Me incorporé y crucé el salón para llegar al gran pasillo en el que se encontraba la puerta hacia la habitación de mi amigo. Cuando llegué a ella, la abrí sin siquiera avisar de que iba a hacerlo. Por suerte o por desgracia, Richard estaba desnudo en el interior y yo me quedé de pie, observándolo mientras mis mejillas se tornaban color carmesí.
-T-taron... ¿Me das un segundo?-él también se había sonrojado y, ahora, cubría sus partes íntimas con ambas manos.
-Rich... Lo siento.-salí de la habitación, cerrando la puerta rápidamente. Unos segundos después, salió él.
-T, podrías tocar a la puerta para evitar este tipo de situaciones.-me pidió entre risas.-¿Qué querías?
-D-desayunar... Richard, lo siento, yo no quería... Bueno, está claro que no quería pero...
-Ya, deja de disculparte.-se introdujo en la cocina.-¿Café?
-Por favor.-aún sentía cómo ardían mis mejillas.
-Tardará un minuto.-se aproximó a mí.-¿Qué tal has dormido?
-B-bien, pasé un poco de frío al principio pero me acostumbré.
-Lo vi, yo te tapé por la mañana.
-¡Oh! Gracias, todo un detalle de tu parte.-le besé la mejilla en señal de agradecimiento.
-Esta noche te toca la cama a ti.-avisó y fue a comprobar la cafetera.
-¿Y tú?
-En el sofá, eres el invitado, tengo que consentirte.
-No, duerme tú en la cama. No he venido a tu casa para echarte de tu habitación.
-Bueno, si no te molesta... Podemos dormir juntos. La cama es grande.-propuso mientras cogía dos tazas y servía el café.
-Me parece bien.-acepté.
-Aquí tienes.-me acercó la taza.-¿Qué vamos a hacer hoy?
-Enséñame Los Ángeles.
-Taron, nos perderíamos, lo único que conozco de la ciudad es el supermercado que hay en la esquina.-ambos reímos.-Es Brandon el que conoce la zona.
-Bueno pues... Háblame de Brandon.
-¿De verdad has viajado tantos kilómetros para que te hable de mi novio?-asentí mientras sorbía el líquido que contenía el recipiente de cerámica.-Nos conocimos hace bastante, tres años o así. Él salía con Sam Smith así que quedamos solo como amigos. Un par de días antes de nuestras vacaciones, me propuso que fuésemos de fiesta y surgió la chispa.
-Qué intenso.-me burlé.
-Es mejor que nada.-sonrió.
-La verdad es que no vine por eso...
-¿Entonces...?
-Quiero que me digas que pasó la última noche que estuvimos juntos en Londres, no me acuerdo de nada.
-¿De nada?
-Nada.-confirmé.
-Taron.-se rió.-Me pediste que te besara.-sus mejillas volvieron a enrojecerse.
-¿Yo?¿Lo hiciste?
-Sí.
-¿Cómo fue?-pregunté curioso.
-¿De verdad no te acuerdas?
-Te prometo que lo he olvidado todo.
-Pues no sé, fue un beso normal.
-¿Dije algo más?
-No... A ver el beso no lo pediste tú.-admitió finalmente.
-¿Fuiste tú?
-No, fue tu perro, él quería que nos besáramos.-añadió sarcásticamente.
-Este Rocky... -me reí.
-No sé por qué lo hice, de verdad.
-¿Te gusto?-pregunté sin tapujos. Richard miró hacia otro lado, rompiendo el contacto visual.-¡Rich, responde!-pero entonces, tocaron al timbre.
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Serendipia - Madderton
FanficSerendipia. (s.) Hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta. *** Todo comenzó con un papel en una película más que añadir a mi filmografía. Un hecho insignificante cambió nuestras vidas para siempre...