Almas De Hierro © (En Edicion)

TREINTA Y SIETE

—Le tengo miedo a morir ahogada—le digo apenada.

—Nunca habías estado en un bote—concluyo, como si la respuesta fuera obvia.

Y tiene toda la razón, todos tienen un miedo o en mi cado una fobia y es el morir ahogada, muchas veces  he  soñado las posibles formas de cómo sucedería.

Como la última vez que soñé, todavía esta latente el recuerdo de mi sueño haciendo que teme mas el estar en el yate.

Flashback

El sol que se filtraba atreves del parabrisas por momentos, el reflejo golpeaba mis ojos haciendo que los cierre debido la molestia, el sonido de mi celular me hizo desviar la vista de la carretera.

Al ver nuevamente al asiento de copiloto donde se encontraba. Pude ver que la pantalla decía ''Papa'', estiro mi mano sin despegar la vista del frente, tiento en el asiento hasta que el mis dedos tocan el celular, lo arrastro hasta agárralo completamente.

Descuelgo la llamada.

— ¿Que paso padre?

—quería saber si venias en camino, hija—resonó la voz de mi padre con su habitual acento italiano.

—Si ,ya voy en camino, me encuentro en la carretera cerca del 2do peaje. —le digo.

—Tu madre estaba preocupada—dice el motivo de su repentina llamada, causando que suelte una risa .

Sostengo el teléfono con mi hombro, al tener que doblar en una curva.

La carretera que a simple vista parece interminable, el lado izquierdo de esta llena de césped bien cuidado donde habian varios animales alimentandose de este, mientras que al lado derecho se encontraba el mar, podía ver un poco mas allá del barandal las grades olas que se desvanecían al chocar con las rocas.

—dígale a mama que no se preocupe, y que la quiero mucho, si —suelto un suspiro al terminar.

—esta bien hija, ve al paso. Y cuídate—me pide.

—esta bien, te quiero.

—yo igual hija.

El silencio es sustituido por un pitido. La llamada se ha acabado.

Arrojo el celular hacia el asiento.

Un reflejo del sol causo que cerrara los ojos, al volver a abrirlos unos caballos se encuentran en medio de la carretera, el impacto con el costado de unos de ellos me hizo perder el control del vehículo, trato de volver a estabilizar el vehículo, pero fue tarde. Había atravesado la el metal de seguridad y me dirigía directo hacia el agua.

Fin del flashback

—Ven— me tiende la mano, dudosa la acepto.

— ¿Que haces?—le pregunto, nos dirigíamos hacia un mueble cerca del timón.

me sienta con delicadeza.

—vamos a superar ese miedo.

Le miro escandalizada.

—no-no-no—tartamudeo a la vez que niego frenéticamente.

—Si, si, si—me contradice haciendo una voz femenina.

Suelto una risa, que debido al miedo se escucha un poco extraña.

—has tenido pesadillas debido a esto, verdad.

—Si—admito.

—Tienes que superar esto—me dice compresivo.

—como si fuera tan fácil.

Aparto mi vista hacia el castillo a lo lejos.

—pase lo mismo pero fue muy diferente a tu miedo. Y en realidad es muy vergonzoso—se ríe.

—a que le temías.

—A los payasos. —murmura.

— ¿Payasos?—digo sin creerlo.

—Así mismo como oyes—afirma.

—Te voy a vendar los ojos y respiraras lento mientras atravesamos el rio—me dice  lo que plane hacer.

—Esta bien—acepto.

Espero no arrepentirme.

!Hola!, ¿ como están?

Espero que bien.

Ya hemos llegado al capitulo 37, y les quiero agradecer por darle una oportunidad a mi historia, por sus votos y comentarios.

!Nos vemos el próximo Domingo!