Almas De Hierro © (En Edicion)

ONCE

Camino por los pasillos en camino a mi primera clase, solo deseo que las clases pasen rápido para poder irme de aquí y llegar a casa para encerrarme en mi habitación.

Estaba por llegar al salón de matemáticas cuando escucho que me llaman. Me doy media vuelta para descubrir quien me ha estado llamando y es cuando veo a Arianna correr hacia mí me quedo en la misma posición para esperar que llegue a mi y saber que es tan urgente para venir así.

-A...Amanda te... he estado llamando desde hace rato-dice sin aliento - pareces que estabas ida en tus pensamientos.

- no te equivocas

- ¿por que tanta urgencia de buscarme?- añado

Se queda un momento pensando. Puedo asegurar que con la corrida que dio se le había olvidado la razón de buscarme.

-ya es que hay dos hombres buscándote en la dirección.

-¿los conozco?-pregunto con inseguridad, estoy segura que no son los que me cuidan hubieran venido directamente a mi.

-creo que no en realidad dan un poco de miedo - se hace un movimiento simulando un estremecimiento.

-el director le ha dado la autorización de venir a buscarte -confiesa- los escuche mientras fui a dejar unos papeles

-de hecho viene con el profesor de matemáticas

No lo puedo creer el director le había dado su palabra a mi padre de que no iba a dar ninguna información de mi persona ni si me encontraba en este instituto pero veo que no cumplió las normas de este y cualquier instituto lo prohíben pero veo que no le dio mucha importancia.

-tengo que Salir de aquí-digo aterrada, tengo que encontrar una salida rápido.

No dejo que Arianna diga algo otra vez y comienzo a correr hacia el pasillo contrario, debo salir de aquí ellos viene a cualquier cosa menos a hablar de eso estoy segura.

Corro sin detenerme a pesar de que los pasillos están llenos de estudiantes y choque con algunos con el único pensamiento de encontrar una salida.

Luego de estar corriendo unos 5 minutos veo a los lejos la puerta de emergencia que en llevara directamente con la parte trasera del instituto.

No tengo idea como consiguieron pasar a los que me siguen en la entrada pero no hay tiempo para detenerme a pensar las formas de cómo entraron.

Corro hasta la puerta espero que no esta cerrada, por que con tal de salir no me importara tirarme por alguna ventana del segundo piso. Se que pueda sonar una decisión un poco exagerada es eso o esperar para saber que es lo que eso tipos quieren.

Al dar mi mano con el pomo de la puerta vi con alegría como esta cedió para así empujarla y encontrarme con el callejón atrás del instituto que da a dos calles una a la izquierda y otra a la derecha.

Baje rápidamente las escaleras para así correr hacia la derecha pero antes de llegar al final de esta un vehículo se interpuso en mi camino , asustada por la inesperada acción doy pasos atrás para darme la vuelta y correr hacia el otro extremo, pero con lo que mi vista vio en el otro lado del callejón me hizo detenerme abruptamente.

Tres hombres totalmente desconocidos bajan de un vehículo muy parecido al otro que esta detrás de mí, asustada miro para los lados buscando una salida y mi vista da con la misma puerta de la que he salido apunto de correr hacia ella pero una voz a mi espalda me lo impide.

-no te atrevas ,linda-dice una voz desconocida dando una media vuelta para ver de quien es la voz encuentro otros tres hombre vestidos como los otros tres delante de mi, con unos trajes negros y unas miradas dirigidas hacia mi que me dan a saber que no son unas buenas personas.

-¿Que quieren de mi?- logre murmurar luego de un rato el miedo hacia que me fuera imposible decir algo coherente.

-llego la hora de que te llevemos ante el rey.