenta de que tienes a un hombre perfecto a tu lado.

Después de aquella charla, las horas pasaron volando rápidamente. Era de madrugada y a pesar de que cerraba los ojos, no lograba conciliar el sueño. Miré el reloj y eran las 3:38 am.

― ¿No puedes dormir? ― Susurro Sasuke en mi oído.

― No sabía que estas despierto― Dije con calma.

― Aunque supongo que no lo estabas... sino que yo te he despertado con tanto movimiento.

― Así es. Pero me inquieta el saber porque no puedes dormir― Rodeo mi cintura.

― ¿Te preocupa algo?.

¿Qué si me preocupa algo? Por todos los cielos, en este momento todo me preocupaba, comenzando por el hecho de que tenía que pedirle el divorcio.

― Intentemos dormir― Gire mi cuerpo para quedar de frente a él― ¿Si?

―En otras palabras no quieres hablar del tema― Me beso.

― Se supone que debemos confiar el uno en el otro.

― Lo sé pero... en estos momentos solo quiero dormir― Lo separe ligeramente de mi.

― Te dejare dormir después de que me des un beso― Dijo con una tierna sonrisa

Give Love A TryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora