-¡Mario! ¿Dónde dejaste mi computadora?
-¡Tú fuiste la última que la usó!
"Sé que fuiste tú, Mario. Yo siempre la dejo en el mismo lugar..."
Despertar a las seis de la mañana para ir a la universidad y llevar media hora buscando mi computadora, me estaba fastidiando la existencia.
-Mejor me voy, usaré las computadoras de la biblioteca. -Me acerqué al baño donde Mario se afeitaba la poca barba que le había crecido en dos semanas.
-¿Te llevo, hermosa? -Dio un último recorrido con la navaja por su quijada y me miró.
-No, Mario. Usaré mi auto hoy. En el reporte del clima dijeron que iba a llover. -Me acerqué a la pequeña estantería de toallas y le pasé una para que se secara su rostro.
-Si vienes temprano podemos ir a cenar, cariño y luego al cine. -Me dijo y yo me acerqué por el costado para darle un beso rápido en la mejilla.
-Es viernes de cena y cine. Por supuesto que vengo temprano. -Le sonreí para dar la vuelta y salir del baño.
-Antes que te vayas, ha llegado una carta. La recibí por tí. La dejé sobre el taburete. -Terminó de asearse y se acercó a mi en el marco de la puerta.
-Va. Grazie, Mario. Si puedes buscar la computadora me harías un enorme favor, tengo unos proyectos guardados ahí. -Tomé mi mochila y mi celular de la cama.
-Por supuesto, cuando la encuentre te envío un mensaje. -Me acompañó a la cocina y yo tomé la carta.
-Nos vemos para la cena. Chao, te cuidas, Mario. -Le di un pequeño beso y salí de mi apartamento.
Me puse los "AirPods" y la música comenzó a sonar.
-"Yo no sé lo que está pasando. Yo no sé lo que te han dicho, pero te sigo extrañando, tengo el orgullo en el piso. Mira que estoy en cero, cero, cero sin tí. Porque la vida cambia en un segundo, pero el amor es más profundo..." -Canté mientras el ascensor llegaba al recibidor.
"Poché, es que tú en mi mente sigues muy adentro, adentro..."
Como siempre, se me hizo inevitable no unir la canción con aquella Peli-Azul.
La puerta se abrió y me encontré con Kim esperándome para ir juntas a la universidad.
-Buenos días, Calle. ¿Cómo estas? -Me saludó con un beso en la mejilla y seguimos el camino hacia el estacionamiento.
-Buonguiorno, Kim... Todo bien, aunque ya me alteré. -Saqué la llave de mi auto cuando nos acercamos a él.
-¿Tan temprano?
-Sí, no encontré mi computadora. Tendré que ir a la biblioteca cuando salga. -Abrí mi auto y entramos.
-¿Mario de nuevo? -Se abrochó el cinturón y yo hice lo mismo.
-Sí, dijo que fui yo, pero sabes que siempre dejo la computadora...
-Sobre el taburete en la cocina antes de dormir. -Completó la frase.
-Exacto.
A dos calles de llegar a la universidad, Kim tomó la carta en sus manos.
-Me llegó la carta. -Comentó y la volvió a dejar en su lugar.
-Entonces, me evitas la pereza de leerla. -Le hice un puchero y ella sonrió.
-¿Quién se niega a tus pucheros? Bueno, en resumen que... reunirán a todos los inquilinos, uno por uno. Harán unas renovaciones en el edificio y quieren el consentimiento de cada cual.
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A Un Click: Siempre Tú Y Yo EDITANDO
Fanfiction}Segunda parte de: "A un click {Calle & Poché}". Si eres nuevo leyéndome, es mejor que leas la primera antes de comenzar con ésta.{ Ha pasado un año desde que Daniela Calle vio por última vez a Blue. Ha pasado un año intentado olvidarla para continu...