Cap: 4

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Noha

Apenas son las 6:00 de la mañana y ya llevo rato despierto. Estoy sentado frente a mi escritorio mientras toco mi guitarra, no me he duchado ni vestido; pero si he cepillado mis dientes. Solo estoy aquí tocando una melodía cualquiera que me ha llegado a la imaginación esta mañana.

Por un momento me quedo perdido entre lo más profundo de mis pensamientos. Pienso en la chica nueva de Portland que hoy iniciará sus clases en el instituto. No sé por qué se habrá quedado tan petrificada al verme ayer, me estaba viendo como a un alienígena o yo que sé. Se sentía extraño, mucho más estando Lana allí.

Lana es mi novia desde hace ya dos años. Llevamos una relación complicada, pero nos queremos, y supongo que solo eso debe de importar.
Pero siguiendo en la chica nueva, yo tampoco sé qué tanto le miraba, desde que noté que me estaba viendo yo tampoco le quité la vista de encima.

Tampoco es que ella me halla agradado mucho. Se nota un tanto cerrada, tímida y perdida. Es bastante extraña, aunque sin negarlo, muy bonita.

En tanto pensar y pensar me había desviado de todo sonido a mi al rededor, tanto que no me había dado cuenta que mamá estaba del otro lado de la puerta tocando y diciendo al mismo tiempo.

Mamá: ¡Noha cariño ¿ya te has duchado?! ¡Date prisa se te hace tarde!

_Le respondo.

Noha: si mamá ya voy.

_Me pongo de pie lo más rápido posible, pongo mi guitarra en su estuche y luego encima de mi cama.
Tomo la toalla y me abro paso hacia el baño.

Me ducho lo más pronto que puedo, al salir seco mi piel y me visto. Ropa oscura como siempre, es raro verme vestido con ropa de colores claros o muy llamativos, rara vez me visto así.

Al terminar de vestirme, tomo mi mochila, mi guitarra, y mi teléfono para salir de la habitación.

Al bajar esta mamá en la sala tomando su café, ella se pone de pie y me dice.

Mamá: ¿Vas a desayunar?

Noha: No mamá, desayunaré algo en el instituto. Tengo prisa.

_ Ella me da un beso en la mejilla junto con su bendición. Se despide de mi y yo salgo de la casa.
Al salir está esperándome Marco, es uno de los choferes de la casa, siempre es él, quien me lleva al instituto. Subo al auto, es una jeepeta Hyundai de color blanco. Inmediatamente estamos dentro del auto, él lo enciende y ponemos marcha hacia el instituto.

20 minutos más tarde.

Ya llegamos al instituto el cual me queda un poco lejos de casa, no mucho la verdad. En seguida me bajo de el auto y a paso apurado me conduzco hasta el instituto, no quiero llegar tarde. La srta Rosalee me vigila cada vez que puede y no quiero que le valla a decir a la directora que he llegado tarde una vez más.

A punto de poner un pie dentro del instituto suena mi teléfono, me detengo y lo saco de mi bolsillo delantero para contestar.

Al mirar la pantalla de mi celular noto que es Shawn, él es mi mejor amigo y el de Stefan, sin más solo contesto.

Llamada

Noha: ¡Hey Shawn! ¿Qué pasó?

Shawn: Estoy dentro esperándote a ti y a Stefan, y ninguno de los dos se apura por aparecer. ¿Vendrán a clases? ¿Tú vas a venir?

Noha: Si ya estoy entrando al instituto jefe, ¿quiere esperar unos minutos más?

_Shawn siempre a sido como la cabeza que razona todo en nuestro grupo de amigos, siempre está al pendiente de todo y de todos. Parece nuestra madre.

El GuitarristaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora