Mariposas

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Todos llegaron a una pequeña isla cerca de Aguas turbias, ahí Sylas y Ekko ayudaron a poner a Qiyana en la arena de forma cuidadosa.

E: Qiyana... - Ekko se le notaba preocupado.

S: Karo necesito que la cures de ya.

K: Claro. - Empieza a sanar sus heridas pero aún así no cerraban rápido y la pérdida de sangre era notoria así que el usurpador robó parte del poder de ella para que el proceso de curación fuera más rápido y de forma increíble lo estaban logrando entre los dos estaban cerrando las heridas de la princesa.

E: Resiste Qiyana. - La mencionada lo ve a duras penas y de a poco perdía la visión. - Resiste.

Después de eso Qiyana perdió el conocimiento y cuando despertó se encontraba en una cabaña hecha de los materiales que estaban en aquella Isla se levantó con cuidado y se dolió un poco su espalda pero no toquen la mayoría de su cuerpo ya estaba casi en perfecto estado salió para ver qué es lo que había pasado y notó que ya era de noche.

Q: Dormí demasiado. - En eso ve que Ekko estaba sin camisa, trayendo comida, eso hizo que Qiyana sintiera un cosquilleo y se sonrojara, Ekko la mira.

E: Qiyana. - Se acerca a ella y la abraza con cuidado. - Me alegra que estés bien. - Esta sólo está muy roja Y responde al abrazo a duras penas.

Q: Aja... Mmm... Gracias por... Intentar frenar a esa perra. - Toca el cuerpo de Ekko y por alguna extraña razón ella sentía ese cosquilleo en su estómago y la primera vez que había hecho lo mismo no lo sentía era todo muy diferente ahora.

E: ¿Estas bien?

Q: ¿Qué? Si estoy bien, no importa, sólo quiero encontrar esa maldita perra y hacerla pagar por todo lo que me hizo. - En eso llega karo y ve a los dos, ella planea algo para ellos.

Sylas apareció y vio que Qiyana ya estaba despierta y hablando con el chico así que mejor los dejo un poco más de tiempo solos.

E: Por cierto tu aro, Sylas logró rescatarlo del mar y está colgado Enfrente de tu cama. - Señala el arma de Qiyana.

Q: Gracias... - lo mira y el a ella, ambos se quedan así durante unos segundos hasta que deciden poner una excusa para retirarse. - Debo descansar un poco más.

E: Si, yo tengo que preparar todavía la fogata y la comida o mejor dicho la cena. - Ambos se fueron y fue cuando Karo entro con Qiyana.

K: Veo que ya despertarse. - Qiyana estaba sumergida en sus pensamientos. - Tierra llamando a Qiyana.

Q: Eh, perdón estaba pensando en...

K: Ekko. - Qiyana se puso algo roja y negaba con la cabeza.

Q: Claro que no, es solo que mi ropa fue destruida pero mi mochila fue salvada así que aun tengo dos mudas iguales.

K: Eso es bueno y dime... ¿Con son los músculos de Ekko?

Q: Duros. - Qiyana se dio cuenta de lo que acababa de decir rápidamente tomó a la otra chica de su ropa algo enojada.

K: Tranquila, solo estoy viendo que te gusta.

Q: ¿Gustarme él? No me hagas reír, aunque... Es una gran persona, a pesar de que yo le he tratado muy mal Él ha visto por mí en muchas ocasiones.

K: Deberías dejar que tus sentimientos fluyan, además esta isla es perfecta para que el amor fluya.

Q: Ya te dije que yo no siento nada por él así que deja de insistir. - Sentencio alzando su puño amenazando con golpearla.

K: Ya esta bien, aun así veras que las cosas cambiaran en esta isla. - Se retira y deja a Qiyana pensando pero lo que no sabían era que Karo y Sylas tenían planeado algo especial para los dos.

Continuará...

Qiyana Vs Las CampeonasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora