*Vuelvo a insertar ese +18 más inservible que el gobernador de mi País.*
-Yo te ayudo. -Me dijo y se acercó a mí.
Llevó su boca a mi cuello para dejar un beso antes de apartarse y quitarme la camisa de una vez.
-Eres hermosa, Calle. -Me susurró al oído.
Sentí sus manos en el broche de mi sujetador. En un segundo mis pechos estaban expuestos y sus ojos en ellos.
-Al menos termina tu trabajo. -Le dije al tomar su barbilla y obligarla a levantar su mirada hasta mi rostro.
-Es que son perfectas. -Llevó su mano derecha a mi seno derecho y lo acarició sutilmente.
Acto que ya alteraba mis sentidos y me producía escalofríos.
-Te dejo disfrutar si terminas. -Recurrí al soborno o se quedaría así por mucho tiempo y yo quería sentir sus manos recorrer todo mi cuerpo. Sentir sus besos y sentir como me amaba.
De inmediato, me desabotonó el pantalón y lo bajó poco a poco haciendo que mis piernas, como era costumbre ante su roce, de debilitaran.
Poché tomó nuestras prendas tiradas en el suelo y las colgó pobre la puerta.
-Ven. -Me extendió la mano y me llevó debajo de la pluma. Abrió la llave y el agua comenzó a caer en forma de lluvia mojándome aún con mi prenda inferior puesta.
Para mí sorpresa el agua no estaba fría ni caliente, estaba perfecta.
Poché llevó sus manos a mi pecho y volvió a masajear, pero esta vez con agarres un poco más fuertes que me hacían morderme el labio inferior. Soltó mi pecho izquierdo y llevó su boca a él.
Sentir el agua recorrer nuestros cuerpos casi al aire libre y tener a Poché succionando mi seno me estaba dando motivos extras suficientes para tener cosquillas en todo mi cuerpo y para desearla aún más.
Con su boca y lengua continuó su tarea en mi seno, mientras que con la mano que acariciaba el otro fue bajando hasta llegar a mi tanga.
La cual estaba mojada en todos los sentidos. Su mano acariciándome por encima me hacía mover mis caderas en busca de más.
-Poché... -Gemí cuando, aún por encima de la tela, hizo presión sobre mi clítoris.
-Me encantas. -Susurró mientras dejaba descansar mi pecho para irse al otro.
Me estaba torturando y no se lo iba a permitir.
Tomé su mano y yo misma la introduje dentro de la tela.
-Es ahí donde debes tocar. -Le dije con la voz temblorosa de placer y ella de inmediato comenzó a pasear sus dedos por toda mi feminidad.
Cansada de aguantar estar de pie me recosté un poco de la pared que para mí suerte era fija.
ESTÁS LEYENDO
A Un Click: Siempre Tú Y Yo EDITANDO
Fanfic}Segunda parte de: "A un click {Calle & Poché}". Si eres nuevo leyéndome, es mejor que leas la primera antes de comenzar con ésta.{ Ha pasado un año desde que Daniela Calle vio por última vez a Blue. Ha pasado un año intentado olvidarla para continu...